Multimedia.- El poeta Manuel Juliá (Puertollano, 1954) ha presentado esta tarde, en el Centro Andaluz de las Letras –CAL- de Málaga, su Trilogía de los sueños, un poemario editado por Hiperión que supone “un ejercicio de síntesis de la vida y la realidad humana a través del amor”, como ha definido el autor de El sueño de la muerte, El sueño del amor y el Sueño de la vida, las tres obras que dan cuerpo a las 300 páginas presentadas hoy.
El director del CAL, Juan José Téllez, ha entablado un diálogo poético con el autor ciudadrealeño en el que ha sido protagonista “esta poesía de la celebración que propone Juliá, así como la vinculación de sus poemas con el vino, el amor, el erotismo y la vida, en definitiva”.
En el acto también han estado presentes la poeta Inés María Guzmán, vocal del Ateneo de Málaga, y la poetisa Carmen Ciudad, así como el actor Alberto Ávila, que han repasado los versos de Juliá, durante una lectura teatralizada, con el acompañamiento del cantautor Juan Alberto Gómez.
Juliá, que ha agradecido a Téllez “la oportunidad que me ha ofrecido de presentar esta Trilogía en Málaga, tras su descubrimiento de mi libro”, ha subrayado que este poemario “cuenta con una estructura muy pensada desde el primer momento, por lo que sus poemas están menos sujetos a la tiranía del instante”.
Esta perspectiva le ha permitido afrontar la elaboración de “un libro único porque, aunque pretende un recorrido por la existencia, con el puente del amor atravesándolo completo, también supone una aspiración a crear un mundo poético que incluya todo el recorrido humano, desde antes de la vida hasta la muerte, y en este campo se juega mejor con la poesía que con el pensamiento, porque la poesía te da la oportunidad de soñar”, como ha señalado.
Para Juliá, “la vida es un acto de amor absolutamente primigenio, y si no existiese ese concepto de amor en la naturaleza no estaríamos aquí: habría ganado la muerte”.
La elaboración de esta Trilogía, -“algo así como una sinfonía”, como ha afirmado el poeta ciudadrealeño sobre las nueve partes que la constituyen- ha supuesto para él “una batalla contra mí mismo, porque he tenido que encauzar la fuerza del instante de la creatividad para poder construir una obra sólida de 300 páginas poéticas: si no, hubieran sido retazos desperdigados más o menos geniales, pero que no mostrarían la estructura única que buscaba”.
Proyectos actuales
Manuel Juliá, que ha agradecido al público asistente su cálida acogida, trabaja en la actualidad en su nuevo libro ‘Fragmentos de un discurso casi poético’, “un libro de sensaciones”, como lo ha descrito, con el fragmento como fórmula literaria protagonista, así como en un libro de poemas, del que lleva escrito el 70% de su contenido. Además, tiene en marcha una novela y una serie de reportajes con Mediaset y el diario El Mundo, un proyecto del que ya ha visto la luz el primero, ‘España mira a La Meca’, un reportaje que cuenta con un “tratamiento más literario y humano en el soporte de papel y una perspectiva más analítica en televisión”.
Biografía de Manuel Juliá
Manuel Juliá nació en Puertollano (Ciudad Real) y, además de esta ‘Trilogía de los sueños’, ha publicado, De umbría (1998), Intemporal (2003), Sobre el volcán la flor (2009), Cuarenta latidos (2009), La gloria al rojo vivo (2010) y Dioses de fuego y aire (2012).
En su trayectoria literaria se incluyen reconocimientos como el que le realizó en el año 2012 la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, que le concedió el Premio Clarín de Cuentos, por La región del olvido. Asimismo, la Asociación de Editores de Poesía declaró El sueño de la vida como el mejor poemario editado en 2015. Además, colabora en los diarios El Mundo, Marca y las cabeceras del grupo Promecal en Castilla-La Mancha y Castilla y León, además de ser colaborador de Mediaset.
Para Caballero Bonald, «la escritura de Manuel Juliá está llena de inteligencia y sensibilidad». Túa Blesa dice que tiene «un discurso total (…) que se lee con mucho gusto». Juan Cruz que «lo oscuro es la luz para el poeta» y que ejerce con autoridad su poesía creando un «libro luminoso habitado por la niebla». Y Enrique Villagrasa, refiriéndose a El sueño de la muerte, escribe que es un «poemario grandioso».
