El consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, ha adelantado que el Consejo de Gobierno celebrado hoy “ha dado luz verde a una nueva convocatoria de ayudas a la investigación del patrimonio arqueológico y paleontológico en Castilla-La Mancha, dotada con 450.000 euros”.
Lo ha asegurado el consejero en rueda de prensa celebrada en el Palacio de Fuensalida para dar cuenta de diferentes asuntos de Consejo de Gobierno, donde también ha aclarado que “con la experiencia de años anteriores, una vez resuelta la convocatoria, supondrá la financiación de unos 40 proyectos de investigación”.
Durante su intervención, el consejero ha explicado que puede calcularse que de los proyectos que se subvencionen se verán beneficiadas directamente unas 500 personas. “Si calculamos en base a los proyectos concedidos el pasado año, con una media de 10 investigadores y dos peones por proyecto”, ha aseverado.
Además, ha continuado, “indirectamente las ayudas tienen repercusión económica en las zonas donde se desarrollan los proyectos, por la presencia de los equipos durante el tiempo de ejecución, con gastos de alojamiento y manutención. Y más allá, la repercusión fuera de la región, en conocimiento de la misma por los trabajos de investigación que continúan a lo largo del año en universidades y centros de investigación”.
“Yacimientos importantes en la región como Recópolis, Carranque, Segóbriga, Tolmo de Minateda, Alarcos, La Bienvenida o el paleontológico de ‘Lo Hueco’ han acogido algunos de los proyectos de investigación subvencionados en los últimos años y seguro que en algunos casos también en esta nueva edición lo harán”, ha continuado.
Además, más allá de las actuaciones clásicas de otras campañas, ha dicho Felpeto, “seguro que surgen proyectos de gran interés como ya ocurriera en la campaña pasada. Algunos ejemplos son la documentación mediante fotogrametría de objeto cercano y fotografía gigapixel de tres enclaves de arte rupestre de Minglanilla, o la constatación en la pedanía de Arisgotas (Orgaz) de la existencia de un pabellón nobiliario con dos pisos”.
Podrán ser beneficiados de estas ayudas las universidades españolas; las fundaciones de universidades españolas que, entre sus fines y actividades, desarrollen investigación en materia de Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural; los organismos públicos de investigación reconocidos; y los ayuntamientos y las entidades de ámbito local menor para la realización de proyectos de investigación en bienes del Patrimonio Cultural ubicados en su término municipal.
El plazo para la presentación de solicitudes será de diez días hábiles a contar desde el día siguiente a la publicación de la presente convocatoria y de su extracto en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, y su ejecución hasta la fecha que se determine en la resolución de concesión de la subvención, que en todo caso, será como máximo hasta el 30 de octubre de 2019.
Comienzo de la declaración como Parque Arqueológico del Yacimiento de Libisosa
Asimismo, el titular de Educación, Cultura y Deportes ha adelantado que, con la solicitud realizada ayer por parte del Ayuntamiento de Lezuza (Albacete) a la Viceconsejería de Cultura, ha comenzado la declaración del yacimiento de Libisosa como Parque Arqueológico, proceso que durará en torno a un año.
Asimismo, Ángel Felpeto ha añadido que, “con esta declaración, el Gobierno de Emiliano García-Page pretende aumentar la protección de un entorno clave para el patrimonio de nuestra Comunidad Autónoma y fomentar con ello el turismo y el comercio en la comarca en que está enclavado”.
El enclave arqueológico de Lebisosa es un asentamiento humano con un horizonte cronocultural que arranca en la Edad del Bronce y que da pie a un importante ‘oppidum ibérico’, que sería embrión de una importante colonia romana denominada Libisosa, para más tarde alojar un complejo defensivo religioso-militar tras la Reconquista, hasta su posterior abandono.
El yacimiento se encuentra muy próximo al municipio de Lezuza (Albacete), en el paraje denominado el Cerro del Castillo, a 1.005 metros de altitud. Está enclavado en un meandro formado por el río Lezuza al Este, Oeste y Norte, mientras que al Sur queda surcado por el Vallejo de la Ermita.