El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, va a asistir mañana, domingo, a la tradicional Romería de la Virgen de Consolación, que se celebra todos los años el Domingo de Pentecostés en la localidad conquense de Iniesta, y que congrega a miles de personas procedentes de los distintos pueblos de la comarca de La Manchuela.
Declarada Fiesta de Interés Turístico Regional desde 2008, esta romería supone el traslado de la Virgen de Consolación desde la iglesia hasta su santuario, en un recorrido de unos 17 kilómetros que comienza al alba, en los que es llevada a hombros y acompañada por miles de personas. El camino, a lo largo del cual se suceden los ‘bolos’ o ‘cucos’, construcciones con tejados cónicos usadas como refugios que forman parte del patrimonio arquitectónico popular de esta comarca conquense, es motivo también de hermanamiento con localidades vecinas.
Tras la misa y la procesión, es tradición pasar un día de campo en el Sitio de Consolación, un paraje de gran belleza con paisajes kársticos, cuya máxima expresión son los ‘cuchillos’ labrados por el río Cabriel.
Se trata una de las fiestas más arraigadas de esta comarca y sus orígenes se remontan al siglo XVI. Desde entonces, esta tradición se ha ido manteniendo año tras año.
