El Hospital Nacional de Parapléjicos, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla–La Mancha, pionero en la experimentación con tecnologías neurorrobóticas, participa en el proyecto europeo llamado EXTEND, que dentro del programa ‘Horizonte 2020’ irá destinado a desarrollar interfaces robustas, eficientes e implantables con técnicas mínimamente invasivas para que las personas con problemas de movilidad interactúen con la tecnología de asistencia (exoesqueletos, neuroprótesis, etc) y consigan así mayor independencia.
Según el director del Grupo de Neuro-Rehabilitación del CSIC, entidad que coordina el proyecto EXTEND, José Luis Pons, “los implantes se situarán en zonas periféricas, los músculos que permiten mover nuestras extremidades, y tendrán la capacidad de medir la señales bioeléctricas así como de estimular los músculos”.
El resultado de las investigaciones se ensayará en dos aplicaciones, “primero para establecer la interfaz con exoesqueletos de miembro inferior para asistir a la locomoción de personas con paraplejia, y en segundo lugar, para atenuar los temblores patológicos asociados a enfermedades neurodegenerativas tales como la enfermedad de Parkinson o el temblor esencial”, señala José Luis Pons .
El Hospital Nacional de Parapléjicos, a través de la Unidad de Biomecánica y Ayudas Técnicas, llevará a cabo todo lo que tiene que ver en la interacción entre el proyecto EXTEND y el usuario con lesión medular.
Según el responsable de la citada Unidad, Antonio José del Ama, “por una parte, el Hospital se encarga de identificar a los usuarios potenciales que se beneficiarían de este proyecto, qué características y las necesidades que tienen, información que luego va a guiar todos los desarrollos en el resto del proyecto. La participación se extenderá durante la ejecución del proyecto interviniendo en la realización de experimentaciones con las diferentes tecnologías desarrolladas sobre personas sanas y con lesión medular”.
El proyecto EXTEND, que cuenta con un presupuesto que ronda los tres millones de euros, tendrá una duración de cuatro años, finalizará por tanto en 2022 y en él participa, además del SESCAM a través del Hospital de Parapléjicos, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, como entidad coordinadora, el Imperial College of Science Technology and Medicine de Londres, la Universidad Pompeu Fabra, el Fraunhofer Gesellschaft de Alemania y la empresa Össur SF de Islandia y el Servicio Madrileño de Salud.
Los expertos de la OMS destacan el prometedor futuro de estos sistemas tecnológicos en la rehabilitación de la función de la marcha en pacientes que presentan una lesión neurológica, como los que se encuentran ingresados en el Hospital Nacional de Parapléjicos que, a través de la Unidad de Biomecánica y Ayudas Técnicas, cuenta con una dilatada trayectoria de investigación en el ámbito de la tecnología al servicio de la rehabilitación física y la valoración funcional de trastornos neurológicos, con proyectos europeos como ‘HYPER’ o ‘BioMot’