La música escolar abandonó momentáneamente las aulas y salió a las calles de Torralba de Calatrava, de la mano del alumnado y el profesorado del Colegio Público ‘Cristo del Consuelo’ de la localidad.
El centro educativo torralbeño fue uno de los nueve centros de la provincia de Ciudad Real adherido a la convocatoria Musiqueando 2019, que organiza la Confederación de Asociaciones de Educación Musical.
Sensibilizar y concienciar sobre la importancia de la música en la vida y en la educación es el objetivo de esta convocatoria nacional que se desarrolló ayer de forma simultánea por toda la geografía nacional. Por primera vez, el colegio torralbeño se adhirió a esta iniciativa y ofreció un miniconcierto al aire libre para reivindicar la conservación del área artística en las aulas.
Los 262 alumnos y alumnas del Colegio de Torralba de Calatrava, desde 1º de Educación Infantil a 6º de Educación Primaria, participaron en esta actividad y compartieron con familiares y vecinos su talento musical en el concierto ofrecido en la Plaza de la Villa.
Acompañados de flautas dulces y traveseras, saxofones, clarinetes, maracas o tambores, entre otros instrumentos, los niños se convirtieron en los auténticos protagonistas de esta original fiesta de la música escolar.
Numerosas personas asistieron a esta cita y disfrutaron escuchando piezas como el ‘Himno de la alegría’, ‘Búfalo Gals’, ‘Harry Potter’, ‘Solo para dos’, ‘El Rey León’, ‘Sonrisas y lágrimas’ o canciones populares como ‘Don Gato’, entre otras.
La directora del Colegio Público ‘Cristo del Consuelo’, Esther Pérez, dio las gracias a Carmen Muñoz Villena, la responsable artística del centro y profesora de música por la organización de este concierto y por “ayudarnos a crecer con la música” y afirmó que “la música nos ayuda a soñar y los sueños nos hacen crecer”.
Y es que, como se puso de manifiesto ayer, la música tiene importantes beneficios para los niños y es fundamental que permanezca en las aulas como una asignatura más, porque es importante para el desarrollo intelectual, auditivo, sensorial, de habla y motriz de los niños. Además, aumenta la capacidad de concentración y de aprendizaje matemático, y es uno de los estímulos más efectivos para favorecer la evolución.