El pasado mes de junio, relata el Colectivo Espinas en un hilo a través de la red social Twitter, una chica de Ciudad Real sufrió “acoso y una agresión sexual” en nuestras calles. La afectada habría pedido a este grupo feminista dar difusión al caso para “mostrar” a las demás chicas lo que ocurre en esta ciudad.
“Eran cerca de las 23 horas cuando se hallaba realizando deporte por la Ronda de Santa María. Mientras pasaba por el parking de dicha zona, un hombre comenzó a ralentizar su paso para ponerse a su altura. Era de complexión delgada, alto, pelo corto y claro”, describen al sujeto.
A la altura de la calle Esperanza, la chica paró a atarse las zapatillas apoyándose a una farola. “En ese momento ocurre la agresión: el hombre decide, aprovechando que estaba agachada, agarrarle del culo, mientras le decía chica, eres muy guapa, vente conmigo. A continuación, la agarró de los hombros y la cintura atrayéndola con fuerza hacia él”, prosigue el colectivo feminista.
“La chica llamó disimuladamente a su madre mientras hablaba en alto para que oyera la conversación. Así, en ella, pedía ayuda y que se llamara a la policía. Siguió caminando de manera rápida, pidiendo que la dejara en paz y parara de perseguirle. Por el contrario, él seguía tras de ella agarrándola por el culo, las caderas y los hombros”, continúa.
Este “acoso” no cesó hasta que su madre llegó a la zona donde se encontraba. “Aunque pasado el rato volvió con la misma intención, con suerte de la víctima de que pasaba un coche policial en ese momento que comenzó a perseguir al agresor”, concluye.
Con esto, señala el Colectivo Espinas, desean realizar una denuncia social ante la “poca seguridad con la que podemos andar las mujeres de noche en la calle”.
“Pero no sucede solo aquí, sino que ocurre en cada pueblo, en cada ciudad y en cada país donde nos encontramos oprimidas por el sistema. Dejando así a los hombres con una falsa creencia de tener derecho a usar a las mujeres como así ellos lo deseen”, remacha el grupo feminista.
Cuánto han cambiado los tiempos.
Cuando me iba de marcha o volvía de ella y me cruzaba con una chica guapa, me callaba por supuesto, aunque mi mente volara sin poderlo remediar. Intentaba ligar si me veía valiente. Pero si a la chica no le interesaba, pues nada, te ibas con la mayor dignidad posible.
Cierto es que no me adoctrinaron en ideología de género. Hoy las cosas parecen haber cambiado…a peor.
La seguridad es la primera de las libertades y, para una mujer, poder viajar tranquila en transporte público y sentirse segura en las calles es la primera de sus libertades…..
«…nos encontramos oprimidas por el sistema». No, Colectivo Espinas. El «sistema» no le toca el culo a nadie, se lo aseguro. Del mismo modo que el funcionariado o la policía, el ejército o el clima. Esos sustantivos no tocan el culo a nadie.
Todo el ánimo y apoyo a la agredida, y todo mi asco al agresor.
Me hace mucha gracia eso de la opresión, cuando actualmente las mujeres en este pais viven en un situacion de privilegio juridico que es pasmoso. Estos articulos fomentan el odio y el desprecio hacia el hombre porque exista una minoria de infraseres que no nos representan. Estos movimientos feministas pretenden generalizar al hombre como malo, y pretende crear una fractura entre seres humanos. Que a fin de cuentas es lo que todos somos.