El día 21 de Septiembre, viernes, Dña. Pilar Zamora -alcaldesa de Ciudad Real- inauguró junto a Araceli Martínez -Directora del Instituto de la Mujer de CLM- las primeras jornadas sobre trata y prostitución.
El lema del evento “Sin ti no hay trata”. Al leerlo deprisa, pensé que se trataba de una merecidísima admonición dirigida a cada uno de los causantes de esta lacra, el tratante: aquel que atrae con engaños o coacción a mujeres a centros de prostitución para su explotación sexual (RAE)
Cuando continué leyendo la noticia en miciudadreal me quedé atónito con el comentario de la regidora de nuestra ciudad: Es “uno de los eslóganes más acerados que he visto en mucho tiempo, porque la trata de las mujeres existe porque hay personas que la consumen. Si no existieran esos hombres que acuden a los burdeles, que hacen uso de esta prostitución, la trata no existiría”
Dña. Pilar, no sea Ud. sofista. Serlo conlleva el riesgo de arrastrar consigo apelativos poco o nada dignos, máxime cuando se ostenta un cargo al que se le supone una investidura de dignidad, como le sucede a Ud.
La trata de blancas –denominación histórica- existe porque hay personas desalmadas que se dedican a su tráfico. No mezcle de forma torticera al delito con la actividad.
Fabricar zapatos no es delito. Lo sería hacerlo con inmigrantes –o no- esclavizados ¿Haría Ud. responsable de la esclavitud laboral a los compradores de zapatos? ¿Vamos a señalar a quienes frecuentan los bares de copas por las horas extras no cobradas de los camareros? Llevando su razonamiento al límite ¿Habría que criminalizar a los clientes de cualquier producto o servicio por los delitos del productor?
No deja de sorprender que el foco de atención no se haya puesto ni en el tratante ni en el proxeneta –el intermediario; en castizo, el chulo- ni en las fuerzas de seguridad -exigiéndoles mayores éxitos- no vaya a ser que detrás de los traficantes nos encontremos con nombres a quienes no se debe molestar.
Las lesbianas son mujeres a quienes les gustan las mujeres. No es de extrañar que algunas recurran a la prostitución femenina. Los homosexuales son hombres a quienes les gustan los hombres. Tampoco sería extraño encontrarlos en compañía de quienes estén dispuestos a compartir su homosexualidad a cambio de dinero ¿Qué son si no los chaperos?
Por lo que se ve, en su mundo-ficción, Sra. Alcaldesa, las relaciones homosexuales de pago deben ser maravillosas, pues ni las menciona. Seguramente los chaperos tienen una vida envidiable -no hay explotación ni se la espera- y, por supuesto, sus clientes…….¿Cómo vamos a sugerir que sean responsables directos de un tipo de trata de personas con fines de explotación sexual?
Por supuesto que no. Hace bien no sugerirlo.
Sería una barbaridad. Ellos son clientes, no traficantes. Lo mismo que los heterosexuales. Pero es a estos últimos a quienes Ud. señala con su dedo acusador.
En “A restricted country”, la escritora Joan Nestle, lesbiana y ganadora del “Lambda Literary Adwars”, otorgado a obras sobre asuntos LGTB, afirmó lo siguiente:
“En este trabajo intentaré honrar ambas historias: la de la mujer prostituta y la de la mujer “queer”. Primero, mi propio punto de partida: En los bares de fines de los años 50 e inicios de los 60 en los que aprendí mi manera lésbica de vivir, las putas eran parte de nuestro mundo”
Joan Nestle reconoce el recurso natural de las lesbianas a las prostitutas para satisfacer su sexualidad.
“Nos sentábamos en los taburetes una al lado de la otra, nos íbamos de juerga juntas, hacíamos el amor juntas. La brigada contra el vicio, los precursores de la “Morals Division (División de la Moral) con quienes las Women Agains Pornography –Mujeres Contra la Pornografía- no tenían ningún escrúpulo en colaborar, controlaba nuestro mundo……”
La galardonada escritora, denunció cómo el propio feminismo del movimiento citado actuaba en contra de las mujeres prostituidas en su afán por imponer su propia moralidad, delatándolas a la policía.
