Visto desde hoy la historia de Planificación Local, por así denominarla, cuenta ya con un importante recorrido histórico constatable. Otra cuestión a considerar y valorar será la presunta utilidad de tales instrumentos de ordenación urbana, su grado de cumplimiento y su eficacia final sobre la ciudad y sobre los ciudadanos. Ubicables dichas herramientas planificadoras en el marco normativo que naciera en 1956, con la primera Ley urbanística española, conocida como Ley del Suelo.
La pretensión de tales documentos reguladores se ha encabalgado entre las dos tendencias de las filosofías planificadoras: la Indicativa, al modo de los Planes de Desarrollo Económica y Social de 1964 en adelante; y la Planificación Directiva o Central. Esto es programas abiertos a la iniciativa privada y programas exclusivamente públicos, como los soviéticos de la Planificación Quinquenal.
Algún día habrá que hacer ese balance histórico del Planeamiento urbano local y provincial, por no hablar de otras instancias superiores, transversales y diversos, que viajan desde los Planes Provinciales de Servicios Técnicos de los años sesenta y setenta, a las clausuradas Normas Subsidiarias Provinciales de Planeamiento (1980), pasando por los Planes Provinciales de Cooperación Municipal de la misma década; hasta los más recientes Planes Territoriales y de Ordenación del Medio Físico, producidos ya al amparo de la pretensiones de las diferentes legislaciones autonómicas, de la mano de las variadas LOTAU que han existido.
Sólo en el caso de Ciudad Real capital hemos contado con hasta seis instrumentos planificadores, desde el temprano PGOU de 1963 al PPCR de 1968, desde el PGOU de 1976 (adaptación a la nueva Ley del Suelo de 1975), hasta su revisiones y modificaciones de 1987 y 1997. Incluyendo el no nato, pero si iniciado y redactado el Avance, POM de 2010, recientemente decapitado. Junto a ellos, habría que citar el Plan estratégico 2005-2015 o la iniciativa EDUSI 2017-2022. Para completar el bucle melancólico de las Planificaciones Prometidas, el pasado día 26 asistimos al nacimiento de otra realidad nueva, denominada sutilmente Plan Modernizador Ciudad Real 2025. Plan que ni es un Plan Urbanístico y Territorial, ni es un Plan Económico y Financiero de las administraciones concertadas en él.
Por ello algunos se preguntan ¿qué cosa será el paquete rojo con lazo y celofán, llamado Plan Modernizador Ciudad Real 2025? Aquí en estas páginas ya se han producido opiniones relevantes (Antonio Fernández Reymonde y Alberto Muñoz) que cuestionan desde la elaboración misma (¿por qué se externaliza la redacción del Plan y por qué se ha producido la adjudicación sin la publicidad requerida por la legislación de Contratos Públicos?; ¿por qué no se ha creado una Oficina Técnica del Plan, participada por funcionarios de las administraciones concertadas?) hasta el supuesto proceso de participación ciudadana. Incumpliendo, claramente, el doble mantra esgrimido por el gobierno municipal de Participación y Transparencia. Nadie de los aludidos y otros más de los comentaristas a sus textos, reconocen haber sido contactados. De igual forma que se ha hurtado el conocimiento del documento, hasta el momento mismo de su presentación en sociedad. Cuando bien cierto es, que toda la lógica formal de la tramitación de los documentos Planificadores públicos cuentan con ese tipo de garantías en el procedimiento aprobatorio. Se presentan el Avance del Plan, se somete a Información Pública, se atienden las reclamaciones relevantes, se procede a su Aprobación Administrativa y se anuncia en el DOCM y en el BOE. Aquí todo el procedimiento normal y usual se ha omitido. Y por ello, se elaboran secretamente unas directrices de algunos de los problemas (¡sólo algunos!) comunes y sabidos por todos, y se les dota de contenido económico, sin compromiso de gasto.
Por lo que todo ha consistido a un acto de difícil clasificación y de efectos propagandísticos a un año vista del comienzo del proceso electoral de 2019. Pese a que el Plan Modernizador Ciudad Real 2025 no figuraba como tal en los programas electorales de 2015, su introducción en la palestra política responde a cierta precipitación y a la búsqueda de réditos electorales. Para concluir, finalmente, algunas líneas críticas de las citadas antes, con la sensación advertida de que el Plan Modernizador, nace con tufos electorales y aires partidistas, lejos de la equidad institucional que suelen requerir tales documentos planificadores que a todos deben comprometer. Los más atentos a la realidad, han echado en falta una alusión crítica al Punto Negro de Concentración Moderna, que supuso, entre 1999 y 2006, la confluencia del Aeropuerto de Ciudad Real y el Reino de Don Quijote. Que fueron vistos en esos instantes, como el impulso modernizador por excelencia de la ciudad, la comarca, la provincia y la región. El relato de García Page sobre los tres momentos modernizadores y estelares de la ciudad y sus infraestructuras (Universidad, AVE y Hospital general), olvidó interesadamente ese cuarto enclave prodigioso que acabó con consecuencias ruinosas y terminó sepultando a CCM.
