El candidato de IU a la Alcaldía de Argamasilla de Calatrava, José Manuel Pérez Trujillo, no valora de forma «tan positiva» la mejora de eficiencia energética en los edificios públicos gestionada por el gobierno municipal de Jacinta Monroy.
En nota de prensa, Pérez Trujillo, que además de candidato a la Alcaldía y concejal, es profesor del Ciclo Formativo de Grado Superior de Eficiencia Energética, puntualiza que la sustitución de luminarias a lámparas led, en principio, si se ejecuta correctamente, «parece bien».
«Pero no así», prosigue, «la sustitución de los sistemas de calefacción del Centro de Día y del propio Ayuntamiento por sistemas de calefacción a gas natural, puesto que sigue siendo un combustible de origen fósil, con lo que no se eliminan las emisiones de CO2, y no es un sistema de energía renovable, además de que lo tenemos que importar al 100%, lo que redunda en un aumento del déficit económico del conjunto del país».
«A todo esto, en el caso del edificio de la Universidad Popular, y en cierta medida en el Ayuntamiento, que son edificios viejos, no podemos empezar la casa por el tejado, es decir, no podemos mejorar la calefacción sin antes hacer una adecuación y aislamiento de la envolvente (paredes, puertas y ventanas) del propio edificio, para así reducir la demanda de energía por conducción y por ventilación de los huecos de puertas y ventanas viejas», subraya.
A su juicio, «por muy eficiente que pusiéramos el sistema de calefacción, que no es el caso, va a ser tirar los billetes por las puertas y ventanas, ya que si éstas no cierran bien y son de hierro, todos podemos entender que es despilfarrar el dinero de todos, y que los usuarios sigan pasando frío».
«Es una pena que nuestro Ayuntamiento, a pesar de haber sido avisado por parte de quien suscribe, no acudiera a las ayudas convocadas en el Real Decreto 616/2017 para poblaciones precisamente de menos de 20.000 habitantes». En este sentido recuerda que en uno de sus apartados dice literalmente: «La mejora de la eficiencia energética de la envolvente térmica de los edificios existentes, descrita en esta medida, comprende las actuaciones energéticas sobre su envolvente que permitan reducir la demanda energética de calefacción y/o refrigeración, y por lo tanto, su consumo energético y emisiones de dióxido de carbono, mediante soluciones constructivas convencionales y no convencionales, que pueden consistir en una reforma integral de la envolvente, o sobre alguno de sus cerramientos por separado (cubiertas, suelos, huecos, muros y medianeras)».
«Ahora tendremos calefacción nueva en un edificio muy viejo, es lo que tiene no querer escuchar a la oposición, e hipotecamos a la nueva corporación que salga de las urnas el día 26 de mayo», concluye.
