En estos tiempos de ignorancia y manipulación mediática generalizada, el término “democracia” no es el único que ha sido corrompido, en este caso para hacer creer a la gente en la farsa de los sistemas políticos parlamentarios “representativos”. Otras muchas palabras o ideas son tergiversadas una y otra vez en los medios de propaganda del Régimen, al igual, como no, que la Historia, que ha sido debidamente reescrita en parte, y olvidada por otro lado.
Como todos habréis leído ya “1984” sabréis perfectamente a qué me refiero.
Con el concepto de “izquierda” también han hecho lo mismo.
Hoy en día se oye mucho eso de que lo de “izquierda” y “derecha” es cosa del pasado, que a estas alturas esos términos ya no tienen sentido. Y en realidad es cierto, tan corrompidos están por la manipulación. Y es que, al igual que pasa con la “democracia”, casi todo lo que hoy se toma por “izquierda”, tampoco lo es.
Pero para combatir el lavado de cerebro está el sentido común, así que ahí vamos con ello. Empiezo con la derecha:
La “derecha” es y siempre ha sido ese sector de la sociedad que defiende la desigualdad. Son los que quieren que unos manden y otros obedezcan. Que unos tengan mucho y otros poco -o nada-. Que haya ricos y pobres.
Naturalmente, esa desigualdad se extiende a todos los niveles, no sólo a lo económico: castas, razas, clases sociales, naciones… y con ello, fronteras, patrias y banderas.
La sociedad que defiende la derecha es la del egoísmo como base de la conducta humana: todos compitiendo contra todos (individual y colectivamente) y que gane el que más se lo merezca. La ley del más fuerte.
A lo más “noble” que aspira una parte de la derecha -los “liberales”- es a una mal llamada “libertad” -otro término corrompido-, que ellos entienden como el debilitamiento de los gobiernos, para que estos no puedan recortar los beneficios de los que han tenido éxito en esa competición amoral y despiadada que ellos llaman “civilización”.
Esta posición se justifica de muchas maneras: que no se puede evitar, que el mundo es así, que la gente es egoísta por naturaleza, que siempre ha habido líderes y seguidores, que no hay recursos suficientes para todos, que si se da pan gratis la mayoría no trabajarían porque son unos vagos…
Dogmas y bobadas, pero por desgracia, grabadas a fuego en los cerebros de demasiadas personas.
Por otro lado, la “izquierda” es, obviamente, lo contrario: la izquierda defiende la igualdad.Que no haya unos que manden y otros que obedezcan, que los recursos disponibles se repartan equitativamente, que no haya ricos ni pobres.
Esto es, una sociedad basada en el altruismo, el respeto mutuo, la cooperación, la solidaridad, la justicia… y como para que exista todo eso debe existir también libertad y democracia -las de verdad-, pues libertad y democracia también son izquierda.
En base a ello, podemos posicionar realmente a actores presentes y pasados. Por ejemplo, al contrario de lo que predica el dogma oficial, el gobierno soviético “comunista” queda identificado, sin lugar a la duda, con la derecha. ¿Y el actual de Venezuela? Derecha. ¿Cuba? Derecha. ¿USA? Derecha. ¿España? Derecha. Etc.
En todos esos países hay unos pocos que mandan y un pueblo que obedece. En todos hay pobres y ricos. En todos gobierna la derecha.
Y con los partidos políticos lo mismo:
¿Qué partido hoy en día funciona sin jerarquías, sin líderes y seguidores?
¿Cuál defiende un gobierno del pueblo, esto es, con asambleas y referéndum, con ciudadanos -todos iguales- elegidos por sorteo, ejerciendo los cargos de forma temporal y rotatoria?
Todos los partidos políticos son de derechas (me refiero, como siempre, a los que cuentan, esto es, los que salen por la tele).
Y sus líderes, lo mismo. Por ejemplo, Iglesias el Gran Líder Supremo, ¿izquierda? Venga ya.
Y así, al contrario, una vez más, de lo que predica el dogma oficial, hoy nos encontramos con que la izquierda es una reducidísima minoría, en España, y en prácticamente todo el mundo.
Una minoría además invisible, porque está ausente de la televisión y de los parlamentos, herramientas ambas del Poder establecido, de los más ricos, de los triunfadores en la competición de la ley del más fuerte, del capitalismo, del neoliberalismo, esto es, de la derecha.
