José Rivero.– Cada vez más el lenguaje deportivo ocupa e invade el ámbito del lenguaje de la política. O la política imita a la jerga del deporte. Metadeporte y Metapolítica.
En una prolongación de la espectacularidad y de la competencia formal entre equipos contendientes.
Que disputan partidos en una liga dotada de circularidad y de continuidad sin fin.
Sabemos por ello, de la existencia del Doblete.
Que eminentemente es la serie de dos éxitos o victorias en un corto período de tiempo.
En Política llamamos Doblete, al ejerciente que duplica sus cargos y puestos públicos.
Con razón o sin ella.
Y sorteando la ley de incompatibilidades para el desempeño de cargos públicos.
Y me sobran ejemplos, de todos conocidos, que eludo por abreviar el texto.
Otra forma de Doblete es la desplegada en el Ayuntamiento de Ciudad Real con dos alcaldesas in pectore que combinarán su gobernanza dual y duplicada.
Y que ya bauticé aquí como Alcaldesas demediadas.
Que puede ser otra forma de celebrar el Doblete.
Y esta es la otra aportación de la lingüística al mundo dual.
Así, decimos que el Doblete es el par de palabras que tienen la misma etimología, pero que han evolucionado de distinta manera.
Así las palabras delicado y delgado son un doblete, porque las dos proceden del término latino delicatus.
¿Lo cogen?
De la misma forma tenemos el Triplete deportivo que es propiamente
el triple título o la triple corona.
Expresión utilizada en el deporte para referirse a la consecución de tres títulos en una misma temporada ya sean nacionales o internacionales.
Otra versión del Triplete o Tripleta (también conocido por su nombre en inglés: hat-trick) en deportes, es lograr un objetivo del juego un total de tres veces.
En el fútbol, el perfect hat-trick se refiere a los tres goles marcados por el mismo jugador en un partido; uno con cada uno de los pies y uno con la cabeza.
El origen del término inglés se remonta al críquet, donde se premiaba con un sombrero o con una gorra al lanzador que conseguía la hazaña de eliminar a tres bateadores de manera consecutiva.
De aquí lo de hat.
En política por similitud con el Doblete, nos referimos al ejerciente que triplica sus cargos y puestos públicos.
Con razón o sin ella.
Alcalde, Diputado Provincial (concejal obligatorio), Senador, Diputado Regional.
Sin contar, por supuesto, los llamados Cargos Orgánicos o cargos del Partido en que militan y que también cuentan y cobran.
Sin contar, por supuesto, con otras regalías como la pertenencia a Empresas Públicas, a Patronatos diversos, a Fundaciones cruzadas o a Consejos de Administración mixtos.
La adecuación de Un hombre un voto, no se corresponde con Un hombre un puesto.
Claro que no.
Y nadie lo explica, ni nadie lo corrige.
De igual forma podríamos enunciar el Sextete como el Grupo de seis personas.
Que no debemos confundir con el Sexteto, aunque se parezcan.
Este es una estrofa formada por seis versos de arte mayor, generalmente endecasílabos, con rima consonante que puede adoptar diferentes disposiciones.
También nos referimos al conjunto musical formado por seis voces o instrumentos y a la composición musical escrita para ser interpretada por seis voces o instrumentos.
El ejemplo de Sexteto, lo tenemos (aunque ya lo tuvimos en 2015) con las Seis Vicepresidencias designadas para el gobierno de la Diputación Provincial.
Que parecen muchas o que parecen excesivas.
Sobre todo cuando otras Diputaciones de mayor población provincial sólo cuentan con 2 o 3 Vicepresidencias.
Solamente la de Barcelona (de población muy superior) contaba con 5 Vicepresidencias en 2015.
Y me parece, que más allá de justificar retribuciones de rango vicepresidencial, no existen razones funcionales que avalen tal grosor vicepresidencial.
Por una sencilla regla de tres, poblacional y presupuestaria, el Gobierno regional de García Page, debería tener 14 0 15 vicepresidencias, y sólo ha contado hasta ahora una o dos, a lo sumo.
De igual forma que el Gobierno de la nación debería contar con 30 o más Vicepresidencias.
Un absurdo dimensional y un despropósito, carente de explicación.
Como tantas otras cosas.
«La adecuación de Un hombre un voto, no se corresponde con Un hombre un puesto». El reparto del poder y del dinero desde el poder es un cúmulo de fantasías más desanimadas en el fondo que animadas. Como dice la sabiduría popular y populosa: que no nos pongan donde hayga… Salvo que aparezca una suerte de Francisco de Asís, o así, y cante las verdades del diputacionero. Salud y saludos.
Bueno, lo cierto es que los símiles deportivos ayudan a hacer más comprensible el lenguaje del político a la ciudadanía.
