El misionero de Fernán Caballero Vicente Hondarza Gómez optó por los pobres y pagó un alto precio por ello al ser torturado y asesinado en Perú en 1983.Mucho tiempo hace: me enteré de ello ayer mismo, leyendo Sur y Sal, el boletín misionero mensual que imprime la iglesia católica de Ciudad Real (ya va por los sesenta números). Soy católico, aunque asaz poco practicante y algo oveja perdida (no estoy de acuerdo con todo lo que piensa y hace una parte todavía muy sustancial de la iglesia) y había ido a la misa de difuntos de un pariente; esta publicación me sorprendió: incluso traía un elegante soneto final de Pedro Casaldáliga, uno de los líderes más conocidos de la teología de la liberación, esa que afirma que la maldad puede ser estructural y adoptar formas institucionales económico-políticas.
Otros artículos revelaban el trabajo sin duda difícil pero meritorio y gratificante de la iglesia misionera manchega en zonas de todo el mundo, más deprimidas que las nuestras. Si uno no leyera cosas tan humildes y dispares como esta no se enteraría algunas veces, como ahora, de que existen auténticos héroes, gente buena y admirable, coterránea nuestra, que mejora la situación de quienes han padecido una suerte peor que la nuestra. Y estos héroes son precisamente aquellos que no tienen otra orientación política que impedir que la gente sufra, pierda su dignidad y muera. Por eso quiero romper el silencio para que su ejemplo cunda, hoy que tanto se silencian conductas que no son groseras, vociferantes, hipócritas o meramente económicas.
De humildes orígenes (era hijo de un cartero rural y su madre murió en el parto), Vicente nació un 15 de octubre de 1935 en una familia numerosa y muy cristiana, que cuenta con varias monjas y otro misionero hermano suyo. Lo crio su abuela y a trancas y barrancas (y con un subsidio de la Diputación, al parecer) y aprendió ebanistería. Estudió humanidades y filosofía en el impresionante seminario diocesano de Ciudad Real, uno de los edificios más bonitos de esta ciudad, antes villa, y también estuvo en Burgos preparándose para ser misionero; el 21 de Julio de 1967 es ordenado sacerdote. A finales de este mismo año viajó a Colombia, donde trabajó con el grupo de sacerdotes del IEME hasta febrero de 1973. Se adhirió a los principios emanados del documento de Puebla y de la II Conferencia de Medellín (1968), fundamentales para la teología de la liberación de ese país; allí fundó un «Colegio Cooperativo Agrario» que hoy lleva su nombre, y el 18 de Octubre de 1974 llegó a Perú, para trabajar en la diócesis deHuacho-Cosica, al norte de Lima, siendo nombrado párroco deChancay.
Vicente consagró su vida sacerdotal misionera a servir a jóvenes, campesinos y marginados de la ciudad y pueblos del valle de Chancay y su sierra cercana, más allá de Huaral, donde quería establecer un Centro de Capacitación y Formación para toda la región, pues su principal tarea fue enseñar. Ya había elegido Acos como lugar idóneo. Y para trabajar en ese proyecto subió la víspera de su muerte (14 de junio de 1983) camino de Lampián para celebrar una festividad y reunirse con los campesinos. Y, como he dicho, fue torturado y asesinado por desconocidos, y el cónsul de España pidió una investigación.
La derecha del lugar lo catalogó como «agitador» y de estar instigando a los campesinos de Huari para que invadan terrenos de Lumbra; eso firmó su sentencia de muerte. El martirio tuvo lugar entrada la noche y secretamente, a las afueras del pueblo, sin derecho a defenderse, por un escuadrón de la muerte unas horas después de haber celebrado la eucaristía en la fiesta patronal de San Antonio en Lampián. Tras la tortura, le volaron la cabeza. Hubo obstrucción a la justicia y se impidió realizar una investigación adecuada, por lo que a día de hoy se ignoran quienes fueron los asesinos, aunque se sospecha de caciques terratenientes como instigadores del crimen.
Una modesta investigación mía por Internet refleja que «pasó haciendo el bien» (Hechos, X, 38), y así la gente sencilla que lo conoció se deshace en elogios y cálidos testimonios sobre su figura, de los que solo entresaco este:
No era un sacerdote que predicaba la palabra de Dios a su manera, sino que Vicente predicaba como lo hacía Jesús, siguiendo el camino de Jesús. No tenía ambiciones personales, casi descuidaba su persona por los demás. Vicente ayudó mucho a los pueblos jóvenes en cuanto a su organización, dándoles facilidades; coordinaba con otros organismos que podían ayudar. Lo que más me llamaba la atención es que se confundía con la gente del barrio, campesinos, obreros, niños, madres de familia y jóvenes para ayudar. Formó el centro de Madres del pueblo joven Juan Velasco, el grupo de Juventud Estudiantil Católica, el de Derechos Humanos y otros más. Los amigos le decíamos: Vicente no pongas el dedo en la llaga. Vicente nos contestaba: “lo seguiré poniendo hasta que salga pus, siempre que sea para defender a mis hermanos pobres”. A pesar de las calumnias seguía adelante.
