El Gobierno de Castilla-La Mancha ha retomado el programa de educación ambiental del Centro de Estudios de Rapaces Ibéricas (CERI), ubicado en la localidad toledana de Sevilleja de la Jara, dentro del compromiso emprendido durante esta legislatura de reactivar y fomentar las actuaciones de educación ambiental en la Comunidad Autónoma. Para ello, se ha procedido a la contratación de monitores de la Fundación Aquila, especializados en el mundo de las rapaces, y con una larga experiencia en su manejo.
En estas instalaciones se dispone de un Centro de Interpretación Ambiental desde el que se desarrollan programas tanto para el público escolar, en sus diferentes niveles, como para el público en general, cuyo objetivo es profundizar en el conocimiento de las rapaces y concienciar sobre la problemática de estas aves y la necesidad de su conservación.
En este sentido, durante este mes de diciembre el centro estará abierto a las visitas de asociaciones, grupos organizados y particulares, hoy y mañana y los días 16, 26 y 29. Será a partir de enero y hasta mayo, cuando los centros docentes podrán desarrollar esta actividad de sensibilización medio ambiental con los alumnos de Primaria y Secundaria, los martes y jueves; mientras que los particulares y grupos organizados, podrán hacerlo los sábados.
Todos los interesados deberán reservar la visita con antelación a través del teléfono 925 455156 o mediante un correo electrónico a educacion.ambiental.ceri@jccm.es.
Las actividades incluyen un recorrido interpretativo por la exposición permanente interactiva del centro, y una visita a los voladeros de ejemplares irrecuperables, donde los asistentes podrán observar directamente a las aves y disfrutar de una experiencia más cercana con algunas de las especies más emblemáticas de la fauna castellano-manchega.
El Centro de Estudios de Rapaces Ibéricas, especializado en la recuperación y cría en cautividad de rapaces, es el más antiguo de España y pionero en la región en la realización de actividades de educación ambiental relacionadas con la conservación de las aves y sus hábitats.
Además, en sus instalaciones, se desarrollan trabajos de investigación y rehabilitación de especies que, una vez tratadas, forman parte de un programa específico para su reintroducción en el medio natural y su posterior seguimiento para comprobar su readaptación al mismo.