Izquierda y Derecha. Conceptos tan válidos hoy como en el pasado, fundamentales para ayudarnos a entender la sociedad que nos rodea.
Siempre y cuando uno rechace el dogma oficial y use la cabeza.
Gonzalo Plaza
Ciudadano en blanco
¿Partidos sin dogma oficial? Ya sabes que eso no va a pasar, y menos en España, donde ser de PP o PSOE es norma de FE. Como ser culé o merengue, o aún más del Aletiiii de mi vida.
Las entrevistas a Macrón de esta semana son muy significativas de por dónde va ahora la política espectáculo de: tío/tía buenorr@, que vomita dosis de buenismo/demagogia, que se caga en sus ancestros y que lo va a hacer él solito/ella solita todo porque los partidos están acabados.
Vamos, política de TV, de Tuiter y poco más.
Ser de derechas teniendo pasta es muy fácil, de hecho para los del Ibex 35 ser liberales es algo fantástico. El problema es que nos lo quieren aplicar a todos los demás, que no seríamos nada sin una sanidad, educación o políticas sociales públicas.
Ser de izquierdas es jodido, porque está muy mal visto en cuanto sales de un barrio obrero ¿Tu eres empresario y de izquierdas? ¡Anda ya!!, tu eres funcionario grupo A y de izquierdas? ¡Anda ya!! No les cuadra a los mileuristas estos que defienden la privatización del estado, pero que no se dan cuenta de que pueden seguir viviendo «malamente» a costa de los servicios públicos (de ejemplo los trolls de MCR, porque se ve perfectamente que ninguno de ellos cotiza en el Ibex 35).
De la misma manera que veo una idiotez no ser de izquierdas si ganas menos de un millón de euros al año, me parece una sandéz defender postulados liberales con 2000 euros limpios de nómina. Y eso va unido a la ideología. Ser liberal o conservador cuando tu vida depende del equipamento que tenga un hospital, es del género tonto. Como defender las donaciones de Amancio Ortega ¿Sabéis que de los 320 millones se quita el amigo 120 por la donación? ¿Sabéis que ese dinero va a servir para que los gobierno autonómicos puedan recortar el presupuesto el año que viene? ¿Sabéis que en esas donaciones no hay presupuesto para el mantenimiento y funcionamiento de esos aparatos? Y, sin embargo, los liberales mileuristas insultan como perros rabiosos a quien cree que esas donaciones están envenenadas.
Pues todo esto forma parte del ser o no de izquierdas.
Y yo quiero ser de izquierdas ¿De las cuálas? Pues aún no lo sé y ya pinto canas hace años. Pero me queda claro que de las de ahora, cada vez menos. Eso sí, hay algo invariable: de derechas o liberal, NUNCA. Al menos hasta que gane un millón de euros al mes (soy como Groucho, tengo unos principios, pero puedo moverlos por un millón anual…cosa que, evidentemente no va a pasar…así es que, de izquierdas…en genérico).
En realidad no hay tantas izquierdas donde elegir, Hobbes. En los partidos políticos no existen, para empezar.
Pero vamos, haberlos, haylos. Algunos existimos. Pero somos muy pocos.
Y es que no es fácil ser de izquierdas.
Para ser de izquierdas, tienes que defender la igualdad, la libertad, la democracia… tienes que asumir tu responsabilidad como ciudadano político y miembro de la sociedad… lo que implica, por supuesto, no votar…
Para empezar.
Y si tienes tiempo para algo más, pues no tienes más que decirlo. Yo te guío, si quieres. 😉
Me gustaría creer que la política es cuestión cualitativa y de ideas, pero, como bien sabéis, es solo cuestión cuantitativa y de número. Lo demostraré.
Si «robas» una gallina valorable en cincuenta euros (hay gallinas muy cotizadas), te condenan a dos años de prisión en compañía de amorosos contertulios con derecho a vis a vis, con gastos de mantenimiento pagados y permisos de fin de semana.
Si «levantas bienes» en Suiza o Panamá o cometes «apropiación indebida» por una cantidad de seis millones de euros, te invitan a dar conferencias en Estados Unidos y te hacen columnista de «La Razón».
