El Encuentro Nacional de Encajeras de Puertollano ha servido como marco idóneo en el que reivindicar la necesidad de salvaguardar la blonda manchega hecha con mano de mujer y en el que el Paseo de El Bosque se ha convertido en una fiesta de los sentidos, habilidad, paciencia, serenidad y ganas de disfrutar con un trabajo hecho con cuidado y cariño.
Un encuentro en el que han participado encajeras procedentes de Andalucía, Cataluña, Extremadura y Castilla-La Mancha, de puntos tan diversos como Aguadulce (Almería), Badalona (Barcelona), Cabeza del Buey (Badajoz), Cerro Muriano (Córdoba), Cabeza del Buey (Badajoz), Linares (Jaén) y Madrid.
Entre los cuatrocientos participantes se encontraban Adrián y Henkry de seis y diez años, de la localidad cordobesa de Cerro Muriano, que desde hace tan solo un año se han tomando como una verdadera aventura y reto conocer los entresijos del proceso de elaboración de un encaje.
La alcaldesa, Mayte Fernández, junto a las concejalas de cultura y participación ciudadana, Ana Belén Mazarro y Ana Muñoz, han hecho un recorrido por todos los grupos participantes con los que han compartido sus experiencias y su forma de hacer encaje.
Mayte Fernández reconoció que es una actividad que desde su inicio en 1998 cada vez cobra más importancia y permita que estas mujeres puedan mostrar su trabajo a los ciudadanos a la vez que sirve para conservar una tradición tan arraigada en nuestra tierra.
La alcaldesa subrayó los buenos efectos que tiene en todos los ámbitos la práctica del encaje de bolillos, para la convivencia, compartir en el día a día, la memoria, las habilidades físicas, psicomotricidad.“Es una actividad redonda que nos ayuda a guardar las tradiciones y a la vez a la dinamización social, de colaboración y que compartan la vida con otras señoras”.
Para Mayte Fernández este encuentro sirve para exponer el trabajo que realizan numerosos colectivos que aglutinan a seiscientas mujeres en Puertollano e invitó a que se unan a estas asociaciones, centros de mayores y Universidad Popular a aquellas mujeres que tengan interés por conocer más a fondo el encaje.
Gran presencia de encajeras de Puertollano y la provincia
Mayor ha sido la presencia de encajeras de la provincia de municipios como Abenójar, Alcázar de San Juan, Alcolea de Calatrava, Almagro, Almodóvar del Campo, Cabezarrubias del Puerto, Corral de Calatrava, Ciudad Real, Manzanares, Membrilla, San Lorenzo de Calatrava, Solana del Pino y Torralba de Calatrava.
Una artesanía que también se consolida en Puertollano y sobre todo si tiene en cuenta la amplia presencia de mujeres que practican los bolillos en esta ciudad a través de grupos como Guadalupe, Santa Ana, Constitución, Encajeras Puertollano, Universidad Popular-Centro de Mayores y Centro Sur.
Una jornada más propia ya del otoño en la que no ha faltado la música en directo de Arte y Compás, el intercambio de regalos entre los grupos asistentes, una comida de hermandad y visita al Museo de la Minería para que conocieran a fondo la importancia que el sector minero ha tenido para esta comarca.
El encuentro se ha complementado con casi una veintena de puntos de venta de productos relacionados del encaje procedentes de Madrid, La Coruña, Almagro, Cáceres, Ciudad Real, Castellón, Valencia, Granada, Tomelloso, Málaga, Tarragona y Toledo, distribuidos por el Paseo de El Bosque.
Una actividad que no hubiera sido posible sin la activa colaboración de las asociaciones Santa Agueda y El Timón, que se han encargado de “guiar” a las asistentes al lugar que debían ocupar en esta muestra, así como los voluntarios de Protección Civil y trabajadores municipales de la Brigada Polivalente.
Hambre y circo para el pueblo.
En estas gilipolleces están l@s inept@s del ayuntamiento