La Consejería de Educación, Cultura y Deportes va a colaborar con la ONCE para hacer accesibles a las personas ciegas los programas de gestión educativa ‘Delphos’ o ‘Papás’, con el fin de que puedan tener acceso a ellos en igualdad de condiciones aquellos docentes, madres o padres con discapacidad visual.
Así lo ha avanzado hoy el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, durante la visita que ha realizado al Colegio ‘Alfonso VI’ de Toledo junto al delegado territorial de la ONCE en Castilla-La Mancha, Carlos Javier Hernández, para asistir a la presentación de ‘Braitico’, un método inclusivo pensado para todos los alumnos y alumnas de un aula en la que exista un compañero ciego y que descubra el braille de manera divertida, cercana y sencilla.
Felpeto ha recordado la permanente colaboración mantenida entre el Gobierno regional y la ONCE desde que en el año 2000 se recibieron las transferencias y que “hace realidad cada día el lema que es seña de identidad de la Consejería, la educación es la base de la igualdad”. Con la intención de seguir avanzando, ha explicado el interés en trabajar conjuntamente para lograr que los programas de gestión educativa, que según ha reconocido no son accesibles, puedan serlo y que “una madre o un padre o un docente ciego pueda tener acceso igual que el resto”.
Respecto al método ‘Braitico’, Felpeto ha felicitado a la ONCE por dar un paso más en su labor por la integración a través de la educación, en este caso con el uso de las nuevas tecnologías que permiten mejorar esa colaboración y la interactuación entre los niños y niñas con discapacidad y los que no lo son.
Asimismo, ha querido poner en valor el trabajo diario que realizan muchos centros y sus docentes orientados a la inclusión de quienes tienen discapacidades diferentes para que todos aprendan a convivir en el centro y en la sociedad.
La ONCE va a introducir en todas las aulas de Castilla-La Mancha donde haya escolarizado alumnado con discapacidad visual el método ‘Braitico’, que favorecerá que los escolares ciegos que aprendan a leer y a escribir lo hagan de igual forma dentro y fuera del aula, fomentando además que el resto de compañeros se interesen, conozcan y familiaricen con este código.