Si pitufeas cien millones de euros en contratos corruptos de la contabilidad de un partido político, solo te obligan a hacer un cursillo de perfeccionamiento en la Fundación de Estudios de Soto del Real con vacaciones de semana blanca en Baqueira Beret, para esquiar.
Si robas 1.000 millones de euros con el timo del aeropuerto, te nombran presidente autonómico y te subes el sueldo.
Si estafas 23.344.000.000 de euros de rescate bancario (ni siquiera de pesetas viejas), te invitan a presidir el gobierno de España.
«Política», desde su origen, hace referencia a los asuntos públicos, los de todos los ciudadanos.
Pero cuando los ciudadanos abandonan su responsabilidad hacia los temas públicos, esto es, cuando dejan de lado la política («idiotas» los llamaban los atenienses), cuando dejan la política en manos de embaucadores profesionales, pues pasa todo eso.
Lo cual no quiere decir que la política sea cuestión de números, Ángel. Sólo has mostrado una de las consecuencias de que la inmensa mayoría de la ciudadanía sean «idiotas».
Esto es, que voten.
Te lo definiré yo muy resumido y generalizando necesariamente: la derecha en España representa a la mayoría de las clases acomodadas, parte de las clases medias y casi todas las altas(te olvidas que la mitad de España es de derechas) y personas de creencias religiosas e hijos que han heredado esa ideología aunque sean gente modesta, que conozco muchos.Sus representantes políticos son chulescos, autoritarios y compadrean con los poderosos, amén que el PP debe ser reformado de la A a la Z porque está podrido, pero es pura coherencia: el pueblo llano les importa un bledo y todo el mundo lo sabe, al menos no engañan a nadie, es lo que hay,cuando se les vota se sabe lo que harán///.La izquierda, la otra mitad, la componen personas de clase media y baja económicamente, con excepciones crecientes, y personas sin creencias religiosas, también conozco bastantes.Sus representantes políticos se caracterizan por un odio demagógico hacia el que no piensa como ellos y sus cuadros de mando no tienen preparación para la política, algunos dan mucha pena, aunque muchos son hijos de papá. Nunca sabemos qué harán pues ni ellos lo saben.El nuevo PSOE es patético y de Podemos mejor no hablar .La esquizofrenia les amenaza pues reparten la pobreza entre todos pero ellos viven cojonudamente bien sin excepción.Engañan al pueblo con su verborrea social, porque luego ná de ná pero cuando acceden al poder les importa el mismo bledo que a los otros.Saludos.
Todos esos ciudadanos de izquierdas en realidad no tienen representantes.
Y no son tantos, ni muchísimo menos «la mitad».
Porque un sujeto infantil que necesita de alguien a quien votar para que le gobierne, a alguien que piense por él y desde los medios le diga lo que tiene que hacer y opinar… puede tener buenos sentimientos, sí, pero no es de izquierdas realmente. Es un niño.
Ser de izquierdas requiere madurez. Para actuar. Para pensar. Para decidir.
Apenas hay de eso en este país.
La división ‘izquierda-derecha’ tiene una fecha de nacimiento dudosa. Según algunos autores, el origen de la expresión se ubica el 28 de agosto de 1.789, durante la sesión constituyente de la Asamblea Nacional francesa.
Es curioso que los franceses de la época no bautizaron las distintas tendencias como ‘izquierda’ o ‘derecha’ sino como ‘la montaña’ (izquierda), ‘la llanura’ (derecha) y ‘la marisma’ (los indecisos que ocupaban el centro de la sala).
Ya sabemos todos lo de los ‘jacobinos’, ‘girondinos’ y los que se situaron en el ‘centro’ que no tenían una postura definida en torno al papel del Rey.
Dejando a un lado el tema histórico, hoy en día y en la actualidad de Europa, los tres movimientos de ‘derecha’ más importantes son: el liberalismo, el conservadurismo y el fascismo.
Mientras tanto, las posiciones dentro de la ‘izquierda’ son: la socialdemocracia, el comunismo y el anarquismo.
Actualmente, la ‘izquierda tradicional’ pretende moderar su discurso para ser aceptable por los sectores medios y altos del electorado y la ‘derecha histórica’ ha lavado sus textos en una suerte de populismo para lograr adeptos entre la clase trabajadora tradicional.
