El presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero, ha anunciado hoy que la institución provincial ha apostado, una vez más, por reforzar el programa “Salva un corazón, salva una vida” con la adquisición de 48 nuevos desfibriladores y módulos de rescate cardíaco, de los que 36 serán instalados en municipios de la provincia, con una inversión que asciende a 82.600 euros.
La iniciativa se hace extensiva mediante la presente convocatoria, que será publicada mañana 7 de septiembre en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), a la propia institución provinciales en cuyas dependencias y edificios serán instalados cinco desfibriladores y módulos de rescate cardíaco, y a siete organizaciones humanitarias, asociaciones de carácter social y entidades públicas que presten servicios a la ciudadanía.
Caballero ha mostrado su satisfacción porque en un gran número de localidades de la provincia están disponibles desfibriladores que pueden ser usados en cualquier momento y circunstancia, con el objetivo de responder en el menor tiempo posible en caso de muerte súbita o de fibrilación ventricular. De ahí que muchos de ellos hayan sido ubicados en lugares frecuentados por deportistas o donde se registra una mayor afluencia de personas.
Sobre todo porque nadie está exento de sufrir alguna dolencia cardio-respiratoria, ya que los datos estadísticos apuntan a que en España se producen 24.500 paros cardíacos fuera del ámbito hospitalario. Es decir, uno cada 20 minutos.
Ha comentado, además, la importancia de que las unidades, las ya instaladas y las que próximamente se habilitarán que suman todas ellas 179, sean utilizadas por personal debidamente formado, de ahí que en esta ocasión la convocatoria de la Diputación contemple un Plan de Formación para 290 alumnos. Y ha resaltado, en este sentido, la extraordinaria y abultada red de voluntarios que están capacitados en todos los rincones del territorio provincial para poder utilizar desfibriladores y módulos de rescate cardíacos en caso de emergencia. Siempre con la finalidad, según ha explicado el presidente de la Corporación provincial, de contribuir a la seguridad de los ciudadanos con una mejor y más rápida atención a quienes desgraciadamente sufran un paro cardíaco o un infarto.
La ampliación del programa “Salva un corazón, salva una vida” simboliza también la decidida apuesta que viene haciendo la Diputación de Ciudad Real por el mundo rural y por incrementar la seguridad y la calidad de vida de las personas que viven en nuestros pueblos.
