Médicos y enfermeros de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario (GUETS), dependiente del SESCAM, han realizado recientemente el curso ‘Asistencia Sanitaria en medios adversos’, una actividad formativa con la que los treinta asistentes han podido actualizar sus conocimientos para trabajar con más seguridad y en coordinación con otros profesionales de Emergencias.
Los profesionales de la GUETS realizan asistencias sanitarias en el medio extra hospitalario y en escenarios muy diferentes. En muchas ocasiones, los equipos sanitarios de emergencias son los primeros intervinientes y resulta fundamental realizar un buen control del escenario para evitar la progresión del accidente así como las lesiones en los propios implicados.
En algunos casos, el escenario es sumamente adverso, hostil y peligroso para su propia integridad física, por lo que se hace fundamental contar con la colaboración de los equipos de bomberos para poder realizar con seguridad la asistencia a la víctima.
Con estas actividades formativas, los profesionales de la GUETS no pretenden convertirse en rescatadores profesionales, sino contar con criterios y conocimientos básicos de asistencia a pacientes en entornos complicados como caídas en pozos o fosos, atrapamientos en espacios confinados por derrumbamientos, caídas por terraplenes de difícil acceso; o con condiciones asistenciales adversas como baja o nula visibilidad, espacio de acceso reducido, elementos cortantes presentes, entre otros, que permitan la asistencia sanitaria con garantías de seguridad para pacientes e intervinientes y realizar un control de los riesgos asociados al entorno del accidente.
De forma bidireccional, se transmite al personal especialista en rescate conocimientos sobre asistencia sanitaria inicial básica así como manejo adecuado de pacientes lesionados en entornos de difícil acceso.
La metodología del curso fue mixta, una parte teórica en aula, que tuvo lugar en la Facultad de Enfermería de Albacete para exposición de cuestiones de asistencia sanitaria de emergencias, seguridad en escena y medios de protección para todos los alumnos, y una parte práctica.
La jornada práctica se desarrolló en la zona del Castillo de Chinchilla de Montearagón (Albacete). El alumnado se dividió en grupos reducidos de máximo cinco alumnos para realizar la intervención bajo la supervisión de un monitor sanitario (análisis de la asistencia sanitaria) y un monitor de rescate (bombero, para análisis de medidas de acceso a la víctima, seguridad de los intervinientes y rescate afectados). Los escenarios de intervención se organizaron para simular situaciones que se han producido en avisos reales en los que han participado profesionales de la GUETS.
En concreto, fueron seis escenarios: caída de trabajador en un pozo de cinco metros de profundidad que es atravesado por vara metálica a nivel abdominal; caída de paciente con antecedentes psiquiátricos que presenta traumatismo craneoencefálico severo en cornisa de pared sin protección; caída de paciente que sufre un infarto de miocardio por terraplén de 15 metros; atrapamiento de dos pacientes en estructura colapsada por derrumbamiento mientras trabajaban; accidente de moto junto a pared vertical sin protección y caída accidental de paciente en pozo de 15 metros de profundidad.
El conocimiento de los elementos de autoprotección así como las técnicas de acceso a las víctimas mejora el desarrollo de la intervención y da seguridad a los profesionales a la hora de asistir al paciente, aunque el aspecto más importante es la coordinación entre servicios de rescate (bomberos) y servicios sanitarios (médicos y enfermeras) para que la intervención sea eficaz, ágil y segura para todos. Esta coordinación sólo es posible si hay un conocimiento mutuo previo entre ambos servicios y las técnicas y medios propios de cada uno.
Actividad en situaciones complicadas
En los últimos años, se observa un incremento de la siniestralidad asociada a los deportes y Castilla-La Mancha no es ajena a esta situación puesto que se han realizado rescates con asistencia sanitaria a víctimas de accidentes de espeleología, de vuelo sin motor, actividades de barranquismo, etc. Asimismo, la actividad laboral es una fuente también de accidentes en entornos complicados, como puede ser el trabajo en un aerogenerador, caídas en fosos o colapso de estructuras.
La principal causa de siniestralidad en España es el accidente de tráfico, en el que las dificultades para acceder y rescatar al paciente vienen condicionadas por la posición del vehículo y el entorno donde se produce el accidente. En 2017, el 45 por ciento de la actividad de los recursos sanitarios avanzados de emergencias se efectuó en carretera, vía o lugar público, y similar (trabajo, centro educativo…), es decir, fuera del domicilio y/o centro sanitario.