El matrimonio de origen gallego formado por Ángel Padrón Fernández y Teresa Fernández Castro ha sido este primer domingo de septiembre el protagonista del homenaje que cada año brinda el Consistorio de Argamasilla de Calatrava a los vecinos de más edad en el marco de la tradicional Semana del Abuelo que estos días se está celebrando.
La particularidad del entrañable acto, que volvió a concitar la presencia de cientos de personas en el Centro Cultural, fue su trascendencia regional dada la asistencia de la titular de la Consejería de Bienestar Social de Castilla-La Mancha. Aurelia Sánchez y la delegada provincial del Ejecutivo autonómico, Carmen Teresa Olmedo, compartieron el evento con la alcaldesa Jacinta Monroy y el concejal Sergio Gijón, asistiendo también otros miembros de la Corporación municipal y los integrantes del Consejo de Mayores.
Además, en el transcurso de esta cita que suma ya catorce años, se entregaron otras placas de reconocimiento. Por un lado, a la empresa Tunstall Televida que se encarga de la gestión del servicio de Teleasistencia Domiciliaria de Castilla-La Mancha y que solo en la población rabanera atiende en 150 domicilios a 184 usuarios, de los cuales una gran mayoría son mujeres. Y por otro, a las 22 auxiliares del servicio de Ayuda a Domicilio en Argamasilla de Calatrava, junto a su coordinadora y a su directora, Silvia Sánchez Escobar y Cristina Jiménez Sánchez, respectivamente.
Monroy Torrico, que en los prolegómenos al acto recordaba que la Junta de Comunidades invierte en la población más de 300.000 euros cada año en materia de mayores, mostrando por ello su gratitud, fue la encargada de dirigirse en primer lugar a los presentes con unas sentidas palabras de gratitud para con todas estas personas.
“Sois lo que llamamos ‘personas hogar’, sois nuestro refugio y nuestro impulso para seguir adelante, sois figuras de acero inolvidable, sí, inolvidable por resistís a todo, personas únicas e irremplazables”, aseveró con gran sensibilidad para añadir que “vuestra presencia supone siempre un aluvión de sabiduría aderezada con mucha ternura, supone volver al rincón de los abrazos y de los consejos”.
Dar vida a los años, no años a la vida
En su ideal de que “hay que darle vida a los años y no años a la vida”, la alcaldesa recordó el afán de su equipo de Gobierno por hacer del envejecimiento “una oportunidad de seguir aprendiendo y dedicarse tiempo a uno mismo y, por qué no, a los demás”. De ahí que, añadió, “nuestro reto es hacer mejorar las oportunidades de envejecer activamente y promover el modelo de calidad de vida autónoma e independiente, actuando en ámbitos tan diversos como los servicios sociales, la formación de personas adultas, el voluntariado, la vivienda, las nuevas tecnologías e, incluso, el ocio”.
Un ejemplo más que palpable estos días es la XIV Semana del Abuelo que viene desarrollando la Concejalía de Bienestar Social desde el pasado 1 de septiembre hasta mañana martes día 5, en la que habrá una jornada de hermandad entre los usuarios del Servicio de Estancias Diurnas, el Consejo de Mayores y los trabajadores del Centro. Hasta entonces se habrá podido disfrutar, entre otras destacables actividades, de catas guiadas de productos típicos de la tierra, de la visita al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, etcétera.
Todo un referente de buen hacer desde el ámbito municipal también para las políticas destinadas a mayores en la comunidad autónoma según apuntó, y agradeció, la consejera. Y es que el marco de ayer tarde en Argamasilla de Calatrava fue el elegido por Aurelia Sánchez para desvelar el incremento de un 10,84%, unos 28 millones de euros más respecto a 2015, hasta alcanzar los 279,8 millones de euros, en el Presupuesto regional destinado al Programa de Atención a las personas mayores.
Cifras que para Sánchez Navarro “nos permite poder seguir prestando una atención de calidad a las personas mayores”, ofreciendo así “calidad de vida, para que vivan donde quieran vivir, ofreciéndoles las prestaciones que precisen en sus domicilios, si las necesitan”. Y, caso de necesitar residencia o una atención especializada, “el Gobierno regional tiene una red residencial que ocupa el número dos a nivel nacional”, aseguró.
Esta fiesta de mayores, en la que nuevamente pudieron compartir todos los asistentes una estupenda merienda, tuvo por colofón la actuación de los artistas Rosario Mohedano, Carlos Vargas y su cuadro flamenco, acompañados del maestro Monroy del programa ‘A tu Vera’ de CMM y de la violinista Eunice.