El grupo del IEME (Instituto Español de Misiones Extranjeras) de la diócesis de Huacho-Chosica editó un cedé con el título Tras sus huellasdonde se recuerda su trabajo y testimonio en el seguimiento de Jesucristo. Nuestras bibliotecas harían bien en conseguir algún ejemplar: se conserva el recuerdo de mucha gente que no lo merece, y esta es un motivo de orgullo y ejemplo para todos. ¿Quién no se enorgullecería de quien decía cosas como estas: «Para que cambie la sociedad tiene que haber buenos maestros, buenos abogados y buenos sacerdotes»? Incluso creó un Comité Parroquial de Solidaridad y Derechos Humanos con el nombre, que a alguno sonará por ser el del barrio más desfavorecido de Ciudad Real, de San Martín de Porres.
Sus asesinos no se salieron con la suya: hoy al menos dos colegios llevan su nombre (por cierto que uno privado y con mejores instalaciones tecnológicas que las de mi instituto, ejem) y se le recuerda en Perú con agradecimiento y admiración (ved el vídeo inicial).
Contornos
Ángel Romera
http://diariodelendriago.blogspot.com.es/
[Los comentarios serán moderados por el autor de la sección]
Un merecido homenaje a un sacerdote que se nos ponía de modelo en el Seminario.
Ha habido muchos sacerdotes y religiosos españoles que como él se han dejado el pellejo en las tierras americanas y también africanas por el bien, la Fe y el progreso de sus pueblos. Todos gozan del premio celestial de los justos.
Gracias Don Ángel por traer a la memoria a este hombre, bueno y santo.
Nuestra iglesia diocesana ha dado y da buenos sacerdotes, sensatos, apostólicos y con conciencia social. Recemos por ellos y por sus vocaciones.
Vicente Hondarza, ora pro nobis.
¿No tiene AM plancha o paella que hacer? Gente como él provocó la caída del imperio romano. Bochornoso lo de este tipo. Su cinismo traspasa todos los límites tolerables. Si el homenajeado por Romera es un cura, don Ángel es un héroe; si por el contrario da estopa a los de su cuerda, entonces Romera se transforma en un villano.
Es para hacer lo que dices HAY QUE SER UN IMBÉCIL SECTARIO COMO TÚ.
TERRORISTA DE RED.
El pasado 14 de junio se cumplían 34 años del asesinato del misionero del IEME y sacerdote diocesano de Ciudad Real, D. Vicente Hondarza Gómez, y aún se desconoce a los autores.
Según el testimonio de algunos campesinos de la localidad de Lampián, el sacerdote murió, probablemente, de accidente en una carretera de montaña próxima a Chancay, en el norte de Perú, donde había caído accidentalmente.
La versión oficial no concuerda con los indicios encontrados en su cuerpo y sus ropas.
La verdad es que son muchas las lagunas que presenta su muerte todavía hoy.
Sea como fuere, lo que queda claro es que la identificación con los pobres y marginados que sufren las consecuencias de un sistema injusto y de una sociedad inhumana, no está ni bien vista ni bien interpretada por los ricos y poderosos….
Sendero Luminoso tambien asesinó a religiosos en Perú, vamos a decirlo todo.
Sí, fue un asesinato político ¿qué otra cosa te hace un agujero en la cabeza de quince centímetros? Lo demuestra hasta la evidencia la investigación que cito en uno de los enlaces, esta:
http://lum.cultura.pe/cdi/video/hondarza-vicente
«La derecha del lugar lo catalogó como “agitador” y de estar instigando a los campesinos de Huari para que invadan terrenos de Lumbra; eso firmó su sentencia de muerte».
Volvemos a lo mismo de siempre. Buenos y malos, derecha e izquierda. Usted, una vez más, descontextualiza y manipula la realidad. En Perú, en el Perú de entonces, morían religiosos por la mano de los malos de un bando y del contrario. Siguiendo su razonamiento, los sacerdotes que asesinaba el Partido Comunista del Perú debían estar haciendo algo malo, ayudando al poderoso, al rico. No sé.
Yo sí conocía la historia del misionero Vicente Hondarza Gómez, y pienso que murió por estar en el sitio equivocado en el peor momento. Es decir, por estar donde la gente buena y santa está.
