Una iniciativa que tiene como objetivo mostrar de primera mano un referente cultural en el patrimonio daimieleño como son las caleras. Una visita que se completa con la muestra de casillas típicas de la arquitectura popular manchega y un bombo.
Regresan tras el punto y seguido anunciado poco antes del verano. Las rutas impulsadas desde el área de Turismo se retomaron este fin de semana. En el ánimo del Ayuntamiento, darles continuidad en el tiempo y fomentar su conocimiento. En concreto, el domingo se proyectó la actividad que discurrió en términos de normalidad.
Con un poco más calor de lo esperado, el grupo partió a las 10:00 horas, desde el aparcamiento de Daimiel-1. Tres horas y media después, los senderistas, acompañados en todo momento por el arqueólogo Miguel Torres y la concejal de Turismo María del Carmen Rivero, finalizaron el trayecto de manera satisfactoria. El recorrido incluía diferentes ejemplos de arquitectura vernácula de la localidad como las casillas, los bombos y las casas de labor, entre otros.
Desde la delegación de Turismo se ha adelantado que estas citas en las que se combina el ocio, el deporte caminando, el patrimonio cultural y el turismo local se repetirán próximamente, aunque aún no se han establecido las fechas exactas.