El Gobierno de Castilla-La Mancha realizó durante el año 2018 reconocimientos médicos a un total de 5.231 empleados públicos, lo que supone un incremento del 10 por ciento respecto al número de trabajadores a los que se les efectuó exámenes de salud el año anterior, en 2017.
Este dato viene recogido en la memoria anual de actividades del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales correspondiente al ejercicio 2018, un servicio que depende de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, a través de la Dirección General de Función Pública.
Estos reconocimientos médicos, que, dentro de los ámbitos de actuación del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, se enmarcan en el área de Vigilancia de la Salud, se efectuaron a un total de 2.809 hombres y 2.422 mujeres.
Esto supone que se incrementó el número de exámenes de salud realizados en 2018 a trabajadores y trabajadoras en 157 y 300, respectivamente, en relación al año 2017.
En este sentido, cabe destacar que, desde el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, se están implementando fórmulas para aumentar la concienciación de las empleadas públicas para que participen en los exámenes de salud preventivos, ya que aunque el número de trabajadoras supera al de trabajadores en la Administración regional, la cifra de hombres que se realiza reconocimientos médicos sigue superando a la de mujeres.
Además de los exámenes de salud, se realizaron 261 informes de adaptación de puesto de trabajo por motivos de salud del trabajador y 42 informes de adaptación o cambio de puesto de trabajo por riesgos en el embarazo o la lactancia.
Recuperación del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales
El Servicio de Prevención de Riesgos Laborales tiene como objetivo último hacer plenamente efectivo el derecho de los empleados públicos a recibir protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo.
El crecimiento constante en la actividad del servicio de Prevención de Riesgos Laborales durante toda la anterior legislatura fue posible gracias a que el Ejecutivo de Emiliano García-Page recuperó las plazas de prevención de riesgos laborales en la Administración regional que fueron suprimidas en 2012.
En esta línea, se pusieron en marcha las dos Unidades de Prevención de Riesgos Laborales que se eliminaron en las provincias de Ciudad Real y Guadalajara.
