El Ayuntamiento de Valdepeñas y la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) de la localidad han llegado a un acuerdo para desarrollar un estudio de localización y catalogación de las tradicionales cuevas de la localidad, con el objetivo de que se preserven y mantengan viva la historia a través de este elemento diferenciador, que es también patrimonio de Valdepeñas.
El legado vitivinícola de la ciudad ha dejado como testigo estas edificaciones que aún se conservan dentro de viviendas y bodegas, según apuntaba el teniente de alcalde de Cultura, Turismo, Comercio y Educación, Manuel López Rodríguez, que añadía que “también han existido de forma que podían servir de almacenaje o de refresqueras para las casas o bodegas, además de refugio para la Guerra de la Independencia o la Guerra Civil, aunque el trabajo se va a centrar principalmente en el vino, ya que las cuevas son elementos característicos y hasta hoy no ha existido una catalogación o localización veraz”.
En este sentido apuntó que los trabajos que desarrollarán expertos de la UNED consistirán en la localización y catalogación de cuevas, como las que existen en el Museo Municipal o en la Escuela Municipal de Música y Danza, llevando a cabo un estudio antropológico y de historia de las mismas, así como de los elementos que pudieran hallarse dentro de ellas, como el envase de barro más grande del mundo: las tinajas.
Esta meticulosa labor también llegará a las casas particulares, que recibirán una carta informando del desarrollo de este trabajo con el objetivo de que faciliten el estudio de las mismas, aunque los primeros pasos ya han comenzado con un antiguo inventario de la DO Valdepeñas. “Es curioso observar cómo están situadas a través de los caminos principales de entradas y salidas de nuestra ciudad, sabemos que muchas de ellas ya no están pero aun así se van a catalogar”, ha explicado el director de la UNED de Valdepeñas, Pedro Jesús Sánchez, apuntando que “este tipo de catalogación de cuevas ya se está haciendo en otras ciudades, pero posiblemente de nuestro entorno cercano sea la ciudad que tenga cuevas dedicadas a la elaboración más antiguas”.
Hay que recordar que recientemente el Consistorio recuperó la cueva ubicada en la casa solariega del siglo XVI que alberga en la actualidad el Museo Municipal de la localidad. Los trabajos llevados a cabo con personal de Planes de Empleo lograron rehabilitar una cueva que se sitúa a 11 metros de profundidad, con una temperatura constante de 15 grados y que conserva en 90 metros cuadrados sus 32 tinajas, con una capacidad de unos 1.000 litros por unidad.
