Del 20 al 23 de septiembre, Ciudad Real retornará a sus orígenes medievales gracias al Gran Mercado Medieval Alfonsí que se celebrará en la Plaza Mayor, Plaza del Pilar y Jardines del Prado. 80 artesanos procedentes de localidades como Benavente, Torrevieja, Móstoles, Gijón, Guadalupe, Mojacar, Valencia, Granada, Córdoba, Navarra, etc. e incluso uno de Portugal y otro de Perú ofrecerán sus productos.
También destaca la presencia de artesanos de la provincia de Toledo: Ontígola, Retamosa, o Argés; Ciudad Real: Miguelturra, Bolaños de Calatrava, Montiel, Moral de Calatrava y Ciudad Real, o Guadalajara: Azuqueca de Henares.
Además habrá una veintena de puestos de alimentación repartidos por las distintas plazas y calles del Mercado, que se inaugurará a las 19 horas de este viernes, cuando el Rey Alfonso X El Sabio, junto a un príncipe real y acompañado de las autoridades locales, recorrerá el mercado para honrar al pueblo con su presencia.
En la calle del Prado se ubicarán talleres demostrativos de elaboración de calderos, magia, pintacaras, elaboración de quesos y lecheras con calabazas, etc. y una exposición de aperos antiguos. Para la diversión de los más pequeños se instalará una barca, un tiovivo y una colchoneta elástica, y se dispondrá de una colección de unos 20 juegos de época para niños y mayores, estos últimos totalmente gratuitos.
También habrá cuentacuentos, una exposición y espectáculo de Cetrería a cargo “La Jarilla”, espectáculos de fuego y pirotécnica con el Fakir Kammamuri que mostrará sus excelentes dotes como escupefuego y saltador sobre vidrios y sus geniales habilidades con la cama de clavos. Recorrerán el Mercado bufones, malabaristas, zancudos y músicos a cargo de “Edena Ruh” y “Saltimbankis de Sambi”, con la ambientación musical de la batucada “Crash!”.
Durante todo el fin de semana se sucederán las actuaciones con la aparición de misteriosos seres, malabares de fuego, un monje insatisfecho, bárbaros y zancudos…
El Mercado Medieval Alfonsí está organizado por el Ayuntamiento de Ciudad Real y la Asociación Cultural Artesana Medieval “El Cid Campeador”.
Sin duda, una recreación fiel de un regreso al pasado de la historia medieval de Ciudad Real.
Bueno, si realmente pudiéramos visitar un mercado medieval del siglo XIII, lo primero que nos llamaría la atención sería el mal olor.
¡A disfrutar!…..
Reconozco que los eventos medievales me llaman mucho la atención, sobre todo los musicales.
Lo «malo» que le veo a estos mercadillos es que se piten constínuamente en sus puestos, siempre la misma ubicación y pocas novedades. Los precios no se si por lo que cobra el Ayuntamiento a la Oraganización suelen ser caros, sobre todo en lo relativo a hosteleria.
Luego se ven muchos puestos que absolutamente nada tienen que ver con el mundo medieval.
Y echo de menos el mundo temático. Recuerdo el año que en los jardines del Prado hicieron una recreación de los instrumentos de tortura de la Inquisición. Esra espeluznante pero era historia y había que verlo…para que no se repitiera.
Echo de menos por último la actuación musical de algún grupo de renombre en el tema medieval, aparte de los clasicos de Alarcos. Hay grupos – no solo Wyrdamur, que son buenos como pasacalles, sino más bien en plan espectáculo como Corvus Corax.
En cualquier caso, bienvenidos de nuevo a la cultura medieval.
Ah! y la «guinda» sería que aún conserváramos la muralla medieval!!!
Menuda plasta el mercado medieval. Todos los años lo mismo: los dulces amasados con sobaco calentito para darles buen sabor.
Venga ya!! otro mercado medieval de estos?? esto ni medieval ni nada, hay que hacer otras propuestas o plantearlo de otra manera, antes cuando había uno de estos de vez en cuando estaba bien, pero ahora tenemos un mercadillo medieval cada dos por tres. Lo siento, pero esto tiene los días contados.
Si alguien necesita una nueva funda para su móvil, ya sabe, tiene el mercadillo medieval este finde en la plaza 😉
Los últimos años, a fuerza de organizarla un par de veces al año durante los últimos 15 años, ha perdido todo el sentido.
Solo hace falta darse una vuelta y ver como la gente(y poca, no es como hace años) se limita a pasear ojeando algunos puestos, pero poca compra.