El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha revalidado su lealtad con las instituciones del Estado y el Gobierno de España ante la situación política de Cataluña, aunque al mismo tiempo ha reclamado firmeza y tacto, a la hora de abordar el conflicto.
Así lo ha subrayado el jefe del Ejecutivo castellano-manchego durante su intervención en el Debate sobre el Estado de la Región que se celebra hasta este jueves en las Cortes regionales.
Tal y como ha explicado García-Page, su lealtad hacia las Administraciones públicas y el orden constitucional es tal, que incluso “me lleva al punto de callarme las cosas que no comparto, sin explicar ni hacer preguntas o reprobaciones antes de tiempo”.
El presidente regional ha defendido la necesidad de adoptar tres ritmos diferentes para abordar en un primer término la situación actual, analizar los motivos que la han motivado, contando con la propia Constitución Española y, finalmente, recomponer emocionalmente los lazos con los ciudadanos de Cataluña.
Del mismo modo, “la situación de urgencia” política actual “es tan importante, que nos obliga a ser firmes y claros pero al mismo tiempo prudentes”, ha defendido García-Page y a usar “la mano izquierda”.
Asimismo, ha rechazado con claridad los posicionamientos del llamado “derecho a decidir” que “se arrogan” desde algunos lugares del país, ya que, tal y como ha explicado el presidente castellano-manchego, “la soberanía es nacional e indivisible”.
El jefe del Ejecutivo autonómico ha avanzado el condicionamiento de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha a la situación política actual en España y Cataluña, aunque ha adelantado que se seguirá trabajando en la misma.
El presidente regional ha asegurado sentirse “muy orgulloso de ser español” y ha valorado el período democrático como el mayor tiempo “de paz y modernidad” de nuestra historia, caracterizado además por “protagonizarlo entre todos”.
Por ello, ha lamentado la actitud de aquellas instituciones catalanas como el Govern o el Parlament de Cataluña que, a pesar de tener su origen en la propia Constitución de 1978 y son hijas de ésta, quieren atacarla.
Reforma del Estatuto de Autonomía
García-Page ha avanzado el condicionamiento de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha a la situación política actual en España y Cataluña, aunque ha adelantado que se seguirá trabajando en la misma.
En este sentido ha matizado que, a pesar de la actual situación de emergencia nacional, no se pueden “descuidar y obviar los problemas que tenemos planteados”, entre ellos los relacionados con los recursos hídricos de la región y ante las últimas derivaciones realizadas hacia el Levante español.