A propósito, Ciudad Real solo tiene una alcaldesa. Lo demás son ‘octupletes’ mentales, por lo menos…..
He dicho Alcaldesas in pectore no de facto. ¿Las seis Vicepresidencias provinciales también son imaginarias? Lo de octupletes mentales, es un mal recurrente y muy extendido en los partidos políticos. Mejor quedarnos en Octetos musicales y en Octetes informáticos.
Me encanta (el artículo, no la multiplicación de los panes y los peces)
Abajo la cultura, viva el deporte.
Siempre quise ir a ALTAMIRA.
Comprar un mazo de 8kg en la ferretería del pueblo y destruir estalactitas como un poseso hasta que lleguen las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a detenerme.
Así pasaría a la Historia,sería Inmortal.
Hala Madrid!
Me sorprende que tan tarde se de cuenta de qué va la política…
Usted no es el único que se está dando cuenta.
Parece que han vivido todos estos años en una burbuja.
Será eso de estar encantado de conocerse, algo que es experiencia común de mucha progresía, algo que explica esa pérdida del contacto con la realidad.
Pero no solo eso, sino una ignorancia supina de la naturaleza humana, que es algo muy del materialismo marxista o no marxista.
El conocimiento de esa naturaleza humana es cosa de fachas o ultraderechistas…o sea algo muy de la civilización occidental cristiana.
Es llamativo darse cuenta de cómo el actual devenir político sorprende ahora a progres de toda condición.
Y sin embargo su denuncia…es tímida, tangencial…no sea que denunciar lo que ya es la política sin pudor, esa absoluta desvergüenza de apropiación de lo público para el beneficio personal, te haga a la vista de todos como carca o facha.
Hace unos días fue Manuel ahora usted…
Joder….con lo cultos que son, y lo difícil que es para ustedes escudriñar la naturaleza humana o sea la realidad.
Las borracheras ideológicas…es lo que traen.
Su respuesta(¿…?) si es tal o solo un consejo malvado, es un poema al sectarismo y la yo-yoismo. ‘Tan tarde’, ‘burbujas’, ‘encantado de conocerse’, ‘progresia’ y ‘denuncia tímida’. Se me suben los colores junto a mi colega de beoda Valero por beber sin mesura.Y el colofón fenomenal de la borrachera ideológica. Como si solo usted fuera el sobrio y el abstemio. Perplejidades de la botella. Que nunca sabremos si se llena o se vacía.
No le haga aprecio, don José. El muchacho, de mente corta y lengua larga, ha encontrado en este digital su patio de vecindad, su barra de bar, su tertulia, su campo de fútbol y , si me apura, me da que también ese patio de colegio que nunca disfrutó porque ya de pequeño debió ser tan repelente como el vinagre revenido. Este digital le ha permitido al pobre ser el que siempre quiso pero no supo por falta de habilidades sociales. Pendenciero, bravucón, malhablado y payasete. Una joyita, vamos.
Darle voz a un troll, es lo que tiene. No ha encontrado su sitio, sino interlocutores. ¿Ahora molesta?
Algo que no debería permitirse en este u otro medio es la descalificación personal bajo anonimato, algo realmente propio de esos troll que no tienen la valentía ni el honor de hacerse responsables de lo que dicen cuando su intención es la injuria o la calumnia.
Es cosa eso, de cretinos.
Respecto a don José Rivero.
Don José, acepte la crítica. Todo el que emite su opinión razonada o no, la suya lo es, se expone a ello.
Siempre será mejor eso, que desde el anonimato se le injurie. Yo no lo he hecho.
Nadie está libre de pillarse una borrachera ideológica, tampoco yo.
Pero que las ideologías no le nublen a uno la vista pues la realidad tiene vida y pensamiento propios.
Encaje la crítica y si no, pues da igual, cada cual tiene derecho a ser lo que parece o a parecer lo que se es.
Desde la discrepancia no pedante, y desde la identidad responsable.
Permítame expresar que me sorprende mucho su incorrección política.
Por muy graves o no que se pongan usted o don Manuel …
Siempre parecen tibios a la hora de describir la realidad política.
Si a usted le asquea la realidad política…pues no dude de que yo también pienso y siento lo mismo.
Dragó ya ha dicho que él abandona esa pluma.
Y tiene toda la razón.
Pero la pluma de Dragó es una pluma de gran calibre.
La nuestra, y la mía mucho más humilde que la de usted, puede permitirse seguir analizando los distintos matices de esa gran mierda que es nuestra clase política toda.
La casta no nos paga por hacerlo…o no hacerlo.
Ni ningún medio de comunicación…que en lo de casta también entra.
Todo es cuestión de saber venderse bien.
Mi eslógan es «Vótanos y no te dejaremos en la cuneta»
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Fascismo,¿Y por qué no?
Partido Fascista de España