Pese a todo y a la polivalencia del concepto, se ha recurrido a esa estirpe innovadora, utilizando el caro (en el doble sentido, de querido y costoso) neologismo de Plan Modernizador. Cuando bien a las claras toda pretensión planificadora cuenta, de suyo y obligatoriamente, con ese carácter modernizador y superador de la realidad de la que se parte. Por lo que la expresión Plan Modernizador es ya una tautología, en la medida en que se planifica para mejorar y modernizar las estructuras sobre las que se va a intervenir.
Otra cuestión no menor, es la del propio contenido y su articulación con otros Planes anteriores y con otras programaciones estratégicas existentes. Incluso advertir la falta de determinaciones sobre problemas ignorados; problemas que van desde la política hidráulica (la paralizada tubería manchega) en momentos de incertidumbre de los recursos hídricos, a problemas territoriales del área funcional y comarcal de Ciudad Real, que afecta a más municipios, no sólo Miguelturra. No existen, tampoco, determinaciones sociales en favor de colectivos sociales perjudicados ni pronunciamientos sobre los problemas poblacionales provinciales (envejecimiento, despoblación, desruralización). Se identifica la Universidad como una industria (sic), pero no se producen inversiones sobre la paralizada Facultad de Medicina. Se formula el mandamiento de la rehabilitación edilicia como premisa y se condena a la piqueta al cerrado Hospital de Alarcos y el Centro de salud de Pio XII. Ciudad Real que en este momento no cuenta con Planeamiento Urbano actualizado, al haberse aparcado el POM de 2010, se gobierna con un documento tan pasado como el PGOU de 1997, que no puede ser el instrumento para el arco temporal hasta 2025. Junto a ese limbo urbanístico, habrá que preguntar por la correlación entre el Plan Estratégico y la EDUSI con el pomposo Plan Modernizador.
Por todo ello el nombre del texto, Planes y Parábolas. Porque donde el relato del Plan y del Programa resbala y patina, aparece la figura potente de la Parábola como ejercicio literario y metafórico. Que, obviamente, tiene otras pretensiones y que no deja de expresar una forma narrativa ficticia, consistente por ello en un relato figurado del cual se deriva una enseñanza moral o inmoral, relativa a un tema que no es el explícito. Si el Plan Marshall fue una programación económica y social relevante para la reconstrucción de la Europa devastada (European Recovery Program, ERP, 1948-1952) la mejor versión de la planificación hispana nos la proporcionó la película de Luís García Berlanga Bienvenido Mister Marsahll (1953). Donde todos los habitantes de Villar del Río, ante la llegada de la bonanza americana, se vistieron de flamencas y flamencos y entonaron la alabanza de sus sueños. Aunque el plano final fueran los papelillos y faroles arrumbados en el imbornal. Pura parábola.
Periferia sentimental
José Rivero
Hablando de no olvidar, debemos traer a la memoria un hito relevante que se dio entre la primera Ley del Suelo de 1956 y la más reciente de 2007: la Ley 6/1998, de 13 de abril.
Una Ley que propició el aumento en la construcción de viviendas de una manera descompensada y con un perverso impacto en precios. Cualquier terreno era fértil para el desarrollo de un complejo residencial, hotelero, comercial o unas grandes infraestructuras que, al final, dejó miles de esqueletos urbanísticos.
El Plan Modernizador Ciudad Real 2025 no son palabras bonitas ni bienaventuranzas, sino signos y hechos concretos para una modernización necesaria. Recuperar la ciudad para las personas.
Una parábola también puede ser verosímil y verdadera…..
ESO NO ES VERDAD.
La ley de liberalización del suelo de Aznar fue derogada por el Constitucional porque la competencia sobre ordenación del territorio la tenían las CCAA.
La especulación inmobiliaria fue resultado de la política monetaria, una irracional expectativa de crecimiento ilimitado y de que la liberalización del suelo no llegó porque hubo pasividad de las CCAA y los Ayuntamientos seguían gestionando el suelo arbitrariamente.
D. José María Aznar aprobó una Ley del Suelo que multiplicó la exuberancia irracional del sector de la construcción: ‘todo el suelo se declaró urbanizable, salvo que estuviera expresamente prohibido’.
