La primera sesión del juicio contra A.S.C., el hombre acusado de matar al director de una sucursal bancaria de La Solana (Ciudad Real) así como por intentar matar a una empleada y amenazar a una tercera trabajadora en noviembre de 2016, se ha consumido en la elección del jurado popular, que será encargado de determinar la culpabilidad o no de los delitos que le imputan.
Además en el juicio que se está celebrando a partir de este lunes en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, ha dado tiempo a que las partes expongan sus planteamientos sobre el caso y las penas que piden, según recoge Europa Press.
Unos planteamientos en los que ha quedado claro que la defensa se basarán en los supuestos problemas psicológicos del acusado para solicitar la libre absolución de su defendido. En este sentido, ha alegado un trastorno depresivo, unido al estrés del trabajo y a una angustia irracional que sentía con los trámites del crédito que presuntamente desencadenaron los hechos ya que estuvieron «cambiando sus condiciones por parte de la entidad».
«SE HA BUSCADO LA RUINA POR SU DELIRIO, SE LE FUE LA CABEZA»
«Se ha buscado la ruina por su delirio, se le fue la cabeza, no era dueño de sus actos» ha explicado a la sala el letrado de la defensa, que ha añadido que su defendido había sufrido un deterioro mental progresivo durante el año en el que sucedió todo y que, en realidad «no había ningún problema en su vida».
A ello ha añadido que su actuación «a plena luz del día y a pecho descubierto» explica la irracionalidad de sus actos. «Si hubiera tenido premeditación hubiera buscado otra momento y situación sin que le vieran, por el contrario se presento a las once de la mañana, a plena luz del día, en una sucursal con cámaras y vestido con su mono de trabajo», ha añadido.
Además, ha rechazado un informe de un psiquiatra realizado hace pocas semanas por parte de la acusación particular que representa a la empleada amenazada y al banco. Y no considera como intento de asesinato ni homicidio lo que ocurrió con la otra empleada. «En ningún momento hubo ninguna tentativa porque tuvo los medios y las oportunidades y no lo hizo», ha concluido.
También ha destacado el hecho que una vez en prisión, lugar en el que está de forma preventiva desde que ocurrieron los hechos, fue medicado con antidepresivos y que ha «mejorado mucho».
Por otra parte, la Fiscalía se ha mantenido en sus peticiones recogidas en el escrito de acusación y al que ha tenido acceso de Europa Press por el que considera al acusado responsable de un delito de asesinato por el que se solicitan 22 años de cárcel, además de otro de tentativa de asesinato a la gestora bancaria –B.P.G.A.– para el que piden 8 años de cárcel, y un tercer delito de amenazas a otra de las trabajadoras del banco –R.M.P.G.–, por el que la pena se podría incrementar dos años más.
En este sentido, la fiscal se ha dirigido al jurado sugiriéndoles que si no tienen dudas de los hechos expuestos, que no tituben en declarar al acusado culpable «porque si dura es la pena, más es la perdida de la vida de un hombre que deja a una mujer y dos hijas», ha concluido su exposición.
Por su parte, las tres acusaciones particulares que representan a la familia del fallecido, a la empleada a la que presuntamente intentó matar y al banco y una segunda empleada a la que supuestamente amenazó, elevan a 25 años de prisión por delito de asesinato y consideran intento de asesinato y no de homicidio lo ocurrido con la empleada por lo que elevan también esta petición a 14 años y once meses.
LOS HECHOS
Los hechos recogidos en el escrito de acusación de la Fiscalía, se remontan al 21 de noviembre de 2016 cuando el hombre, empresario, firmó un crédito con la sucursal bancaria por importe de 43.000 euros de los que la entidad le retuvo de forma temporal, y por cuestiones de procedimiento, 2.200 euros.
El 23 de noviembre, y después de que otro empleado de la empresa del acusado le dijera que no se había ingresado en su cuenta aún el dinero retenido, el asesino confeso se fue a su casa de Villanueva de los Infantes para coger una escopeta y dirigirse hasta esta entidad bancaria de La Solana pasadas las 11.00 horas.
LOS ENCERRÓ EN UN DESPACHO
Tras entrar en la oficina, «ya determinado de acabar con la vida de las dos personas que habían participado en la concesión del préstamo hipotecario», se dirigió a la mesa de una de ellas, la gestora, para conminarla, mientras la apuntaba con el arma, a dirigirse al despacho del director. La víctima, ante el temor de lo que pudiera ocurrir, lo hizo.
Cuando ambos se dirigían al despacho, el agresor vio como otra de las trabajadoras del banco quería huir del lugar y, para impedir que lo hiciera y pudiera pedir ayuda, la apuntó con el arma y le dijo «si quieres, sales de aquí», de forma que la víctima atemorizada desistió de sus intenciones.
Junto a la otra víctima, siguió caminando al despacho del director –que estaba con un cliente que pudo huir– le dijo al hombre «me has engañado», tras lo que le disparó en un brazo evitando cualquier acción evasiva, tras lo que rodeó la mesa y, a menos de un metro, le disparó en el cuello acabando con su vida sin que pudiera defenderse.
Mientras, la otra víctima que había retenido consiguió ocultarse tras el mobiliario al tiempo que se movía cada vez que veía acercarse el cañón del arma, por lo que logró evitar que le disparara y el acusado, viendo que no podía, comenzó a abandonar el lugar aunque fue detenido instantes después por la Policía Local en el interior de la sucursal.
INDEMNIZACIONES
Además de las penas de cárcel solicitadas por estos hechos, la Fiscalía también solicita importantes indemnizaciones, especialmente para la mujer y las hijas del hombre asesinado –que entonces tenían 8 y 12 años–, además de las solicitadas para las otras dos trabajadoras del banco.
En concreto pide 165.284 euros para la viuda del director de la sucursal bancaria y 152.040 euros para la niña más pequeña y 147.000 euros para la otra. Asimismo, solicita que el agresor indemnice con 10.000 euros a la gestora a la que intentó matar y con 3.000 a la trabajadora a la que amenazó de muerte.
El juicio se reanudará este lunes a partir de las cinco de la tarde con la declaración del acusado y los testigos.