La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha desestimado el recurso de apelación formulado por la Plataforma de Afectados por la Legionela de Manzanares contra el auto dictado el 13 de julio de 2017 por el Juzgado de Instrucción número 2 de esta localidad, que se confirma así íntegramente. La Audiencia ratifica de este modo el sobreseimiento de las actuaciones emprendidas a instancias de los familiares afectados para esclarecer las circunstancias y posibles responsabilidades del brote de legionela que afectó a 277 personas, cuatro de ellas fallecidas, en diciembre de 2015.
Según ha señalado la plataforma en un comunicado, el auto de la Audiencia, de 27 de octubre, considera que las diligencias investigadoras que se solicitan «son improcedentes a la vista de la actividad instructora realizada, en especial los informes de la Consejería de Sanidad y de la Universidad de Valencia que determinan la imposibilidad de secuenciar la totalidad de la composición genética de las cepas individuales y el verdadero foco causante del contagio».
Consecuentemente, la plataforma, «ante la imposibilidad de poder determinar el origen de este brote», y al no tener oportunidad de recurrir este auto, ha dado las gracias «a todas las personas que han colaborado para intentar saber la verdad de lo ocurrido, y por supuesto a todos los afectados que se pusieron en contacto con la plataforma y a los familiares de los fallecidos, que proporcionaron toda la documentación necesaria».
La plataforma espera que «todo este trabajo haya servido para que tanto empresas como ayuntamientos hayan puesto todos los medios a su alcance para que esto no vuelva a ocurrir» y confía en que «tanto los familiares de los fallecidos, como los afectados ya recuperados y los que aún siguen teniendo secuelas, se sientan orgullosos de que todo esto no haya sido en balde”.
En todo caso el colectivo insiste en que los afectados y las víctimas «no se sienten reparadas». En este sentido subraya que «por supuesto en algún punto de este trágico suceso hubo una negligencia, y las consecuencias como siempre las pagan los más débiles». «Nos quedamos con ese malestar y esa profunda tristeza; lo que sí tenemos claro es que nuestros familiares fueron víctimas inocentes de alguna negligencia por parte de no sabemos qué o quiénes, y que nos hemos sentido abandonados y casi culpables de la situación, solo pedíamos verdad», asevera en la nota.
«La seguridad de la población se puso en peligro y esto debe ser una cuestión de primer orden para quienes corresponda», concluye.
La rápida intervención de la Dirección General de Salud, junto con la activación inmediata de los servicios asistenciales del área, permitieron minimizar los efectos de la enfermedad e interrumpir la transmisión de la enfermedad en el menor tiempo posible.
Sobreseimiento y archivo de la causa…..
Confiemos en que , en un futuro cercano, logremos saber con certeza cuál fue el origen…..
En pleno siglo veintiuno no son capaces de averiguar cuál fue el origen del brote. Eso sí, toda la red de agua potable tuvo que ser clorada.