Desde hace más de 20 años la Asociación Aldabón acompaña a más de 60 chicos y chicas con diferentes discapacidades en la aventura de viajar, practicar deporte o disfrutar de su tiempo libre. A través de la convocatoria de ayudas sociales, Repsol y la Fundación Repsol se unen a ese acompañamiento.
Para la Asociación de Padres y Madres de Personas con Discapacidad Aldabón de Puertollano contar con la colaboración de Repsol y su Fundación a través de su convocatoria anual de ayudas sociales supone un empujón importante para poder desarrollar y ampliar su programa de actividades.
Enfocado a normalizar el ocio y tiempo libre de las personas con discapacidad, el programa se amplía curso tras curso y este año, gracias a la aportación de Fundación Repsol y el Complejo Industrial de Puertollano, los más de 60 chicos y chicas con diferentes discapacidades que forman parten de Aldabón cuentan con un taller de teatro y de tenis de mesa que incrementa su amplia oferta de ocio.
Dolores Gijón, presidenta de Aldabón, cuenta que desde hace dos décadas “abrimos la sede todas las tardes, desde las cuatro hasta las siete”. Desde sevillanas, gimnasia rítmica, informática, futbolín, a billar, juegos de mesa, escritura, pintura y ahora también, teatro y tenis de mesa, los asociados pueden disfrutar de un ocio normalizado, de unas actividades de tiempo libre que suponen un respiro para ellos y sus familias.
Son chicos que vienen de diferentes ámbitos: del Centro de Día, de la Residencia, del Centro de Educación Especial, de pisos tutelados, e incluso, apunta, Gijón, “personas que están en sus casas”. Todos se juntan en “su sede”, dice la presidenta, “porque ellos tienen claro que ésta es su sede, que aquí tienen plena autonomía” y participan en lo que quieren, en función de su capacidad.
Cada una de las iniciativas que se proponen están enfocadas también con un fin terapéutico. El teatro, sin duda, es una de ellas. Este año, la actriz y directora de teatro, Ana Torres, se ha incorporado a esta gran familia. “Trabajamos – cuenta – la expresión corporal, la voz y la improvisación”. Y cada una de estas áreas cobra sentido según el enfoque que se dé. Según Torres, “empezamos basándonos sobre todo en la expresión corporal porque eso les ayudaba a ellos a relajarse, a expresarse libremente y un poco a perder la vergüenza”. Eso ha hecho que muchos mejoren su expresión verbal, se relajen y fomenten su creatividad, “la mayoría de ellos son muy creativos e imaginativos, tienen un mundo interior muy grande y la relajación sobre todo, les ayuda a soltar todo eso que llevan dentro”, apunta Torres.
Lo fundamental, continúa Dolores Gijón, es que estas personas tengan conciencia de que su tiempo libre es igual al de otras personas, que pueden vivir las mismas experiencias. Por eso, añade, “nos apuntamos a todo lo que se nos propone, organizamos excursiones, campamentos de verano”, fomentando también el que sean ellos quienes decidan qué les apetece hacer con el tiempo que les sobra.
Para Aldabón contar con la colaboración de Repsol y su Fundación es muy importante, “para nosotros es una gran ayuda porque nos abre más posibilidades”, dice la presidenta de la asociación.
Fundación Repsol y el Complejo Industrial de Repsol en Puertollano a través de su convocatoria de ayudas sociales colabora asociaciones del mundo de la discapacidad, como Aldabón.