Con ese bonito principio liberal se favoreció el ‘boom’ inmobiliario de la construcción.
Una herencia recibida…..
Y esa misma ley fue declarada inconstitucional.
Sentencia 164/2001 del Tribunal constitucional.
Deroga parte de la Ley del Suelo del 98, por invadir parte de las competencias de las Comunidades Autónomas y de los Ayuntamientos.[9] Entre otros, se interpretaron los artículos relativos a la clasificación de suelo como urbanizable (arts. 9 a 11) de tal forma que permitía un amplio margen de actuación en este ámbito a los entes territoriales, lo que en la práctica anuló muchos de los efectos liberalizadores que se atribuían a la ley.[10] La sentencia contó con un Voto particular disidente de Manuel Jiménez de Parga.
AHORA RECTIFICA SI TE QUEDA HONESTIDAD.
El resultado fue que la oferta de suelo quedó limitada a los POUM. La demanda era muy alta.
Consecuencias, los precios del suelo eran muy altos, se repercutió en los compradores que además accedieron sin control a préstamos baratos.
A pesar de ello, el Estado continuó plasmando una determinada concepción del derecho de propiedad urbana en sus líneas más fundamentales ya que compete al Estado la regulación de las condiciones básicas.
No tengo absolutamente nada que esconder y, por eso, prefiero incomodar con mi honestidad que agradar con hipocresía…..
Más bien será al contrario, que prefieres incomodar con tu hipocresía (ante la evidencia) que agradar con tu honestidad, que no tienes.
Y te recuerdo que la especulación inmobiliaria también se dió en el gobierno de Zapatero, sí el que negó la crisis.
Una mentira repetida un millón de veces NO LA CONVIERTE EN VERDAD.
El artículo es fantástico pero le falta ahondar en el análisis de la inercia que mantiene el PGOU de 1997.
Ángel Manuel, lleva razón. No en vano, la corrupción en España era casi exclusivamente urbanística. Los políticos de todos los partidos se dedicaron a especular con el patrimonio de todos los españoles en beneficio propio. La Ley del Suelo de Aznar era un obstáculo para el trapicheo y la corrupción. De ahí la rapidez en recurrir la ley. La norma de Aznar hubiera dejado al libre juego de la oferta u la demanda la determinación de cuántas viviendas construir y su precio. Esto último es difícil de entender para Charles. Él es un privilegiado que conoce el precio de todas las cosas y lo que más nos conviene a cada uno de nosotros. Un enemigo de la libertad, el sujeto.
Esa ley de Aznar y el PP fue el origen de la burbuja en España con la consiguiente crisis. No tires piedras fuera. Está más que demostrado en hemerotecas e investigaciones.
Por cierto, que la Fiscalía ni le nombra en las tramas actuales al Aznar…qué tío más grande. Eso sí, todo parece que pasaba por él, antes de pasar por la X M.Rajoy. Así lo apuntan las investigaciones y las declaraciones…a lo mejor por eso ha fichado por otro bufete más grande.
Ahora,a demás, tiran por tierra lo de su hijo y su mujer por los pisos sociales regalados a los fondos buitre, pero nadie va a la trena.
La división de poderes en España se ha ido cubo de la basura con el PP. Gracias Fiscalía! Gracias José María Aznar!! Gracias M.Rajoy, aunque no sepamos quién eres.
A Aznar entonces sólo le falta ser financiado por dictadores para ser un perfecto demócrata.
De probado nada, la especulación inmobiliaria no fue culpa de Aznar que se esforzó por incrementar una oferta de suelo que no se dió por la derogación de su ley del suelo.
Una mentira repetida un millón de veces no la convierte en verdad.
Tú estás mal, Hobbes. ¿Cómo puede ser una ley que nunca se aplicó porque fue anulada por el Tribunal Constitucional la responsable de la burbuja inmobiliaria? En fin.
Y por cierto, antes no lo dije, pero está muy bien el artículo de don Rivero. Hasta he entendido lo que ha escrito.
¿A cuento de qué tanta tinta contra este plan que no hace otra cosa sino recoger actuaciones que venís pidiendo desde hace mucho tiempo? Y, siendo así, ¿no será que vuestra insistencia puede ser responsable de haber influido en que se tomen precisamente esas actuaciones?
Mi comentario es idéntico para los tres. Que cada cual saque sus conclusiones.
2025 una fecha muy incierta, si entra otra vez el partido de turno nada de ese plan se va cumplir.
Todo para seguir votandoles, ladrones!!!!!