Jesús Millan Muñoz.- Negar la posibilidad o la necesidad de una gobernanza mundial, en las varias posibilidades existentes, eso sí, siempre conseguido ese fin, en paz y mutuo acuerdo, tolerancia, democracia, etc. O afirmarlo y aceptarlo. Ambas soluciones pueden ser muy fáciles.
Pero ante la situación que tenemos, con múltiples ramificaciones, hay que plantearse, este problema, que quizás a nadie guste, pero que quizás, sea la única solución. Pero antes que se adopte una respuesta, hay que buscar las posibilidades teóricas existentes. Al menos algunas.
– Cierto es, que pasar de un “antiguo régimen al nuevo régimen” pasar de la edad moderna a la edad contemporánea, fue muy difícil. Costó mucho sufrimiento, mucha sangre, muchas angustias.
Quizás, ahora, el ser humano, puede y debe plantearse, a ir cambiando de la etapa moderna o actual o contemporánea a una edad metamoderna o metacontemporánea o postmoderna, a y en casi todos los sentidos.
Quizás, posiblemente, se “dejen muchas realidades en el camino que sean buenas, pero otras que ya no son efectivas, quizás se alcancen, metas y conceptos, que no son buenos, pero quizás, otros son necesarios”.
Es una cuestión de supervivencia, hoy, existen problemas que solo un Gobierno Mundial podría resolver. En su doble o triple forma: un Gobierno Mundial, quizás formado por la federación de todos los Estados Mundiales, segundo, Organismos Internacionales que vayan adquiriendo poderes de los Estados Actuales, tercero, el caminar hacia tres o cuatro Estados Continentales en el mundo. Pero todos los sistemas, irlos creando en paz, en tolerancia, sin guerras, bajo los derechos humanos, en democracia…
Puede, que incluso la idea, nos produce miedo y temor, de tanto poder “sintetizado en un sistema Legislativo-Jurídico-Judicial, pero también, sea de la forma que sea, los actuales Estados, serían o formarían parte de esos Estados Mayores, es decir, seguirían teniendo y disponiendo algunos poderes, sería una Federación…
– En ese Orden Mundial, sea de una manera o sea de otra, si existen sociedades-naciones-Estados-Culturas que no quieren formar parte de ellos, se les dejaría que no conformarán parte de ese Estado Mundial, o solo de parte de los Organismos Internacionales…
De esta forma, se podría evitar el gran temor que existen por parte de los ciudadanos, poderes locales o regionales, idiosincrasias, etnias, lenguas, etc.
Pero con la enorme evolución de la tecnología, con los cambios demográficos mundiales, con el conocimiento científico y con multitud de variables que han cambiando el mundo, y desde luego, ya con megaempresas que están instaladas a nivel mundial, además de problemas que solo parece tienen solución, si existe una Autoridad Democrática Mundial, y si al mismo tiempo, las grandes elites mundiales, sea una o varias, se ponen de acuerdo entre ellas, y al mismo tiempo, los pueblos. Parece que es el horizonte más racional y razonable hacia el que nos debemos encaminar… ¡Aunque nos produzca temor y temblor!
– Bajo la fórmula similar de los Estados Unidos de América, de alguna manera, la que está intentando hacer Europa, cada región o Estado tendría algunos poderes, pero todos forman una Federación, una unidad. Por lo cual, existen soluciones y poderes que están en el Estado Federal, y otros que están en cada Estado Federado.
Esta fórmula, con las variantes que se crean conveniente, se podrían ir aplicando, aceptándolas por el mismo pueblo, si quieren irse federando en Estados Mayores, y al mismo tiempo, todo el resto de poderes, reales o institucionales…
De tal forma, que el individuo psicológicamente, siga viviendo-existiendo en su ciudad-comarca, que es diríamos su patria pequeña, al mismo tiempo, en “su antiguo Estado-nación que ahora formaría parte o sería una región de un Estado Federal”, y al mismo tiempo, vive-existe en un Estado Federal, que ha aceptado en paz y en tolerancia y respeto a los Derechos Humanos y en Democracia. Por lo cual, diríamos que “su identidad profunda”, no quedaría rota o destruida, ni tergiversada.
¿Porque la cuestión, es simple y sencilla, todos los padres y madres, que vieron a sus hijos morir, en la primera o segunda guerra mundial, o todos los que en el siglo veinte, en multitud de guerras que han existido, no habría sido mejor para ellos, vivir en unos Estados Unidos de Europa, sea de la forma que sea, en los cuales, Rusia, ni Francia, ni Alemania, ni Gran Bretaña, ni Italia hubiesen hecho coaliciones para terminar en dos guerras cruentas e innombrables, con episodios dentro de ellas, que tardaremos siglos en poder entender…?
¿Ese padre y madre, que hubiese preferido perder a su hijo, sufrir una guerra o dos mundial en Europa, o “vivir o existir en una Federación de Estados Europeos”, se denomine como se denomine, se materialice o concretice, de una manera o de otra, siempre en paz y tolerancia…
¿Pero la gran duda, es las cuatro o cinco grandes elites mundiales existentes, cada una en un continente geográfico y cultural, serán capaces de ponerse de acuerdo entre ellas, para ir hacia este horizonte, y en segundo lugar, la veintena de grandes culturas-ideologías-civilizaciones que está dividido el mundo, y por tanto, la creencia de sus pueblos, serán capaces de querer vivir en paz, entre ellas, en los diversos territorios del mundo?
¡¿Pero este es el gran problema, y también la gran solución, por eso se camina hacia esta dirección o tenemos que plantearnos caminar hacia esta meta, siempre en paz, tolerancia, mutuo acuerdo, derechos humanos, democracia…?!
¡Negarse caminar, al menos teóricamente hacia una de las posibles soluciones y horizontes con esta finalidad, pero después, los mismos, indican cómo resolver, las docenas de guerras y conflictos locales que existen siempre en el mundo, el hambre y las epidemias, el cambio climático, las enormes migraciones y, otros problemas, que parece, al menos, desde el hoy, que con Organismos Internacionales con Poder, sean de un tipo o de otro, podrían resolver mejor la situación, es decir, resolver o aminorar o erradicar esos problemas y otros que existen en el horizonte…!