Sobre el matrimonio homenajeado
Hace más de 50 años llegó desde Orense el matrimonio formado por Ángel Padrón Fernández (11 de mayo de 1922) y Teresa Fernández Castro (29 de enero de 1923), con cuatro de su cinco hijos, ya que la mayor había emigrado a Alemania en busca de un futuro que allí encontró. De los que vinieron, el mayor tenía 18 años y la menor 8.
Vinieron trasladados por motivos laborales por la empresa Dragados a trabajar en las empresas de la comarca, con sus camiones. Les acompañaba, por cierto, una tía de Teresa, Carolina, la cual permaneció con ellos hasta el final de sus días y su cuerpo descansa en el Cementerio municipal de Argamasilla de Calatrava.
Se afincaron en Puertollano durante dos años, transcurrido este periodo se trasladaron a Argamasilla, estableciendo su domicilio definitivo en la calle Juan de Céspedes 5, buscando con ello paz, tranquilidad y el desarrollo laboral que esta villa podía proporcionarles.
A destacar de ambos que han sido siempre muy trabajadores, luchadores, buenos padres, buenos abuelos y defensores de la unidad familiar. Personas ejemplares dignas de admirar, como así comentan antiguos compañeros, vecinos y personas de su entorno con los que se han relacionado. Tienen hoy día once nietos, quince biznietos y un tataranieto.
Sobre Tunstall Televida
El Consejo de Mayores de Argamasilla de Calatrava destaca la cercanía, profesionalidad, el cariño y el buen trato de los trabajadores de Tunstall Televida a través de las visitas domiciliarias y de los talleres que se organizan en el Centro de Mayores, destacando la importancia del servicio regional de Teleasistencia Domiciliaria para dar seguridad y tranquilidad también a los mayores rabaneros.
Como es sabido, este servicio tiene por finalidad facilitar la permanencia en el domicilio a las personas que se hallen en situación de vulnerabilidad, ya sea por su situación de dependencia, discapacidad, edad o aislamiento social. Proporciona por tanto atención personalizada a los usuarios mediante el uso de tecnologías de la comunicación y de la información, con apoyo de los medios personales necesarios, con respuesta inmediata ante situaciones de emergencia, o de inseguridad, soledad y aislamiento. Se trata de un servicio de atención permanente, las 24 horas del día y todos los días del año, prestado a través de telefonía fija o móvil y atendido por personal específicamente preparado para dar respuesta adecuada a situaciones de emergencia o de necesidad social.
Sobre las auxiliares de Ayuda a Domicilio
Las auxiliares del servicio de Ayuda a Domicilio en Argamasilla de Calatrava que recibieron sus merecidas placas de reconocimiento fueron Mª Josefa Arévalo Jiménez, Sonia Bárcenas Arroyo, Adalgisa Carmona Girón, Mª Sol Cubero Martín, Elisabet Cuerpo Valle, Ángela Fernández San Antonio, Pilar Flox Molina, Adoración García Risco Cabrera, Isabel Gilabert Morales, Josefa Letrado Galván, Raquel Martín Rodríguez, Carmen Medina Almodóvar, Marceliana Palomares Núñez, Laura Pérez Cabanillas, Noemí Poyatos Ríos, Isabel Rabanal Buitrago, Mª Isabel Ruiz Quero, Petra Sanchez Acevedo, Isabel Sánchez Rodríguez, Mercedes Sánchez Sánchez, María Teresa Palomares Núñez y Mª Dolores Viñas Gijón.
Con este reconocimiento se ponía en valor públicamente el trabajo diario de las trabajadoras del servicio, su profesionalidad y cercanía, su trato amable y cercano con el usuario, que día a día hacen que vivan con total dignidad en su casa rodeados de sus conocidos y vecinos, que tanto influye en el bienestar de los mayores y personas dependientes.
El programa de Ayuda a Domicilio tiene por objeto atender las situaciones de dependencia ya sean laborales, económicas, educativas, sanitarias, personales y sociales, que dificulten que la persona o unidad familiar pueda desenvolverse con autonomía en su domicilio y entorno habitual, favoreciendo las condiciones necesarias que hagan posible la permanencia en su medio habitual de convivencia en condiciones adecuadas.
Para ello se proporciona en el domicilio tanto atención personal, como a las necesidades de la vivienda, así como orientación para proporcionar estrategias que permitan a la persona y a la unidad familiar adquirir un mayor nivel de autonomía completando siempre la labor de la unidad familiar.
