En mi artículo “Las verdaderas dos Españas”, apuntaba que fueron las élites afrancesadas del siglo XVIII quienes por agradar a la nueva dinastía borbónica asumieron la versión oscurantista sobre España y los españoles proclamada por Luis XIV y sus ilustrados.
En ese momento, la corrupción –siempre presente en todas las sociedades de toda época- se institucionalizó y fue en aumento hasta llegar a los niveles nauseabundos de hoy.
Así actuaron los afrancesados para evitar el destino de grandes figuras partidarias del aspirante austracista, que fueron, no sólo apartadas de sus cargos, sino borradas como si jamás hubieran existido. La nueva dinastía aplicó su propio cordón sanitario y su propia Memoria Histórica sin necesidad de ninguna ley; el relato cultural e histórico fueron suficientes y muy eficaces.
La influencia mediática traslada a sus lectores y oyentes un significado restringido de la corrupción; la misma que, casualmente, utiliza la partitocracia. Pero la corrupción referida al aprovechamiento indebido del dinero es una parte minúscula de sus diferentes variantes; y siendo ésta importante, se queda muy corta en relación a otras.
De todas ellas, la más grave es la institucional.
Existe cuando el titular de un cargo de una institución utiliza su poder para demoler o debilitar al Estado desde dentro.
En el artículo ya citado mencioné el caso de Meritxel Batet y su aceptación como válida de la fórmula de juramento a la Constitución utilizada por ERC y Junts x Cat. Poco después, se sumaría a la misma corrupción la abogada del Estado en el juicio del 1-O.
Hay que recordar por qué esta mujer se encuentra en este juicio trascendental y quién la colocó.
Fue la Ministra de Justicia, Dolores Delgado. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que el llamado a defender los intereses del Estado era el prestigioso penalista Edmundo Bal, quien se negó a suprimir el delito de rebelión.
De una u otra forma, le vendrían a decir: O Ud. prevarica o quedará relegado del caso. El Sr. Bal actuó como la dignidad del cargo le exigía: como un hombre de una pieza; así solía decirse; se negó y fue apartado, no por desempeñar mal su función, sino por negarse a debilitar al Estado a cuyos intereses se debe.
Cuando instituciones del Estado deciden no defenderlo están atacándolo desde su interior aprovechándose, sus titulares, del cargo que ostentan.
Si un funcionario recibiera órdenes de un superior, debería negarse a cumplirlas si las mismas pudieran debilitar al Estado en vez de defenderlo.
En el juicio por la intentona golpista del 23-F, la sentencia desbarató la estrategia de la defensa de los guardias civiles no aceptando la obediencia debida – en relación a las órdenes procedentes de superiores- como eximente ni exculpatoria. Cuando una orden conculca el ordenamiento jurídico no debe cumplirse.
La defensa del Estado debe basarse en presupuestos de máximos, no de mínimos ni intermedios. Es decir, quien atente contra él debe saber que aquél actuará recurriendo a todas las posibilidades que le ofrezca el Código Penal. Son los tribunales y no los abogados quienes imparten justicia. Quienes defienden al Estado deben echar mano de todo el potencial de la ley, no reducirlo.
Por eso, quienes pretenden el pasteleo debilitan al Estado.
No hay corrupción que se le pueda comparar.
Sin tapujos
Marcelino Lastra Muñiz
Totalmente de acuerdo contigo Marcelino.
Y de nuevo, tú análisis es agudo, certero, brillante.
Y evidentemente, un funcionario público promete acatar la Constitución.
A ella se debe y no a sus jefes.
Faltar a ese juramento o promesa para recibir el premio de la sumisión a la ignominia y a la prevaricación, es una forma de corrupción real, notable y decisiva.
Estamos viendo cosas muy fuertes en ese sentido.
Es la batalla que en la Administración se libra hoy.
Si los funcionarios se olvidan de aplicar las leyes, que deben estar ahí para frenar los abusos de los fuertes sobre los débiles, y por ello serian justas, el Estado deja de ser democrático, por dejar de ser un Estado de Derecho.
