Una cita imperdible para hacer contactos y para tomar el pulso al mercado internacional del vino a granel. Así definen los productores de Castilla-La Mancha, bodegas y cooperativas de primer y segundo grado, su experiencia en la World Bulk Wine Exhibition (WBWE) de Ámsterdam, la feria en la que durante dos días se está negociando el 80% de la cosecha del mundo.
Así lo considera Fernando Santos, representante de Vialcon, cooperativa de segundo grado de Cuenca, que considera que la WBWE siempre es una experiencia positiva porque es un buen escaparate para darse a conocer, adquirir contactos y abrirse hueco en un mercado que este año está condicionado por la bajada de la producción. “Este año la cosecha ha sido menor, la sensación que tenemos es que los compradores están un poco frenados porque piensan que el precio va a ir bajando a lo largo de las semanas”, asegura.
La percepción del presidente de El Progreso, Jesús Julián Casanova, que acude a la feria bajo el paraguas de la cooperativa de segundo grado Vidasol, en la que se integran empresas vitivinícolas de Ciudad Real y Toledo, es que la feria está teniendo mucho ambiente de clientes y compradores. La sintonía, a su juicio, es parecida a la de otros años ya que Ámsterdam es un punto de referencia mundial, este año marcado por la bajada de la producción.
“Hay cierta tranquilidad por la tensión lógica de los precios, el comprador piensa que va a bajar y nosotros como vendedores creemos que se va a mantener. En el tinto no hay problema y en el blanco es donde está la duda, aunque lo cierto es que no hay tanto volumen y aunque tenemos amenazas como Argentina que está fijando precios muy agresivos, su producción es de 4 millones de hectólitros y en el mundo se venden 250 millones, así que realmente no es tanto. Nosotros tenemos que permanecer tranquilos, tenemos todo el año por delante”, afirma.
También Anselmo Cuesta, en representación de Hispánica de Comercialización, cooperativa de segundo grado formada por cinco cooperativas de distintas zonas de la región, que acude a la WBWE desde hace tres años, tiene sensaciones muy positivas en esta edición. “Hemos visto más afluencia y más interés por parte de los clientes desde el primer momento que el año pasado”, explica.
Como productores de tinto de grado y color en Hispánica son optimistas respecto a los precios. “Es una de las incertidumbres que está marcando el mercado del vino y aunque hemos tenido menos producción tanto en España como en Europa, arrastramos existencias y ese es un dato a tener en cuenta. Parece que los precios se están conteniendo y creemos que se van a mantener, tenemos que ser optimistas sobre todo en los tintos de calidad, en los varietales estamos pidiendo precios superiores al ejercicio anterior y no vemos que el comprador se muestre reticente”, asegura.
Sobre la WBWE
Un total de 260 expositores (450 bodegas representadas) de 24 países productores participan hasta hoy en la World Bulk Wine Exhibition, entre ellos 39 expositores castellano-manchegos representando a más de 80 bodegas y cooperativas de primer grado de Castilla-La Mancha.
Se trata de bodegas y cooperativas de las provincias de Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Albacete entre las que hay 43 que acuden bajo el paraguas de las cooperativas de segundo grado de la región, concretamente de Vialcon, DCOOP Sección Vino, Manchuela Wines Group, Vidasol e Hispánica Wines.
El sector del granel genera el 40% del vino que se exporta a nivel mundial, una cifra que representa un valor de más de 3.000 millones de euros y de la cual un porcentaje importante se negociará este lunes y martes en el RAI de Ámsterdam en el marco de la World Bulk Wine Exhibition, WBWE.
La WBWE, impulsada por la empresa castellano-manchega Pomona Keepers con el respaldo de Globalcaja y el apoyo del IPEX de Castilla-La Mancha, es más que una plataforma que en estos años ha ayudado a regular y mejorar el mercado del granel en el mundo, es también un escenario donde se analizan y debaten las nuevas tendencias del sector.