El bar Goyo, otro clásico de la hostelería puertollanera, cerró sus puertas hace unas semanas tras casi 35 años de existencia. El establecimiento de la calle Ancha fue fundado en 1984, y durante décadas fidelizó a una clientela ávida de fútbol y buena mesa, arropada por el buen trato de sus propietarios.
La jubilación ha puesto punto y final a la trayectoria del local. Un cartel en la puerta pide disculpas por el «repentino cese del negocio» y traslada a los clientes el agradecimiento de la familia por permitirles compartir con ella toda una vida.
Aunque en los últimos nueve años han desaparecido en España más de 30.000 locales, seguimos siendo el lugar del mundo con más establecimientos por habitante: uno por cada 175 personas. Más que en todo Estados Unidos.
A pesar de la crisis, nuestro país nunca traicionó su ADN ni fue destronado del podio ‘barero’.
Hasta siempre y gracias, ‘Bar Goyo’……
De cervecitas y tapitas sabemos un rato ya de trabajar lo dejamos para luego.ehehehehe Charles.
pues que lastima… de verdad aunque los dueños..dejaban que desear bordes y secos pero siempre tenian para ver el futbol sobre todo los peñistas del madrid
Otra muesca más para el revólver de los sociatas que nos gobiernan, negocios de toda la vida,que claudican ante la deplorable situación económica del pueblo. Radio Amores, Repuestos Valencia, Bazar El Quijote, Levis, etc,etc,etc. PUERTOLLANO NECESITA UN CAMBIO DE GOBIERNO, este está caducado, obsoleto, apático, sin ideas, sin ambición, ellos mismos piden irse. PSOE GO HOME.
Gracias
Que parte de que la jubilación ha puesto punto y final al negocio no entiendes..ufff
Los podemitas de Ciudad Real defendiendo al PSOE incluso de Puertollano!!!. Que mal que lo deben ver jajajajaja!!!.
…ostras, tu tampoco entiendes que se cierra por una jubilación?.. Luego se cabrean por ahí cuando confirmamos que la derecha la surte una gran cantidad de ignorantes.
Lulu para saber lo que dices primero di quien eres y las cosas.a.la cara , por que es una familia buenísima y trabajadores
Dejaos de tontunas. Que cierre el bar Goyo no importa a nadie. Salvo al borrachín del quinto. Ya abriran otros de nuevo el local