Eusebio Gª del Castillo Jerez.- Once entradas de animales registró este lunes La Bienvenida en sus instalaciones: tres cachorros de meses (mastín, podenco y cruce de pastor belga), un perro abandonado por una familia, un gato ciego de aproximadamente diez días y una galga que los voluntarios hallaron atada a la puerta de la protectora junto a cinco cachorros.
En quince días de mayo han llegado a La Bienvenida un total de 34 animales (de estos, 8 han resultado adoptados y otros 5 han sido recuperados por sus dueños), una cifra por encima de la media, según sus registros. El incremento se debe, principalmente, al abandono de camadas completas. En todo caso, el pasado mes de abril, cuando ya comenzó este problema, se acogieron 45 animales.
Desde la protectora ciudadrealeña relatan que llegan a sus manos cachorros que apenas han pasado un día o dos con su madre y que carecen de las protecciones y el vigor necesario para sobrevivir. Normalmente, añaden, alguien los encuentra en una caja o un saco en el interior de un contenedor o aparecen en la puerta de la protectora, al sol. Camadas enteras, recalcan. “Llegan deshidratados y es muy difícil que salgan adelante, sobre todo cuando son cachorros de días”, lamentan. Que se salve la mitad es “prácticamente un milagro”. Las posibilidades de supervivencia en aumentan cuando los animales abandonados superan el mes de vida.
La Bienvenida recomienda la esterilización para evitar las camadas no deseadas. “Además y sobre todo el caso de de las hembras, se evitan enfermedades, quistes o problemas con el celo”, añade. Lo importante es no tener esas camadas si no se desean, insisten desde la protectora, ya que “cualquier solución posterior es mala”. En todo caso, recuerdan que no conviene separar a las crías de la madre antes de los dos meses.
La responsabilidad de la camada no deseada se tiene, subrayan, porque no se ha actuado antes correctamente. Llegado el caso, “hay que apechugar y buscarles una casa; no vale con dejarlos en un contenedor”. En cualquier caso, son conscientes de que las personas que tiran los cachorros no tienen ninguna intención de que los encuentren los voluntarios, “simplemente buscan deshacerse de ellos”.
Casas de acogida
La Bienvenida anima a los vecinos de la capital a participar como casas de acogida, haciéndose cargo temporalmente de perros o gatos; bien cachorros o bien animales que requieren algún tipo de atención o esperan a ser operados. En el caso de los cachorros, lo normal es que permanezcan en la casa de acogida hasta que resulten adoptados -habitualmente menos de un mes-.
Para la protectora es fundamental contar con una red a la que acudir cuando llega un caso que necesite de acogida. Por el momento cuentan con una veintena de colaboradores. Quienes deseen ofrecer su domicilio para tal fin pueden ponerse en contacto con la asociación en el correo electrónico info.labienvenidacr@gmail.com.
Capacidad
Actualmente, La Bienvenida se hace cargo de veinte gatos, entre las casas de acogida y sus instalaciones, una cifra por encima de su capacidad. Más desahogada es la situación de los perros, aunque rondan los 120. Algunos animales están en régimen de acogida, lo que permite dejar más espacio en los cheniles. Además, y por suerte, comentan, “cada vez la gente está más concienciada y se producen más adopciones”.
De todas formas, conluyen, “para solucionar el problema que ocasiona alguien insensible que tiene una perra sin esterilizar y se deshace de una camada es necesario encontrar una decena de personas que adopten a los cachorros”.
Quiero hacer un paralelismo perros / personas. Se recomienda que esterilicen a los perros, pero es que las personas también «les» han bajado su nivel de natalidad hasta el punto de que está ya el segundo del mundo. Muchos perros han sido abandonados, pero es que también muchas personas se han divorciado, viven solas sin dependencia o no se pueden casar porque no tienen medios. Muchos perros no tienen de qué comer y andan rebuscando, pero es que también hay muchas personas sin trabajo que tienen que pedir y buscaban en la basura (ahora ya no les dejan). Muchos perros andan banduendos y no tienen chip de identificación, pero también andan muchos emigrados ilegales y sin papeles por ahí.
En fin, ¿para cuándo una Asociación Protectora de Seres Humanos?
ya las hay, por ejemplo caritas o cruz roja.
A ver cuando dejamos de establecer cosas excluyentes, el que haya gente que defienda a los animales no exime de que se ayude a las personas de otras maneras.
Es más, mucha de esa gente que defiende a los animales también da dinero en ONGs de ayuda a «Humanos» y muchos de los que se quejan de que no haya «asociaciones protectoras de seres humanos» habría que ver lo que ayudan.
Una sociedad no es ni más ni menos que su sentido de la justicia y del juego limpio, y aunque en eso no nos destacamos demasiado (solo hay que ver la estatura ética y moral de nuestros chorizos dirigentes), en el trato que damos a los animales se refleja el trato que damos a las personas.