Al igual que sucede a nivel regional, la provincia de Ciudad Real finalizará el año con datos históricos en el Sistema de Atención a la Dependencia tras la incorporación de 6.749 beneficiarios desde que Emiliano García-Page asumiera el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Un dato que supone un incremento del 79,59 por ciento al pasar de 8.480 beneficiarios a 15.225 y que ha dado a conocer la directora provincial de Bienestar Social, Prado Zúñiga, quien ha valorado que “este es mejor modo de demostrar que las personas son el centro de nuestra gestión diaria”.
A esa cifra, Zúñiga ha añadido las 17.469 prestaciones que se computan a día de hoy, es decir, 6.740 prestaciones más que en julio de 2015, con un incremento espectacular en el caso de la ayuda a domicilio y la teleasistencia, que han crecido en la provincia ciudadrealeña un 209 y un 110 por ciento respectivamente.
Importante también para la máxima responsable provincial de la Consejería de Bienestar Social es el número de personas pendientes de atender, y que en poco más de tres años y menos, “gracias a las políticas del presidente García-Page hemos logrado reducir en un 88 por ciento, puesto que se ha pasado de 7.478 en julio de 2015 a tan solo 863 en noviembre de 2018, cifras que, consecuentemente, suponen 6.615 expedientes menos.
Como dato aún más contundente, Zúñiga ha explicado que en el mes de noviembre el Gobierno de Castilla-La Mancha ha atendido a 55 personas al día, mientras que en la anterior legislatura se eliminaba la atención a 3 personas cada 24 horas.
Esta recuperación y este gran avance en el Sistema de Atención a la Dependencia se han visto reflejados en otra conclusión digna de destacar, y es que “somos la comunidad autónoma que más ha reducido la lista de espera”, más de 33 puntos porcentuales desde el inicio de la legislatura, y, consecuentemente, “hemos pasado del puesto número 17 que ocupábamos en julio de 2015 con el ejecutivo de Cospedal a estar entre las cuatro regiones con menos personas pendientes de atender”, adelantando así 13 posiciones en 40 meses.
Para finalizar, Zúñiga ha asegurado que “esta prioridad por garantizar la protección y el Estado del bienestar es una de las señas de identidad de este Gobierno”, y como tal continuará hasta finalizar la presente legislatura, con el cambio de modelo, además, de procurar que tanto las personas mayores como dependientes puedan desarrollar el máximo tiempo posible de sus vidas en sus hogares y sin salir de los núcleos rurales o urbanos a los que están vinculados.