Médicos y enfermeros han debatido sobre los problemas cotidianos a los que tienen que enfrentarse ambos colectivos en su día a día, y se han planteado temas de mejoras. Ha sido en un encuentro promovido por el Colegio de Médicos de Ciudad Real, enmarcado en los actos de su Centenario, y que ha tenido lugar en el Antiguo Casino de Ciudad Real con una importante afluencia de profesionales sanitarios.
El encuentro arrancó con la inauguración oficial en la que intervinieron los presidentes de ambos colegios, Dr. José Molina Cabildo, del Colegio de Médicos y Francisco Izquierdo Barba, del Colegio de Farmacéuticos, junto al delegado provincial de la Consejería de Sanidad, Francisco José García Sánchez, quien valoró este punto de conexión entre colegios profesionales al tiempo que alentó a los asistentes a dar cuenta de las conclusiones de la jornada para intentar implementarlas desde la Administración.
Moderada por el secretario del Colegio de Médicos, Dr. César Lozano Suárez se desarrolló la mesa central donde intervinieron los presidentes colegiales, Teresa Migallón Burgos, jefa de la sección de Farmacia en la dirección provincial de Sanidad de Ciudad Real, Augusto Ortega Jiménez, farmacéutico del Centro de Información de Medicamentos (CIM) del COF Ciudad Real, y Blanca Suárez Luque, farmacéutica formadora colegial del COF Ciudad Real.
El Dr. Lozano hizo varias reflexiones antes de dar paso a los ponentes. “A la hora de preparar esas jornadas solo hubo que pensar en el día a día tanto de un médico como de un farmacéutico. Es el caso por ejemplo de una paciente en espera de intervención quirúrgica que es dada de alta pero requiere una medicación compleja sin prescripción oficial, o un paciente psiquiátrico sin receta oficial que requiere un psicofármaco”. En todos los casos existe, en opinión del secretario colegial una falta de respeto al paciente, al médico y al farmacéutico. Aun así, insistió, “estos encuentros son un buen punto de partida para solventar todas estas cuestiones que faciliten la labor de los profesionales y redunden en la salud de los pacientes”.
El presidente del Colegio de Farmacéuticos también hizo un repaso de las principales quejas de ambos colectivos pero, recordó, “el hecho de que estemos aquí significa que queremos mejorar. Tenemos que estrechar los lazos para intentar mejorar la calidad de vida del paciente”. Hizo hincapié en que es necesario el acceso al historial farmacoterapéutico, y un mecanismo de comunicación bidireccional entre médicos y farmacéuticos.
El presidente del Colegio de Médicos abordó la receta privada, de carácter obligatorio, que asegura la trazabilidad del medicamento desde que es recetado hasta que es dispensado, al tiempo que acredita que la persona que receta es médico colegiado y está en posesión del título que figura en la receta. En la clausura del encuentro, el Dr. Molina repitió que las jornadas nacían con “intención de continuidad, puesto que ambos colectivos tienen problemáticas parecidas y ambos tienen que educar al paciente en salud y en el buen uso de la sanidad”. Además explicó, “estas jornadas están abiertas al resto de colegios profesionales e instituciones sanitarias”.
El resto de los ponentes hablaron de los desabastecimientos de medicamentos, de cómo se producen y cómo se comunican y de los servicios profesionales desde la oficina de farmacia.
