Castilla-La Mancha va a iniciar el diseño de un Plan de Optimización de Uso de los Antimicrobianos propio, adaptado a la realidad de la Comunidad Autónoma, a su perfil de prescripción y a su propio perfil de resistencias antibióticas, asegurando una plena implantación entre todos los profesionales y los centros en los que desarrollan su actividad.
Así lo ha asegurado hoy la directora gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, Regina Leal, durante la inauguración de una Jornada sobre el Programa de Optimización de Antibioticoterapia (PROA) en Castilla-La Mancha, un encuentro que, según ha dicho, pretende ser el “pistoletazo de salida” para la creación de grupos de trabajo y puesta en marcha de este plan regional para el uso óptimo de los antibióticos.
Leal ha señalado que desde su descubrimiento, los antibióticos han supuesto uno de los mayores avances de la medicina y la sociedad, no sólo por su capacidad para tratar y resolver enfermedades infecciosas, sino también por su utilidad en la prevención de infecciones asociadas a procedimientos clínicos relacionados con una elevada probabilidad de aparición de infecciones como son los trasplantes de órganos, las intervenciones quirúrgicas o la aplicación de material protésico.
Sin embargo, ha dicho, con su uso y el paso del tiempo “los antibióticos han perdido una gran parte de su eficacia debido al problema de la resistencia a antibióticos que implica que en ocasiones han dejado de ser efectivos porque los microorganismos a que van dirigidos han sido capaces de generar ‘defensas’ contra ellos”.
Otro problema añadido, ha comentado, es que el ritmo al que las bacterias se hacen resistentes a los antibióticos que se utilizan habitualmente supera con creces al desarrollo y comercialización de nuevos antibióticos “que parece haberse estancado desde hace años”.
“Estamos ante un gran problema sanitario a resolver, reconocido por la propia Organización Mundial de la Salud, que afecta a hospitales de todo el mundo y que complica nuestra capacidad para tratar infecciones”, ha señalado Leal, quien ha apostado por implementar estrategias dirigidas a paliar este problema.
Concienciar y formar cultura del buen uso de los antibióticos
Conscientes de esta necesidad, Castilla-La Mancha quiere definir e implementar una serie de medidas enmarcadas en un Programa de Optimización de Uso de Antibióticos (PROA) de ámbito regional, en colaboración y en el marco del Plan Nacional, que ayuden a paliar este problema de carácter mundial, a concienciar y formar cultura sobre el buen uso de los antibióticos tanto a profesionales como a usuarios, al mismo tiempo que se minimiza el riesgo de inducir resistencias a los antibióticos.
“Queremos que el Programa abarque las prácticas en los Hospitales pero también el ámbito de la Atención Primaria donde se prescriben el 90 por ciento de los antibióticos que tomamos y trate temas como la prescripción, la duración de los tratamientos y la elección adecuada de antibióticos para cada patología infecciosa”, ha remarcado Leal.
La directora gerente del SESCAM ha asegurado que esta cuestión es clave para el sistema sanitario público regional, por lo que ha comprometido todo el apoyo institucional para involucrar a profesionales de todos los ámbitos asistenciales y de todas las especialidades implicadas, como Farmacia, Medicina de Familia, Medicina Preventiva, Medicina Interna, cirujanos, microbiólogos, anestesistas o intensivistas, entre otros.
Leal ha recordado que actualmente, en Castilla-La Mancha, son muchos los profesionales implicados y muchos centros con experiencias de este tipo, que están resultando bastante exitosas, como es el caso del Grupo PROA del Área Integra Mancha Centro, el primero en Castilla-La Mancha en obtener el certificado ENAC por la implantación de un sistema de gestión de calidad según la norma ISO 9001:2008.
También existen grupos de este tipo en los hospitales de Albacete, Ciudad Real, Toledo y Guadalajara. A este respecto, ha indicado que los grupos de trabajo de profesionales y expertos serán los que doten al PROA de Castilla-La Mancha de un sistema de información que permita conocer la realidad y “modificarla si fuera conveniente por desvío de los estándares de calidad que se planteen”.