Miguel Peña. Miembro de la Ejecutiva Regional del PSOE.- Hace apenas dos semanas , en la madrugada del sábado 26 tuvimos que retrasar el reloj una hora con la intención de aprovechar mejor la luz solar, lo que se viene llamando pasar al horario de invierno. Estos cambios horarios que nos afectan fisiológicamente se suelen resolver en un par de días, y la adaptación suele ser fácil para todos.
Pero hay un cambio que si nos puede afectar , y que desgraciadamente si se produce no tardaremos un par de días en digerir, sino al menos 4 años, y es que el próximo domingo, sobre las once de la noche , a la hora en que vayamos conociendo los resultados electorales, es posible que tengamos que retrasar los relojes 50 años.
Volver 50 años atrás el país, no es una cosa baladí, es preocupante, y desgraciadamente es una posibilidad real . El discurso de la ultraderecha de VOX , puede llegar a conformar la influencia ideológica de un eventual gobierno de derechas. Porque no nos engañemos, en las actuales circunstancias , la única opción si no tenemos un gobierno del PSOE , es un gobierno de derechas, con el PP, C´s y VOX.
Por eso es tan importante acudir a votar y conformar un gobierno progresista fuerte. Porque retrasar 50 años el reloj es volver a una España preconstitucional, una España sin derechos en la que se mueve con soltura el discurso de la ultraderecha. Para alguien como yo, nacido en democracia y que solo ha visto crecer nuestro estado social, democrático y de derecho, es realmente increíble escuchar las barbaridades de la ultraderecha fascista de nuestro país. Y más increíble aún es ver como este discurso xenófobo y fascista cala en algunos sectores de la población, discurso que está favoreciendo las agresiones xenófobas.
Con la táctica de intentar apropiarse como propia la defensa de los valores que representa España, intentan presentarse como defensores “de bar y carajillo” de la españolidad mas rancia. Pero España , no es solo los toros, el ejército, la caza, el flamenco, la bandera, y los huevos fritos con chorizo que aparecen en su spot electoral, y porque manden envuelta su propaganda electoral en una bandera de España, no son mas españoles o españolas que todos y todas aquellas que desde el progreso queremos un país mejor.
España es la sanidad universal, es la educación , es el estado del bienestar, es la investigación, es un matrimonio homosexual adoptando a una hija, son las pensiones, es la seguridad social, es la seguridad ciudadana, es el empleo, es una mujer víctima de violencia de género, que tiene a su disposición todos los recursos de la administración, es un niño de un zona rural que puede ir a la escuela en su pueblo. Todo eso y mucho mas es España. No solo la bandera.
Ha costado mucho llegar hasta aquí. La constitución nos garantizó un escenario donde poder desarrollar nuestros derechos y libertades y no podemos permitirnos que se pongan en cuestión por la ultraderecha el modelo democrático que es España. Ellos que quieren volver al centralismo y casi a la autarquía nacional.
Porque somos muchos y muchas lo que sabemos que la homosexualidad no es una enfermedad, que las mujeres no son las responsables de la violencia machista, que existe la violencia de género y hay que combatirla. Que la inmigración no es la causa de la violencia de este país y que levantar muros no es la solución a la inmigración irregular.
Porque no queremos retrasar el domingo nuestros relojes 50 años, es importante ir a votar. Votar por un gobierno progresista y fuerte, y no dejar llegar a las instituciones a opciones ideológicas propias de regímenes fascistas.
Porque España no se lo merece.