Las nociones de ‘izquierda’ y ‘derecha’ son relativas y, aplicadas en política, sus contenidos han cambiado, incluso polarmente. El ‘centro’ es aún más incierto y movedizo. Los tres sólo pueden ser caracterizados en un tiempo y un espacio.
A mí no me gusta la ‘derecha’ porque va a lo suyo, el lucro personal por encima de quien sea y, si como Saturno, tiene que devorar a sus hijos, pues, se los zampa.
Puestos a matizar, ‘nuestra derecha’ debería aceptar con más deportividad las reglas de juego, como hace el Partido Popular Europeo, en general.
Y es que ‘nuestra derecha’ es distinta a la de los demás países europeos salvo, quizás, la de Italia. ¡Vaya, qué casualidad!, allí también triunfó el fascismo, aunque por mucho menos tiempo.
En la clausura de un Congreso de su partido, con un público compuesto por lo más granado y florido de sus acólitos, D. Manuel Fraga dijo: «no debemos olvidar de dónde venimos». El público le ovacionó encendido, emocionado.
De allí venimos y así nos luce el pelo. ¡Cómo vamos a olvidarlo!….
Todo esto es el dogma oficial. Mentiras e intoxicación. Tergiversación de ideas y conceptos, como «democracia», o como «anarquía», que también ha sido tergiversada para que la gente no vea realmente lo que fue y lo que podría ser.
O la «socialdemocracia», que no ha sido jamás «izquierda», ni «social» ni «democracia».
Y el «comunismo», que sólo ha sido «izquierda» fuera de los gobiernos, a nivel comunidad o colectividad.
En fin, Charles, que te has tragado el dogma oficial enterito.
Yo no me identifico con algunas cosas que han hecho los que se consideran de izquierdas en este país (rescates bancarios, reformas constitucionales para beneficiar a los bancos, privatizaciones de algunos sectores de la sanidad, externalizaciones las llaman; baja calidad y exigencia en la educación y la formación profesional, etc… Sería muy largo enumerar todas aquí), ni mucho menos me han gustado otras muchas cosas que hace la «derecha» muchas veces continuista de las reformas que se hicieron sin consultar con el pueblo y otras veces aplicando sus propias reformas, aún más desiguales, sin consultarlas tampoco, ni llevarlas en sus programas electorales, ni unos ni otros.
Yo soy demócrata, pero no de los que están al servicio de un partido, sea el que sea, sino de los que exigen democracia de verdad, la soberanía del pueblo, y no de quiénes sólo buscan su voto en cada elección. Y en algunas cosas coincido con los que se dicen de izquierdas y en otras, las menos, con los que se dicen de derechas.
En democracia el soberano es el pueblo, siempre y en todo momento. El conjunto del pueblo. Y para ello debe haber herramientas que obliguen a consultarle en asuntos de interés general y que le permitan promover eficazmente esas consultas, si el «representante» del partido de turno que este gobernando se olvida de hacerlas. Porque sin consulta el pueblo no puede ejercer su soberanía ni se puede hablar de su representación.
Eso no es de derechas ni de izquierdas, o al menos de los partidos que dicen ser de uno de esos polos. Desde hace muchos años a mi esos partidos me parecen muy parecidos y muy poco democráticos.
Ni el PP ni el PSOE han querido hacer esas consultas cuando han gobernado, más allá de algún caso anecdótico y únicamente cuando le ha dado la gana. De los demás no sé lo que harán si un día gobiernan porque no tengo una bola de cristal, ni se echar las cartas.
Kuco, hay muchos que se dicen de izquierdas, y no lo son. Reivindican alguna cosa de izquierdas, pero luego actúan como derecha, que es lo que son realmente. Rescates bancarios, etc.
Es propaganda, manipulación. Son embaucadores profesionales.
No son «izquierda».
Y tú no sabes qué harán los que no han gobernado, pero yo sí. Y no necesito una bola de cristal, sino conocimientos -que están ahí para todos, sólo hay que echarle tiempo y leer- y experiencia -que también la tengo, y la pueden tener todos, si quieren, también echándole tiempo-.
Tú no tienes conocimiento ni experiencia, por eso no sabes que ningún partido político sirve a la democracia, que todos los partidos políticos son herramientas del poder económico, todos los políticos profesionales son embaucadores al servicio de ese poder económico.
Conocimientos y experiencia. Nada de bolas de cristal ni adivinación.