“Algunas de las primeras conferencias sobre feminismo radical y prostitución estuvieron caracterizadas por la ausencia total de trabajadoras sexuales, en todas las reuniones. La prostituta era una vez más la Otra, como lo había sido antes en los movimientos feministas de pureza sexual de fines del siglo XIX”
Nestle abordó un asunto clave y difícil de digerir para el feminismo: Su animadversión hacia la mujer prostituta. En una palabra, su empeño en imponer una moralidad totalizadora: su rectitud moral. Es el espíritu cínico y perverso de la moralidad victoriana trasplantado al mundo feminista. Joan Nestle los define con gran acierto con la expresión ya referida supra de “movimientos feministas de pureza sexual”.
Ud. acusa al hombre heterosexual de manera vil porque en los tiempos que corren no es políticamente correcto señalar a las trabajadoras sexuales como lo hacía otrora el feminismo denunciado por Nestle. Aquél se ha convertido en el muñeco del pim pam pum sobre el que Ud., y aquellas a quienes patrocina, arrojan todos los males de la mujer; sin embargo, los hechos dejan bien a las claras que su encono real lo es con las mujeres que libremente ejercen de trabajadoras sexuales.
Explíqueme, si no, por qué el gobierno de su partido les niega el derecho a sindicarse para protegerse de los abusos ¿Por qué?
Con su actitud al único que protegen es al tratante de blancas y al proxeneta, los verdaderos y únicos criminales. Eso sí, al que se atreven a señalar es al cliente, siempre que sea hombre y, por supuesto, heterosexual; a las lesbianas no osa mencionarlas, y a la prostitución del mundo homosexual, mucho menos. Ojo, y me parece bien. Pero el hombre heterosexual merece el mismo trato.
Es la moral totalitaria victoriana, insisto; puritana hasta la saciedad en su apariencia y podridamente perversa en el fondo, en cuyo lecho se esconde la peor de las aberraciones, la pederastia; tema tabú, salvo cuando se refiere a la iglesia católica, a pesar de las numerosas pistas que conducen hacia determinadas élites que no visten sotana.
¿Ha oído hablar del caso tapado durante varios años que salpica a la sociedad guipuzcoana, entre cuyos nombres se encuentra algún miembro prominente de su partido, además de empresarios, gente de la judicatura, políticos…..? Si lo desconoce, le animo a que indague en las investigaciones del conocido periodista Melchor Miralles y échele valor a ver si entre todos ponemos sobre la mesa el asunto más lacerante y vergonzoso de toda sociedad: el abuso y desaparición de niños de ambos sexos a manos de redes pederastas. Eso sí que merecería unas jornadas llenas de dignidad cívica, porque todavía está por verse la primera vez que el feminismo se movilice para visibilizar (utilizo una palabra muy común en sus reclamaciones) la tupida red de silencio y complicidad que afecta a los pederastas, donde, y recuérdelo bien, se encuentran víctimas de ambos sexos, o sea, también niñas.
Pero Uds. van a lo facilón: A señalar de manera genérica a todo hombre heterosexual, dando por sentado que no hay trabajadora del sexo que no sea víctima de explotación y trata, por culpa de quienes aceptan los servicios ofrecidos por ellas.
Dejen de hablar en nombre de quienes no se lo han pedido y permitan que ellas mismas se organicen y utilicen sus cauces de representación. Eso sí sería visibilizarlas. Pues tendrían una capacidad de presión institucional de la que ahora carecen ¡Qué poco les gusta a Uds. eso…….!
A Uds. les encanta dictar cuál debe ser la moral canónica y señalar con el dedo a quienes no la sigan.
Sra. Alcaldesa, ¿se da cuenta que a eso se le llama religión? ¿Se da cuenta que cualquier religión es dogmática en la moralidad que defiende?
Están creando una milicia de la moral. Una especie de policía religiosa. Gente que más que dedicarse a la política, parece miembro de una nueva secta religiosa. Más que mujeres respetando el libre albedrío de las demás, se asemejan a beatonas de falsos golpes de pecho gustosas de cuchichear si aquellos se besaron en la calle, se cogieron de la mano, o el vecino del quinto le dijo a una vecina del tercero “¡qué guapa está Ud. esta mañana!”, por expresarlo espontáneamente sin haberle preguntado primero si le daba permiso para decirle qué bella mirada lucía ese día de otoño.
Uds. quieren meter entre cuatro paredes mentales a las mujeres con pensamiento propio ¿De verdad no han creado una religión nueva?
La trata de blancas tiene un único enemigo: el tratante. La mujer que quiera ejercer libremente la prostitución tiene todo el derecho a organizarse, a defenderse, ¡a existir!, por tanto a sindicarse. Y las abadesas de nuevo cuño, si tanto les gustan los hábitos, que se los pongan; vendrán muy bien; faltan vocaciones.
