Multimedia.- El Ayuntamiento de Piedrabuena (Ciudad Real) establecerá durante las próximas semanas un protocolo de prevención de los robos en la campaña de aceituna de la localidad, una estrategia de protección que el alcalde de la localidad, José Luis Cabezas, ha presentado para su aprobación en respuesta a la demanda de los vecinos.
De este modo, el primer edil piedrabuenero ha mantenido una reunión con el consejo rector de la Cooperativa Nuestra Señora de la Antigua, efectivos de la Guardia Civil, de la Policía Local y de una empresa de seguridad privada, durante la que se ha establecido un protocolo de coordinación cuyos gastos serán pagados al 50% por el Consistorio, mientras que será la propia cooperativa, que cuenta con más de 1.000 socios, la que hará frente al resto del coste.
Cabezas agradece la colaboración de la Guardia Civil, “que siempre está ahí cuando la necesitamos y que se han mostrado siempre muy eficaces en la lucha contra el robo, una lucha en la que se verán reforzados este año para tratar de evitar situaciones delictivas”.
Mayor vigilancia en el campo
Tras este acuerdo, habrá una mayor presencia de Policía y Guardia Civil en el campo y el propio Ayuntamiento lanzará un bando donde se invita a los propietarios de los olivares a disponer de un documento que acredite la propiedad de sus terrenos, cuando se encuentren en el campo, algo que podrán hacer con los datos del catastro o con los referidos a las ayudas de la PAC.
En el citado bando también se informará de los números de teléfono a los que se puede llamar en caso de observar movimientos sospechosos en el campo. La citada estrategia también contempla que tanto la cooperativa como las almazaras que procesen las aceitunas de esta campaña cuenten con un documento en el que quienes lleven su aceituna para molturar acrediten la parcela de la que procede y quién es quien la entrega, para poder hacer un seguimiento del proceso completo.
Como subraya el alcalde de Piedrabuena, “creo que éstas son medidas suficientes para reducir las posibilidades de robo en el campo, puesto que las almazaras están obligadas a requerir la documentación para conseguir que la recolección y molturado de la producción de esta zona sea un proceso ordenado y también, por supuesto, para observar cualquier tipo de indicio de irregularidad y tratar de perseguir al infractor”.