Y defender la democracia, esto es, la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones, por supuesto que no es de derechas. El «gobierno del pueblo» sólo es posible en una sociedad de iguales, donde no haya pobres -sin poder- y ricos -con más poder que los demás-. Los pobres también son pueblo, y no gobiernan. Una ideología que no defiende la igualdad no defiende la democracia.
Así que te equivocas también en eso, Kuco. Democracia es izquierda.
Agradezco el debate y sus aportaciones a este foro.
Creo que todos tenemos el conocimiento y la experiencia de lo que hemos visto en nuestra vida. Y con ese conocimiento y experiencia llegamos a conclusiones distintas.
El pueblo es plural en sus ideas, eso nos enriquece. Un pueblo en donde todos piensan igual en todos los temas no sería un pueblo, sería un rebaño.
El problema es que no nos dejan decidir y dirimir por mayoría los asuntos de interés general. Acertariamos más que los políticos que dicen representarnos.
No es los que dicen representarnos «no acierten». Claro que aciertan. Sencillamente deciden en su beneficio, que es contrario al nuestro.
En cuanto a los conocimientos y experiencia, todos tenemos conocimientos y experiencia en lo que hemos visto en nuestra vida.
Sin embargo, con ese conocimiento y experiencia no sabemos más de medicina que los médicos, no sabemos más de psicología que los psicólogos, de sociología que los sociólogos… de fontanería que los fontaneros…
Hay personas que saben mucho más que nosotros de muchos asuntos porque se especializan en esos asuntos, le dedican tiempo a formarse, a leer, a aprender… experimentan diariamente…
Mi campo de especialización es la política.
La izquierda y la derecha se describen bien en quien sea capaz de escudriñar los componentes de la factura de la luz.
La izquierda es progre y la derecha socialdemócrata.
Y es lo que viene reflejado en la factura de la luz.
Por cierto ambas corrientes nos salen por un ojo de la cara a los españoles.
No hay nada como estudiar la evolución del consumo energético para sacar las conclusiones de lo que es izquierda y derecha reales.
De la extrema izquierda echar un vistazo a Venezuela y aclarado.
La extrema derecha acabó el 23F.
Dogma.
Realidad.
Realidad para quienes os han lavado el cerebro, Ángel Manuel. Es lo que dicen por la tele.
Para los que pensamos por nosotros mismos, es dogma.
Perdona, se me olvidaba que tú estás en otro nivel.
Sin embargo en la realidad estamos todos. El mundo de la ideas no es tan abrumador como la realidad.
Gonzalo aprende de él, cree en Dios y en lo que dicen por la Televisión y así serás dueño de la verdad absoluta, sustentada en la Fe.
Podría ser peor, ser un imbécil de extrema izquierda que lanza un artefacto en una capilla y luego se llama demócrata.
Quizá este tipo de pseudoreflexiones (izquierda es todo lo bueno, derecha es todo lo malo que hay) es lo que ha provocado que lo que en su día se llamó «izquierda» haya, felizmente, desaparecido, salvo en los lugares donde todos sabemos que gobiernan, gozando sus ciudadanos de tanta libertad y riqueza, ¿verdad? ¿es así?.
Si cogemos la lista de paises más ricos, salvando las dictaduras árabes, por el petroleo, lugar que debería ocupar Venezuela por sus riquezas naturales, vemos que el primer país comunista que aparece es Cuba, en el 67:
http://www.eleconomist.com/2016/02/ranking-los-194-paises-mas-ricos-del.html
Es obvio que cuanto más desarrollado está el capitalismo, más riqueza existe en el país y existe un mayor número de ciudadanos que participan de la misma; es la mal llamada «clase media», pues en las democracias no hay «clases» ni luchas entre ciudadanos; eso es un invento del marxismo impropio de este siglo. Un pais justo no es el que redistribuye; un país justo es aquel cuyos ciudadanos trabajan para su propia riqueza y no para el estado,más allá de su función paternalista…perdón, maternalista, que luego me saltan con el heteropatriarcado y pasas a ser machista y defensor de maltratadores a la de 3,2,1…
El muro cayo hace casi 30 años. Y es curioso porque en vez de que los pobres oprimidos del capitalismo lo traspasaran para irse al paraiso comunista, extrañamente, en un delirio de locura, eran los libres ciudadanos del este lo que se iban al fascismo capitalista…
El drama de la izquierda es que su sueño «internacionalista» de principios del XX se ha transformado en la globalización del XXI, caída de fronteras, aranceles, libertad individual, cansancio de impuestos…en definitiva, sólo queda discutir, ideológicamente hasta que punto ha de primar el «comunitarismo» (https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/3616516.pdf) frente a la libertad individual, que no es otra cosa que la verdadera libertad.