Es decir, el cumplimiento de las leyes es tan o más importante que votar.
Sí, con Franco también se votaba.
Y como bien dices, se necesitan hombres y mujeres de una pieza para hacer frente a la corrupción institucional.
Edmundo Val fue uno, la juez Alaya otra.
Pero hay muchos.
Y por experiencia te digo que la última batalla se da en la disputa de quien no solo tiene la autoridad legal, sino también la moral.
El buen ejemplo es tan contagioso como la corrupción.
Carta para Maecelino o para O’Marcelino:
¿que victoria sobre el de abajo es estar dominando sin ningún espiritu, con una permanente preocupación angustiante por conservar el poder y un miedo siempre presente por la posibilidad de perderlo?
¿Quien tiene el poderar M?
No, no me creo que busquen, o tu también lo hagas de veras, una acaparacion de poder sobre los que tienen debajo por el simple hecho de tenerlo sin buscar detrás felicidad, longevidad, placeres inaccesibles y de privilegiados, «riquezas» materiales (o riquezas «materiales» que también puede ser). El poder sobre otros en sí mismo desprovisto de todo lo que lleva unido es insustancial, si me dices date un paseo seré yo el que lo disfrute.
Unas mentes tan racionales y calculadoras, inteligentes aunque mentirosas, no puede buscar algo sin un motivo lógico. Es una locura querer poder por poder.
Hay algo más.
Muevo un alfil, el cual daba una apariencia de derrota aparentemente ineludible para el lado sometido (que ni siquiera por su esencia quiere
ganar solo cambiar de juego):
Las órdenes viene de arriba, los dueños de vuestros sueños, necesitan nuestra energía como bien te informé y no lo consideraste, algo impropio en ti pero, nadie es perfecto. Si los humanos dominados descubren que tienen opciones y no solo una, es decir que no solo les queda el dejarse llevar por el sufrimiento de su situación sino que pueden desechar está y decidir la alternativa de mantenerse sin emociones negativas de lo que les pase impasibles más un poco de amor a pesar de la ventisca y el pisotón pueden dejar sin comida a los que mandan, ¿en consecuencia quien puede dominar a quien? Ya se, no es fácil asumir que esto no lo habías previsto; prosigo, tengo entendido que es el dependiente el que suele estar sometido al sujeto que posee y le provee de aquello que necesita (ej: país con recursos, país que domina a los que lo buscan) Y la cuestión es que la espiritualidad es contagiosa y no es casualidad que Roma fuera a por Jesus tu… ¿Tu maestro? Sabes que los dobles pensares yo los perdono, yo mismo fui comunista lavado el cerebro. ¿No existe el pasado físicamente en ningún lugar?¿Y que será del poder poseído ahora cuando solo sea un hecho anecdótico de la historia?
Carta para Maecelino o para O’Marcelino:
¿que victoria sobre el de abajo es estar dominando sin ningún espiritu, con una permanente preocupación angustiante por conservar el poder y un miedo siempre presente por la posibilidad de perderlo?
¿Quien tiene el poderar Marcelino?
No, no me creo que busquen, o tu también lo hagas de veras, una acaparacion de poder sobre los que tienen debajo por el simple hecho de tenerlo sin buscar detrás felicidad, longevidad, placeres inaccesibles y de privilegiados, «riquezas» materiales (o riquezas «materiales» que también puede ser). El poder sobre otros en sí mismo desprovisto de todo lo que lleva unido es insustancial, si me dices date un paseo seré yo el que lo disfrute.
Unas mentes tan racionales y calculadoras, inteligentes aunque mentirosas, no puede buscar algo sin un motivo lógico. Es una locura querer poder por poder.
Hay algo más.