Por cierto, sería interesante saber cuántas trabajadoras sexuales asistieron a estas jornadas y conocer su opinión ¿No hay que empoderar al pueblo? ¿O siguen siendo la “Otra”, como denunció Joan Nestle, a quienes hay que tratar como a ovejas descarriadas y mostrarles el camino de la virtud porque no saben lo que hacen? Eso me suena ¿A Ud. no?
Dejen a la mujer y al hombre que ejerzan su libertad. No son Uds. nadie para acusarlos de pecadores, y vayan a por los verdaderos criminales, si es que de verdad les interesa la lucha contra el crimen.
¿Para cuándo unas jornadas sobre pederastia?
Sin tapujos
Marcelino Lastra Muñiz
Me ha gustado la reflexión.
El dar la espalda a esta realidad, es abandonar a su suerte a quien ejerce la prostitución.
Son personas, y como tal merecen la protección de sus derechos sociales.
Resulta pasmoso el rechazo que la izquierda puritana hace de estas personas.
Es la salsa de los palmeros de Soros. Con las mafias de negreros, lo importante es hacerse la foto con los 4 morenos del barquito y se les da piso, ayudita, sanidad…. Y si les criticas eres un xenofobo, racista, bla bla bla y todos los borregos les hacen caso.
Y luegos los inmigrantes que vienen a nuestro país a colaborar a engrandecerlo a través de sus estudios y conocimientos ninguna autoridad ni les recibe ni se les ayuda
Bueno, al margen de elucubraciones y vericuetos, la trata existe porque hay quien consume mujeres.
Ya es hora de que el cliente de prostitución pase de invisible a responsable y, así, poner luz sobre este asunto muy grave que requiere la participación de toda la sociedad…..
Requiere del compromiso primero de las instituciones.
Las personas que ejercen la prostitución son sujetos de derechos sociales porque están en la mayor de las indefensiones, la ignorante actitud de las Administraciones respecto de ellas.
Es la izquierda puritana e hipócrita gran responsable de ello por dar la espalda conscientemente a esta realidad, que existe y existirá siempre.
Bueno Charles, sin más consideraciones que las meramente antropológicas, sin sesgo alguno moral o político, las putas han dado consuelo a tullidos, feos, aventureros, tímidos, solteros a la fuerza y a más de una capa de seda o esmoquin. Leer la prostitución en clave política es ponerle puertas al campo. Claro que ese mundo es colateral en muchos casos a la delincuencia. Pero si partimos del hecho de que una mujer pueda y quiera hacer con su coño lo que quiera nada que objetar. O sea a los tratantes, chulos y demás que las utilizan o esclaviza, leña al mono. Como dijo una vez alguien:las putas son la terapia de los feos imposibles de mirar. Esas son las imprescindibles.
Lo cierto es que la prostitución ha sido siempre una actividad permitida y tolerada, pero no promovida ni regulada por nuestro Ordenamiento Jurídico. De nuestra Constitución no se deriva ni la prohibición de regularla ni la obligación de prohibirla.
Pero, no hacer nada es una grave falta de responsabilidad. Toda prostitución es forzada….
Y de que las prostitutas/tos puedan sindicarse y deban cotizar? Y los impuestos?
Entonces pasarían a tener el peor chulo putas del mundo, a Agencia Tributa***.
Y cómo cotizarían, ¿por módulos, estimación objetiva singular?
Me imagino al inspector «valorando» los dones de la propia/o el propio, y estimando la caja que puede hacer, y en función de ello lo que debe abonar.. y pasando » y si no te parto las piernas o te rajo la cara ..» al te embargo hasta os regalos de tu primera comunión.
Añadamos el tema de que estén casadas/os.. hay casos y mas de lo que parece, por lo que cuentan, o que simpemente se echaran novio/a.
Entonces ¿el débito conyugal debería considerarse una donación?
Se nos abre una casuística fiscal casi infinita.
¡¡¡ GESTH* ilumínanos !!!
Y con la suma sacerdotisa de turno ( de la religión de lo políticamente correcto) además pontificando al respecto y valorando si cambiar de opinión, dado que en el sindicato de turno se está dando un curso de formación con gargo a presupuesto donde hay colocados muchos familiares.
un muy cordial saludo también
Todo tiene un precio, y en la prostitución más.
Y si hay precio hay base imponible.
Quien quiera protección social que contribuya como los demás.
Si se actúa en prostíbulos, que ellos sean el sujeto pasivo. Se reduce el censo de los obligados y se hace más eficaz el control.