Dentro de 20 años, cuando el capitalismo/libertad haya llegado plenamente a la India, a la Asía del índico norte y África se ponga las pilas, se verá con perspectiva de lo que en su dia se denominó «izquierda» y cómo se perdió un siglo de progreso en cuanto a riqueza, calidad de vida y democracia, allá donde pudo ser impuesta por los dictadores de turno.
Más dogma oficial. Bobadas.
En fin, todo esto ya lo dicen por la tele. No aporta usted nada al debate, Sr. Letrado.
La fijación de este tonto con el comunismo (una ideología del pasado que ya no mueve ficha y que solo se conoce en un par de países del mundo) es patética. ¿Qué tal el socialismo de países nórdicos como Noruega, Suecia, Dinamarca y Finlandia, o el de F. D. Roosevelt, que sacó de la miseria a las «bondades» de su capitalismo irregulado del crack del 29, y el socialismo de Willy Brandt, majo? ¿Dirá algo de ellos o se callará como un muerto, como suele, porque le da vergüenza asomar la jeta? ¿Prescindirá usted de las mejoras que han hecho en «su» capitalismo de idea fija los sindicatos, como las ocho oras laborables, el seguro médico, las bajas por enfermedad, la proscripción del despido libre, el subsidio de desempleo, las ayudas a las familias y demás principios anticapitalistas que son solo prohumanos y que no defienden países capitalistas cerriles como los que usted pregona, que si llegan a las bondades que asuminos serán precisamente por todas esas cosas? ¿Mirará más bien en vez de los índices de riqueza los índices de desarrollo humano de las Naciones Unidas http://hdr.undp.org/es/data ? Es usted un ignorante peligroso y dañino porque reduce lo humano al resultado de un balance. Pues lo siento: lo humano es un poco más complejo que la mera riqueza. Lea a Kant, si se atreve.
Esto es la yenka
Todo lo malo y dañino para el ser humano es de derechas. La gripe ha causado un enorme daño al ser humano en su historia. Por tanto, la gripe es de derechas.
Otro ejemplo:
Todos los bebés lloran. Don Ángel Romera llora. Por tanto, don Ángel Romera es un bebé.
Bien, pues es este es el discurrir filosófico de don Gonzalo. Así construye él sus dogmas.
Y no se ofenda don Ángel. No es esa la intención.
Un uso ejemplar de la falacia del hombre de paja, don Censor.
Censor esconde la jeta; luego Censor es un tapado. Todos los muertos están tapados, luego Censor es un muerto. Y como todos los muertos están corruptos, Censor es un corrupto.
Otro ejemplo. Censor empieza con Ce. Cetrino empieza también con Ce y Cerril lo mismo. Luego Censor es cetrino y cerril.
Censor habla con cabeza, tú con las tripas.
Habéis conseguido que la palabra corrupto ya no signifique nada con tanto nombrarla.
Sencillamente es corrupto quien no vota a Podemos.
Por esa regla de tres, quien vota a Podemos es sencillamente es partidario de regímenes dictatoriales y criminales como Cuba o Venezuela, y por supuesto de dar palizas a opositores (Bódalo) y de querer hacer callar a periodistas (Álvaro Carvajal).
Y hacer estas cosas no es como dice Gonzalo cosa de derechas.
Las libertades las trajeron los BURGUESES, no el proletariado.
Los burgueses trajeron libertades para los ricos.
A los demás no nos trajeron nada.
Que por cierto, tal y como me ha salido, parece que hablo de los reyes magos, je, je.
Que no es casualidad.
Reyes magos que traen regalos.
Burgueses que traen libertad.
«Representantes» que hacen lo que les «piden» los votantes en su «carta» que echan a la urna electoral.
Cuentos para niños.
El socialismo qué trae…
Entonces…
Mira el periódico y los libros de Historia.
La clase media no la trajo el socialismo.