Cito las fuentes, copio palabras textuales, enlazo las informaciones y no interpreto los testimonios: soy en todo verificable, al contrario que usted, por lo cual es usted quien manipula las fuentes. Es un silogismo.
Ya, ya… Claro. Las fuentes. En cualquier caso, no quiero dejar escapar la ocasión y hacer lo que hubiera debido hacer en mi primer comentario: agradecerle sinceramente que se haya tomado la molestia de recordarnos la historia, triste pero ejemplar historia, de don Vicente Hondarza Gómez. Gracias, don Ángel.
Este A.R. es como el burro aquel que se comió los libros pensando que sería inteligente…..y cuando hablaba o escribía solo conseguía eso, rebuznar.
Resulta vergonzoso que hasta un monje de Silos tenga que romper su voto de silencio para rebuznar así:
«Hay demasiada gente pasándolo mal mientras ves la deshonestidad de otros, la falta de responsabilidad con los deberes que uno ha asumido. Es horrible la ligereza con la que aquí se roba y se falta el respeto a la sociedad. Y no sólo sientes una preocupación, sino una indignación. No hay derecho a lo que algunos han hecho. Ni a lo que siguen haciendo.»
«Faltar al respeto», dice el monje de Silos Moisés Salgado. Ni más ni menos lo que usted hace cuando llama a lo que escribo «rebuzno». Dicen que no se me da mal la sátira, pero no le voy a conferir siquiera ese honor.
El enlace a la entrevista con el monje de Silos es este. «Es horrible la ligereza con la que se roba y se falta a la sociedad» Entrevista a Moisés Salgado, El Mundo, 24-VIK-2017 (hoy):
http://www.elmundo.es/opinion/2017/06/24/594d576d468aebf0668b4614.html
Alguna gente prescinde de leer y de citar porque no le importan las voces de los otros, ni asume, prolonga o representa el pensamiento de los demás: sencillamente, no escucha: son tan egoístas que solo se escuchan y se leen a sí mismos. Esos son los verdaderos burros.
Yo con usted no tengo muchos puntos de vista en común, pero usted es un investigador profesional, al que a veces creo que le falta el contexto, que no es simple y no permite definir líneas divisorias entre buenos y malos.
A Vicente le mataron unos criminales de derechas posiblemente. También mataron personas de ultraderecha a Óscar Romero. La verdad histórica es la que es.
La ultra izquierda también ha matado a religiosos. Los mató el Frente Popular en nuestra contienda, y conocida es la persecución religiosa en países socialistas. A Osvaldo Payá, católico militante le mató el régimen de Cuba.
La muerte de Jesús tuvo un sentido también político. Era incómodo para los romanos y escandaloso para los judíos. Para los zelotes un traidor pacifista. La autenticidad cristiana ha de ser molesta para todos los que detentan poder o influencia.
Quién piense que entre los afines no hay golfos y asesinos vive en la ignorancia y no tiene nada que aportar.
Desde el anonimato no se puede argumentar con un insulto. El insulto no es argumento por sí sólo. Es una insolencia a la que se muestra una escandalosa tolerancia. Y no se puede tolerar insultar o descalificar amparándose en el anonimato.
Qué tristeza que cualquier texto de calidad, sea de quien sea, tenga que pasar por el cenagal de esta chusma. La verdad es que es nauseabundo tener que leer ciertas cosas y ciertos trolls.
Al final no va a quedar nadie con ganas de escribir en MCR.
No tenéis algún inframundo ultra donde rebozaros en vuestra inmundicia?
Pobrecito hablador, creo que el troll obseso residente te ha confundido conmigo. Está de atar. Y ya le dije, que conmigo no use lo de terrorista o le apodaré como más le gusta.
Tendrás caradura. Dando lecciones de moral tú precisamente.
La kaleborroka de MCR personificada.
Y el lameculos vergonzoso de cualquiera que pudieras usar contra el contrario.
No te confundí con Miguel, NO SOY COMO TÚ. No tengo tanto odio que me haga caer en la locura como a tí.
Yo puedo ignorarte y ser indiferente… tú no eres capaz de lanzar un comentario sin dirigir tu odio a mí, o a cualquier otro comentarista cabal que no piense como tú.
El texto que copies aparecerá autoios Gracias Dios Todopoderoso por darnos al p. Vicente Hondarza quien me mostro el rostro de Cristo en el hermano necesitado y me enseño que el problema no era los sistemas sino quienes integramos el sistema y a pesar de las calumnias que te condujeron a la tortura y posterior muerte, esta hoy y siempre presente en el amor que nos inculcaste a Cristo y a su santa iglesia.