La empresa concesionaria del servicio de autobuses urbanos de Puertollano, Aibus, aplicará a partir de mañana jueves, 2 de abril, un nuevo ajuste en sus líneas para adaptarlo a la nueva situación de movilidad estrictamente esencial.
Según ha comunicado al Ayuntamiento en una carta, la oferta de servicios se adecua a la nueva situación de movilidad esencial decretada por el Gobierno de España el pasado domingo debido a la crisis del coronavirus. El ajuste se aplicará desde este jueves y reducirá aún más la presencia de autobuses con respecto a una jornada habitual.
En cumplimiento de las medidas extraordinarias para la prevención del COVID-19, se ha tomado la decisión de suspender el servicio de la Línea 2 (barriada Cañamares) y el Microbús 2, por lo que sólo quedarían la Línea 1 (Campo de Fútbol), y la Línea 4 (barriada Las Mercedes), que circularán todos los días, incluidos fines de semana y festivos.
Restricción de la movilidad
Desde que el 14 de marzo de 2020 el Gobierno de España mediante el RD 463/2020 decreta el Estado de Alarma, Aibus ha apostado por mantener el servicio de transporte urbano de viajeros en nuestra ciudad, de modo que todos los ciudadanos tuvieran garantizada la movilidad, y con las medidas que entraron en vigor la noche del domingo 29 de marzo se restringía aun más la actividad. A última hora de este lunes, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana publicó una orden que dicta que la oferta del servicio de transporte público debe ser reducida para adaptarla a la nueva situación «a la mayor brevedad posible».
Medidas
El resto de medidas en cuanto a prevención, forma de pago y gratuidad para los sanitarios y trabajadores asistenciales, queda igual que en las medidas adoptadas con motivo de la anterior orden.
No sentarse en el asiento delantero derecho, evitar el pago en efectivo en autobuses o reducir el horario de venta del bonobús, fueron algunas de las medidas adicionales que la empresa concesionaria del servicio de autobuses urbanos e interurbanos, Aibus, y el Ayuntamiento de aprobaron el pasado 22 de marzo para contribuir a frenar el avance del coronavirus en la ciudad a lo largo de la red de transporte público. Estas medidas complementaban a su vez otras ya decididas desde los primeros días de la crisis sanitaria, como fueron la limitación del aforo de los autobuses, la desinfección de los mismos o proporcionar a los conductores guantes o gel desinfectante. Las medidas adoptadas conllevaron ya una primera modificación en las líneas ante el cierre de centros educativos e instalaciones públicas, y su recomendación de que la ciudadanía permanezca en sus domicilios.
Recordemos que, asimismo, se aprobó la obligatoriedad de pago con tarjetas Bonobús, pensionista y/o discapacitado, para evitar posibles contagios de los conductores; la anulación del asiento delantero derecho para protección del conductor; y la reducción del horario de atención al público en el kiosko de venta de bonobuses, situado en el Paseo de San Gregorio frente al edificio Tauro (de 9,00 a 12,00 horas, de lunes a viernes).
Tanto desde la empresa del transporte urbano como desde el departamento municipal de Movilidad se insiste en la necesidad de reducir o hacer un uso responsable del transporte público, especialmente en el caso particular de las personas mayores y de quienes padecen alguna enfermedad, así como cuidadores y quienes convivan con sectores de población vulnerable.