El Gobierno de Castilla-La Mancha ha incrementado esta legislatura casi un 20 por ciento el presupuesto dirigido a los programas de atención a personas con discapacidad. Además, en 2018 se destinan 45,6 millones de euros al pago de subvenciones a entidades privadas para el mantenimiento de centros, servicios y el desarrollo de programas de atención a las personas con discapacidad.
Estos datos se han puesto de manifiesto en la reunión que ha mantenido la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, con la presidenta del CERMI Castilla-La Mancha, Cristina Gómez, en la que también han participado el director general de Mayores y Personas con Discapacidad, Javier Pérez, y el gerente de la entidad, José Antonio Romero.
El presupuesto para las ayudas a entidades privadas en el ámbito de la discapacidad ha aumentado casi un 20 por ciento esta legislatura, al pasar de 38,2 millones de euros en el año 2014 a 45,6 millones en 2018.
Como novedad, los pagos se realizan con carácter mensual, medida con gran acogida por parte de las entidades, la gran mayoría integradas en CERMI Castilla-La Mancha.
Subvenciones
Las subvenciones para entidades privadas de iniciativa social tienen como objetivo, por una parte, cofinanciar los gastos de personal y mantenimiento de centros y servicios cuyo objeto es la atención directa y la mejora de la calidad de vida en la atención a las personas con discapacidad.
Por otra parte, están destinadas a financiar programas encaminados a desarrollar la participación y la inclusión social de las personas con discapacidad en su comunidad.
En 2017, gracias a esta convocatoria, se atendieron a 7.800 familias con personas con discapacidad en Castilla-La Mancha.
Estas ayudas ponen de manifiesto el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha con las entidades privadas que desarrollan su labor en el ámbito de la discapacidad.
Así, el Gobierno autonómico contribuye a ampliar y consolidar la red de recursos especializados de atención a las personas con discapacidad en Castilla-La Mancha.
