Un tribunal popular enjuiciará a partir del próximo lunes a A.S.C., el hombre para el que la Fiscalía solicita 32 años de cárcel por matar al director de una sucursal bancaria de La Solana así como por amenazar a otra trabajadora en noviembre de 2016.
Según el escrito de acusación al que ha tenido acceso Europa Press, el acusado –español y mayor de edad– sería responsable de un delito de asesinato por el que se solicitan 22 años de cárcel, además de otro de tentativa de asesinato a la gestora bancaria -B.P.G.A.- para el que piden 8 años de cárcel, y un tercer delito de amenazas a otra de las trabajadoras del banco -R.M.P.G.-, por el que la pena se podría incrementar dos años más.
Los hechos que tiene que juzgar el Tribunal del Jurado se remontan al 21 de noviembre de 2016 cuando el hombre, empresario, firmó un crédito con la sucursal bancaria por importe de 43.000 euros de los que la entidad le retuvo de forma temporal, y por cuestiones de procedimiento, 2.200 euros.
El 23 de noviembre, y después de que otro empleado de la empresa del acusado le dijera que no se había ingresado en su cuenta aún el dinero retenido, el asesino confeso se fue a su casa de Villanueva de los Infantes para coger una escopeta y dirigirse hasta la entidad bancaria Caixabanc de La Solana pasadas las 11.00 horas.
LOS ENCERRÓ EN UN DESPACHO
Tras entrar en la oficina, «ya determinado de acabar con la vida de las dos personas que habían participado en la concesión del préstamo hipotecariio», se dirigió a la mesa de una de ellas, la gestora, para conminarla, mientras la apuntaba con el arma, a dirigirse al despacho del director. La víctima, ante el temor de lo que pudiera ocurrir, lo hizo.
Cuando ambos se dirigían al despacho, el agresor vio como otra de las trabajadoras del banco quería huir del lugar y, para impedir que lo hiciera y pudiera pedir ayuda, la apuntó con el arma y le dijo «si quieres, sales de aquí», de forma que la víctima atemorizada desistió de sus intenciones.
Junto a la otra víctima, siguió caminando al desapacho del director -que estaba con un cliente que pudo huir- le dijo al hombre «me has engañado», tras lo que le disparó en un brazo evitando cualquier acción evasiva, tras lo que rodeó la mesa y, a menos de un metro, le disparó en el cuello acabando con su vida sin que pudiera defenderse.
Mientras, la otra víctima que había retenido consiguió ocultarse tras el mobiliario al tiempo que se movía cada vez que veía acercarse el cañón del arma, por lo que logró evitar que le disparara y el acusado, viendo que no podía, comenzó a abandonar el lugar aunque fue detenido instantes después por la Policía Local en el interior de la sucursal.
INDEMNIZACIONES
Además de las penas de cárcel solicitadas por estos hechos, la Fiuscalía también solicita importantes indemnizaciones, especialmente para la mujer y las hijas del hombre asesinado -que entonces tenían 8 y 12 años-, además de las solicitadas para las otras dos trabajadoras del banco.
En concreto pide 165.284 euros para la viuda del director de la sucursal bancaria y 152.040 euros para la niña más pequeña y 147.000 euros para la otra. Asimismo, solicita que el agresor indemnice con 10.000 euros a la gestora a la que intentó matar y con 3.000 a la trabajadora a la que amenazó de muerte.
Los empleados de banca son la cara visible, pero no la cara culpable…..