El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha lamentado hoy que los dirigentes regionales del Partido Popular “no se atrevan siquiera a decir que van a seguir con las obras en marcha de la Comunidad Autónoma en los hospitales”, en referencia a las declaraciones vertidas ayer por el presidente del PP en la región, Francisco Núñez, supeditando el futuro del nuevo hospital de Cuenca a la opinión del sector sanitario.
Durante una entrevista en la Cadena SER de Toledo con motivo de la XII Maratón de Donación de Sangre que organiza esta emisora en colaboración con la Hermandad de Donantes de Toledo y Eurocaja Rural, el presidente castellano-manchego ha calificado esta situación como “bastante triste”, y ha recordado que este mismo partido “nos exigía a nosotros en su momento que terminásemos las obras”.
En este sentido, ha criticado que las indemnizaciones por todas las obras paradas irregularmente por la expresidenta regional, María Dolores de Cospedal, le hayan costado a la región 254 millones de euros, una cifra que supera el coste de construir y terminar el hospital de Cuenca y el de Guadalajara, ha afirmado el presidente.
“Y ahora el sucesor de Cospedal no se atreve a romper ese cordón umbilical con quien le colocó ahí”, ha señalado en referencia a Núñez, de quien ha recordado que no se opuso a la privatización del hospital de Almansa cuando era alcalde de la localidad.
Por otro lado, y sobre el hospital de Cuenca, García-Page ha dado a conocer que se encuentra al 35 por ciento en grado de ejecución y ha asegurado que supondrá una “revolución urbanística” en la ciudad, porque donde se coloca un hospital “se genera un movimiento social y demográfico tremendo y muchas oportunidades”. Igualmente ha señalado que el actual hospital conquense, que es el más antiguo de la región, está afrontando un nivel de servicios “extraordinario” y recuperando muchos usuarios.
Preguntado por el avance en la obra del nuevo Hospital Toledo, que será recepcionado este mismo mes, García-Page ha confirmado que “va muy rápido” y que, de seguir así, “podría estar casi culminada este verano”. Se trata de un proyecto “modélico” que está siendo construido con una perspectiva de cincuenta años, ha apostillado.
Asimismo, ha repasado el resto de las obras de hospitales que se están desarrollando en estos momentos como el Puertollano, Albacete o Guadalajara, donde se está trabajando con los mismos proyectistas que hace cincuenta años.
Una sentencia que supone un punto de inflexión para el Tajo
Sobre el trasvase, García-Page ha valorado que el río “debe llevar agua y no hacernos sangrar”, y ha reiterado que seguirá exigiendo al Ejecutivo central el fin del trasvase como está actualmente concebido. En este sentido, y tras reconocer que es “difícil” hacer un giro político en este asunto a nivel nacional, ha invitado al Gobierno de España a seguir siendo ecológico también con el agua, del mismo modo que ha demostrado serlo con el gasoil.
Igualmente, ha lamentado el “desprecio” del Partido Popular ante la “hipoteca” del Tajo, como el que hizo el número dos del Partido Popular, Teodoro García Egea, que hoy está en la provincia de Ciudad Real y recientemente estaba “celebrado” el cuarenta aniversario del trasvase. “Si tanto les gusta –ha añadido- que se atrevan a decir que lo van a hacer también en el Ebro o en el Tajo, pero les falta coraje para ello”.
Finalmente, y tras insistir en que hay alternativas muy evidentes en el mar para desalar, ha asegurado que no le importa que le pongan el precio “tirado” al agua del trasvase, “que ya es un agua regalada”, y que lo importante “es que se deshipoteque el Tajo”. En este punto, ha hecho referencia a la última sentencia del Tribunal Supremo respecto al caudal ecológico del Tajo que, a su juicio, supone “un punto de inflexión”.
