Luis Mario Sobrino Simal.- El doctor José Miguel Parra, escritor, especialista en el Reino Antiguo y componente del equipo del Proyecto Djehuty que excava en Luxor, impartía este jueves en el claustro del Convento de los Mercedarios la conferencia “La vida amorosa en el Antiguo Egipto”. Se trata, comentaba, de un aspecto conocido de la cultura egipcia aunque, en lo que a la cama se refiere, “las cosas no eran tan diferentes hace 5.000 años”.
El uso de afrodisíacos y anticonceptivos o de hechizos amorosos era habitual, aunque no es fácil encontrar referencias más allá de los poemas amorosos. Al contrario que a los romanos, por ejemplo, explica Parra, no les gustaba representar físicamente el sexo. De modo que en el arte “oficial” no hay ningún tipo de representación sexual o pornográfica. Para encontrarla hay que recurrir a otro tipo de documentos, obras de algún escriba o pintor “aburrido” que quisiera hacer algo divertido en su tiempo libre a través de ostracas o textos.
Entre los documentos más destacados al respecto, se refiere al gran papiro erótico de Turín, “que no se sabe si es erótico, una cosa simbólica, o si tiene algún significado más allá de lo que se ve, porque un tercio de papiro muestra escenas de animales realizando actividades humanas, como si se tratara de una fábula”.
Una interesante conferencia.
Por cierto, el primer consolador de la historia se le atribuye a esta civilización, y se fabricó con restos del pene de un cachalote…..
Y la Iglesia permitía todas estas guarrerias?