El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha coincidido con el presidente de la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha (CECAM), Ángel Nicolás, en su defensa del agua “como un elemento fundamental para el desarrollo del sector empresarial agroalimentario de la región”, así como en la “protección de las marcas y denominaciones de origen en los acuerdos comerciales que está negociando en estos momentos la Comisión Europea”.
De esta manera, ambos representantes quieren blindar los buenos datos de exportaciones, que han crecido un 16 por ciento en el ámbito de alimentos y bebidas de Castilla-La Mancha en lo que va de legislatura.
El consejero ha valorado el “esfuerzo” de los empresarios particulares que llevan sus productos fuera de España y ha señalado que “el sector de la industria agroalimentaria representa ya el 37 por ciento de las exportaciones de Castilla-La Mancha en los datos del último mes de octubre, que son los últimos datos que se han conocido”. Además, ha añadido, los empresarios del sector agroalimentario han facturado de enero a octubre del año pasado “más de 2.000 millones de euros, en un incremento muy sustancial respecto al mismo mes del año anterior -un 8 por ciento- y que supone un crecimiento de un 16 por ciento desde el inicio de la legislatura”.
El consejero de Agricultura también se ha referido a las ayudas que se han puesto en marcha, desde el inicio de la legislatura para fomentar la unión de las empresas del sector agroalimentario, una convocatoria que ha dados sus frutos con la unión de siete ‘agrupaciones de productores’ en el sector del vino, integraciones comerciales y fusiones que el consejero espera que lleguen a otros sectores y no solo a las cooperativas, sino también a las empresas privadas para que puedan comercializar mejor sus productos y competir mejor en los mercados internacionales.
En otro orden de asuntos, Martínez Arroyo ha asegurado que “el agua debería servir para redistribuir riqueza en nuestro país y para que no se despueble nuestro medio rural, la España de interior”, una reivindicación que debería hacerse todavía más desde Castilla-La Mancha “para que el agua, que ha salido muchas veces de esta tierra hacia otros territorios, no se lleve consigo a la gente”, ha recordado.
Nueva convocatoria de ayudas FOCAL
El consejero de Agricultura ha anunciado 60 millones de euros más en 2018 para una nueva convocatoria de ayudas FOCAL para las inversiones de la industria agroalimentaria de Castilla-La Mancha. Una nueva inyección económica que sumada a las dos anteriores convocatorias, puestas en marcha por el Gobierno regional, suponen una inversión total de 180 millones de euros de ayuda pública en la legislatura.
CECAM pide agua
Por su parte, el presidente de CECAM, Ángel Nicolás, ha recogido el guante del consejero para crear una sección específica de industria agroalimentaria dentro de su organización, para que haya una interlocución directa, como ocurre con la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB) dentro de la CEOE y ha asumido el compromiso de nombrar a un representante en 2018.
Nicolás ha hecho hincapié en que de las veinte empresas más importantes de Castilla-La Mancha, once son del sector agroalimentario y, por tanto, se ha mostrado crítico con la política actual de agua porque “no puede ser que el agua del Trasvase tenga más agua que el propio cauce del río Tajo”. Así, ha aclarado que “si aquí no nos hiciera falta el agua, nadie se quejaría, pero esta es una tierra seca”.
