Almodóvar del Campo celebraba ayer lunes 16 de julio la jornada de fiesta local que sirve para honrar a su patrona, la Virgen del Carmen. La función de mediodía, la eucaristía nocturna y la procesión que daba comienzo pasadas las nueve de la tarde-noche, completaron una programación que este año ha gozado de un carácter extraordinario.
La ordenación como sacerdote del carmelita descalzo almodovareño fray Javier de María, era motivo para dos desfiles procesionales únicos con la imagen de esta advocación mariana. Momentos, el viernes día 6 y este domingo 15, que propiciaron la fusión del sentimiento cofrade de hermandades de Gloria y de Pasión, puesto que la patrona discurrió al paso de costaleros.
Así lo señalaba el alcalde José Lozano, quien en la medianoche del 15 al 16 de julio, hacía referencia a este movimiento ciudadano que propicia que cualquiera de las hermandades participe para engrandecer las celebraciones locales. En este caso, las Hermandades de Mujeres y la de Hombres de la Virgen del Carmen y la de Jesús Rescatado, Nuestra Señora de las Mercedes y Niño Jesús.
El alcalde, indicó momentos antes de la bendición de la nueva vidriera, que representa a la Virgen del Carmen y su Hijo, y que embellece la fachada del templo carmelitano de Almodóvar, que el Consistorio que dirige apoyará toda acción que sirva para dignificar el patrimonio religioso local, acorde con la promoción de un turismo que tiene en lo religioso, una de sus componentes fundamentales. Igualmente felicitó a los promotores de la iniciativa así como a todos los vecinos.
La bendición, que realizó fray Javier de María, el canto del himno a la patrona, la Salve y la ofrenda floral, ponían el colofón a una noche que se había iniciado a las diez y media de la noche, con el denominado ‘Rosario de la Luz’ que sirvió para que, junto a cientos de personas y todas las hermandades locales, la Virgen del Carmen volviera a su iglesia. Allí, el párroco Juan Carlos Torres recibió del joven sacerdote el escapulario de la patrona.
Los vecinos de las calles por las que discurrió, engalanaron el paso de la imagen de la Virgen del Carmen y le lanzaron infinidad de pétalos. Los altos más significativos fueron ante las casas de los santos Juan Bautista de la Concepción, Juan de Ávila y el convento de las monjas jerónimas, ya en la calle Corredera.
Por esa calle, nueve días antes había sido trasladada, a costal, la imagen de la patrona, presidiendo entre ambas fechas el altar mayor del templo parroquial, donde el día 7 fray Javier de María cantó su primera misa como sacerdote y donde cada tarde predicó el octavorio preparatorio para la fiesta grande de este 16 de julio.
Ayer, en la función de mediodía, el joven sacerdote carmelita descalzo impuso simbólicamente a toda la localidad el escapulario de la Virgen del Carmen, un gesto personificado en la persona del alcalde, José Lozano, agradeciendo de este modo las muestras de cariño recibidas, desde que se ordenó sacerdote, en Toledo.
Al término de la misa, donde también intervino el párroco y diácono José Manuel Seijas, así como el coro parroquial, los asistentes recibieron el tradicional ‘puñao de garbanzos’, en espera de la misa vespertina y la procesión tradicional de la patronal, donde los pétalos y las palomas echadas a volar pusieron, un año más, la nota de color y agasajo a la Virgen.