La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha asegurado que el nuevo Ejecutivo castellano-manchego presidido por Emiliano García-Page “ha puesto en primera línea las políticas sociales” en relación al inicio de la nueva Legislatura autonómica, y ha agradecido al presidente regional la confianza depositada para seguir siendo la titular de Bienestar Social tras su reciente toma de posesión.
Durante la atención a los medios en la Casa Perona, Sánchez también ha subrayado que la Consejería de Bienestar Social trabajará con una estructura “renovada y ampliada” para la consolidación de las políticas sociales, y ha calificado a su departamento “como el reflejo del espíritu social del Gobierno de Castilla-La Mancha”.
La nueva estructura de la Consejería de Bienestar Social cuenta por primera vez en su historia con la creación de dos viceconsejerías, como son Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia que dirigirá Ana Saavedra Revenga, impulsando y creciendo en los servicios de proximidad y en la generación de recursos sociales.
De esta Viceconsejería dependerá la nueva Dirección General de Discapacidad que asume Javier Pérez, y que es una muestra del compromiso del presidente García-Page con las personas con discapacidad, sus familias y el tejido asociativo, y que tendrá entre sus retos el desarrollo de la Ley de Protección y Apoyo Garantizado y las nuevas leyes sobre Accesibilidad y Universalización de la Atención Temprana Universal.
Además, se conforma la Dirección General de Infancia y Familia a cargo de María Ger Martos; la Dirección General de Mayores dirigida por Alba Rodríguez, cuyos ejes se centrarán en seguir ofreciendo respuesta al envejecimiento de la población y al mantenimiento de su calidad de vida.
Por otro lado, la Viceconsejería de Servicios y Prestaciones Sociales que dirige Guadalupe Martínez contará con la Dirección General de Acción Social y Cooperación a cargo de Gregorio Gómez Bolaños, diseñada para la planificación y coordinación de los servicios sociales.