Muevo un alfil, el cual daba una apariencia de derrota aparentemente ineludible para el lado sometido (que ni siquiera por su esencia quiere
ganar solo cambiar de juego):
Las órdenes viene de arriba, los dueños de vuestros sueños, necesitan nuestra energía como bien te informé y no lo consideraste, algo impropio en ti pero, nadie es perfecto. Si los humanos dominados descubren que tienen opciones y no solo una, es decir que no solo les queda el dejarse llevar por el sufrimiento de su situación sino que pueden desechar está y decidir la alternativa de mantenerse sin emociones negativas de lo que les pase impasibles más un poco de amor a pesar de la ventisca y el pisotón pueden dejar sin comida a los que mandan, ¿en consecuencia quien puede dominar a quien? Ya se, no es fácil asumir que esto no lo habías previsto; prosigo, tengo entendido que es el dependiente el que suele estar sometido al sujeto que posee y le provee de aquello que necesita (ej: país con recursos, país que domina a los que lo buscan) Y la cuestión es que la espiritualidad es contagiosa y no es casualidad que Roma fuera a por Jesus tu… ¿Tu maestro? Sabes que los dobles pensares yo los perdono, yo mismo fui comunista lavado el cerebro. ¿No existe el pasado físicamente en ningún lugar?¿Y que será del poder poseído ahora cuando solo sea un hecho anecdótico de la historia?
El libre albedrío puede ser manipulado con mentirás, más nunca violado.
Errata: quise decir «¿Quien tiene el poder Marcelino?» no poderar
Carta corregida, a la tercera va la vencida, para Marcelino o para O’Marcelino:
¿que victoria sobre el de abajo es estar dominando sin ningún espiritu, con una permanente preocupación angustiante por conservar el poder y un miedo siempre presente por la posibilidad de perderlo?
¿Quien tiene el poder Marcelino?
No, no me creo que busquen, o tu también lo hagas de veras, una acaparacion de poder sobre los que tienen debajo por el simple hecho de tenerlo sin buscar detrás felicidad, longevidad, placeres inaccesibles y de privilegiados, «riquezas» materiales (o riquezas «materiales» que también puede ser). El poder sobre otros en sí mismo desprovisto de todo lo que lleva unido es insustancial, si me dices date un paseo seré yo el que lo disfrute.
Unas mentes tan racionales y calculadoras, inteligentes aunque mentirosas, no puede buscar algo sin un motivo lógico. Es una locura querer poder por poder.
Hay algo más.
Muevo un alfil, el cual daba una apariencia de derrota aparentemente ineludible para el lado sometido (que ni siquiera por su esencia quiere
ganar solo cambiar de juego):
Las órdenes viene de arriba, los dueños de vuestros dueños, necesitan nuestra energía como bien te informé y no lo consideraste, algo impropio en ti pero, nadie es perfecto. Si los humanos dominados descubren que tienen opciones y no solo una, es decir que no solo les queda el dejarse llevar por el sufrimiento de su situación sino que pueden desechar está y decidir la alternativa de mantenerse sin emociones negativas de lo que les pase impasibles más con un poco de amor a pesar de la ventisca y el pisotón pueden dejar literalmente sin comida a los que mandan, ¿en consecuencia quien puede dominar a quien? Ya sé, no es fácil asumir que esto no lo habías previsto; prosigo, tengo entendido que es el dependiente el que suele estar sometido al sujeto que posee y le provee de aquello que necesita (ej: país con recursos, país que domina a los que lo buscan) Y la cuestión es que la espiritualidad es contagiosa y no es casualidad que Roma fuera a por Jesus tu… ¿Tu maestro? Sabes que los dobles pensares yo los perdono, yo mismo fui comunista lavado el cerebro. ¿No existe el pasado físicamente en ningún lugar?¿Y que será del poder poseído ahora cuando solo sea un hecho anecdótico de la historia?
El libre albedrío puede ser manipulado con mentirás, más nunca violado.
Se ha de ser muy exigente con un problema que erosiona las bases del sistema democrático generando elevadas cotas de desconfianza ciudadana….
Por cierto, quizá sea la hora de establecer una fórmula de acatamiento clara, aséptica y que, huyendo de excesos patrioteros y de una lealtad que vaya más allá del mero cumplimiento de la Constitución, acabe de una vez por todas con esta polémica a la que nos vemos arrastrados periódicamente…….