Si se actúa por su cuenta, directamente se prohibe, salvo alta censal.
Oportuna columna Don Marcelino.
Porque el fondo no son las putas, es la necesidad de imponer una religion desde el Estado, una religión de Estado, una religión atea.
Y esta señora está haciendo oposiciones para sacerdotisa del asunto, pero por las luces que tiene no llegará ni a sacristana.
Francamente el tema de la prostitución me horroriza, y cada vez que voy por la carretera y veo esos «Clubs», sabiendo cómo se sabe, que allí sobreabundan chulos variados, que esclavizan a mujeres que mchas veces si están explotadas, se deja pasar por las autoridades; me embarga parecido cabreo a con lo que pasa en Vascongadas o Cataluña con los que no comulgan con la oficialidad, y sabiédolo las autoridades, hacen lo mismo que con esos clubs.
Siendo lo peor la voluntad de no aclarar que es lo que pasa. En un caso no queriendo saber que mujeres/hombres lo están porque quieren y cuales no, dándoles voz (un podemita diría empoderándoles); en el otro dejando que elijan la lenga en que quieren por ejemplo estudiar (sin intermediar políticos que decidan por ellos)
Un cordial saludo
Pasmao, un detalle. Te pongo esto de la Fundeu, porque empoderar no es exclusivo de Podemos:
«Para traducir el verbo to empower y el sustantivo correspondiente, empowerment, se están empleando en español las palabras empoderar y empoderamiento.
Así, en los medios de comunicación se encuentran frases como «Condenamos los abusos contra los gitanos que se producen en el territorio de la UE y seguiremos luchando para empoderar a las comunidades gitanas» o «Las participantes en la conferencia exploraron el empoderamiento político y económico de la mujer y revisaron las políticas regionales y de la Unión Europea al respecto».
Empoderar es un antiguo verbo español que la vigesimotercera edición del Diccionario académico recoge ya con el nuevo significado con el que se utiliza: ‘Hacer poderoso o fuerte a un individuo o grupo social desfavorecido’.
El empleo de empoderar y empoderamiento con este nuevo significado, que comenzó en el ámbito de la sociología política, es cada vez más extenso, y ello se refleja, por ejemplo, en la frecuencia de su aparición en los medios de comunicación o en los documentos normativos europeos.
Te lo digo, porque desde la rancia caverna se está condenando una palabra que tiene muchísima importancia social y casi convirtiéndola en algo delictivo o de arma arrojadiza contra colectivos ninguneados por el «heterofascistado» español (menudo palabro me ha salido).
Empoderar a la mujer para que no tenga que verse sometida al proxenetismo es fundamental en este momento.
Empoderar = Convertir a alguien en un «Power Ranger».
Término cada vez más usado por el Homo-idiotizado, o sea, el colectivo «idiotas por igual».
Apreciado Hobbes
Hay un refrén que dice «divide y vencerás»
El manejo de verbo «empoderar», actualmente, no se hace con el ánimo de resaltar las condiciones de un colectivo marginaizado para que se haga visible su situación y ayudar así a acabar con la injusticia; si no para dividir.
Para dividir y quitar poder a la parte no empoderada, hacerla de menos, y así poder manejar desde arriba la situación en provecho propio.
En ese «propio» no me refiero a mi persona..
Pero tenga cuidado, porque la caverna y lo mas empoderador, muchas veces se acaban dando la mano. Sólo hay que leer/oir a la ministra de Justicia hablando de la condición del ministro de Interior, mientras etaba rodeada de un perfecto clan representaivo de lo mas exhimio del oso cavernario.
En la actalidad, empoderar = dividir para manejar desde arriba hacíendoles/as/os creer que se manejan por ellos mismos.
Definición de «pasmao», sin copyright
un saludo
De acuerdo con lo que dices.
Aunque defiendo mi tesis de que empoderar es algo como hacer creer a un niño que poniéndose un disfraz de Supermán podrá volar y tener el resto de superpoderes.
Pero en realidad…a la naturaleza no se la puede engañar.
Qué fuerte Marcelino!! Como te atreves a escribir sobre un asunto que desconoces, usándolo para politizar y justificar a los punteros. A ver si vas a ser tú uno de ellos!!! Porque el perfil del putero es, al 98% un hombre y el perfil de la prostituta es una mujer. A ver ido a esa conferencia a informarte un poco mejor, es vergonzoso sacar un artículo sin base de conocimiento. Te recomiendo lectura de un libro: el putero español