Más de una treintena de voluntarios de Protección Civil de diferentes agrupaciones de Castilla-La Mancha se han formado sobre riesgo eléctrico en un curso que se ha desarrollado en la Escuela de Protección Ciudadana, organismo dependiente del Gobierno regional.
Este curso se ha impartido gracias al convenio de colaboración firmado entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y la compañía eléctrica Iberdrola, que, entre otros asuntos, incluye la formación especializada para grupos de emergencias de la región, así como protocolos de comunicación específicos con el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias (SACUE) 1-1-2.
A la inauguración del curso, que se ha desarrollado en las instalaciones de la Escuela de Protección Ciudadana y ha sido impartido por docentes de la compañía eléctrica, ha asistido el director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig.
El objetivo del curso es concienciar a los voluntarios del riesgo que supone la electricidad, que está presente en una buena parte de las actividades humanas y que es la causante de numerosos incendios, explosiones y accidentes laborales.
El riesgo eléctrico, la prevención y protección frente al riesgo eléctrico, las instalaciones eléctricas, las técnicas y procedimientos de trabajo y la actuación a seguir en caso de accidente eléctrico son los contenidos de esta acción formativa para los voluntarios de Protección Civil.
En la apertura de la jornada el director general de Protección Ciudadana ha subrayado la voluntad de formarse de los voluntarios de Protección Civil, ya que son el segundo grupo tanto en número de alumnos como de cursos en la Escuela de Protección Ciudadana. Esto supone que tres de cada diez alumnos de la Escuela desde julio de 2015 hayan sido voluntarios de Protección Civil.
En el curso sobre riesgo eléctrico se han formado voluntarios de las agrupaciones albaceteñas de Albacete, Almansa y Villamalea; la guadalajareña de Alovera y las ciudadrealeñas de Argamasilla de Alba, La Solana, Valdepeñas y Villarubia de los Ojos.
El resto de voluntarios eran de las agrupaciones toledanas de Bargas, Dosbarrios, Esquivias, Huecas, La Guardia, Las Ventas de Retamosa, Lillo, Mora, Navahermosa, Numancia de la Sagra, Pantoja, Quintanar de la Orden, Santa Cruz de la Zarza, Tembleque, Toledo, Valmojado y Villafranca de los Caballeros.