El Ayuntamiento de Puertollano, la protectora Huellas y la colaboración de la Policía Local, han comenzado unas jornadas de bienestar animal en el colegio David Jiménez Avendaño, que se extenderán hasta junio a otros trece centros educativos más.
Dentro del proyecto “Mascotas en la ciudad, bienestar y convivencia”, con el lema “adopta, respeta”, han hecho partícipes a los escolares de sexto de primaria de la importancia de sensibilizar a los más jóvenes de adoptar una actitud cívica y respetuosa hacia nuestras mascotas y los animales de fauna salvaje.
El concejal de medio ambiente, Carlos García, considera que es esencial que desde el pilar social que representan los niños tomen conciencia desde el principio de la necesidad de respetar a su entorno y a los animales en particular.
El galgo Robledo
Unas jornadas en las que Karen Caws, presidenta de la Asociación Protectora de Animales y Plantas, “Huellas”, ha dado a conocer a los alumnos la labor de la protectora en la ciudad, hablando del problema histórico de abandono y maltrato de razas de perros como los galgos y podencos en la comarca de Puertollano así como la finalidad última de Huellas, que no es otra que encontrar un hogar para todos aquellos animales que se alojan en las instalaciones de la carretera del Villar.
Para dar visibilidad a estos animales objeto de abandono, Karen ha estado acompañada de Robledo, un precioso galgo de pelaje negro.
Especies en extinción
Por otro lado, Luisa López, trabajadora de la Concejalía de Medio Ambiente, Parques y Jardines, ha expuesto la problemática de las especies en peligro de extinción y ha puesto varios ejemplos de animales que se encuentran en situación crítica debido a las malas prácticas llevadas a cabo por el ser humano.
Se ha puesto el foco en la contaminación y destrucción de los hábitats, la caza indiscriminada, el comercio de pieles y colmillos y el afán de coleccionismo y posesión de especies no criadas en cautividad. De la misma forma se han dado pautas de buenas prácticas que pueden adoptar desde casa para no contribuir al maltrato animal.
Perros con microchip
Por último, un agente de la policía local ha informado de la necesidad de que todos los perros vayan debidamente identificados, con el obligatorio microchip, así como que cuenten con el censo municipal, con el fin de que la localización del propietario sea ágil y también se puedan denunciar casos de maltrato o abandono animal. A tal efecto, el agente ha procedido a la identificación de Jeremías un perro voluntario que se ha prestado para la lectura del microchip con el lector que utilizan desde la Policía en su trabajo rutinario.
Además también se ha informado que el Ayuntamiento ha reeditado la guía “Animales en la Ciudad”, donde se prestan una serie de consejos y se informa de las obligaciones que supone tener mascotas, y que ya se encuentra colgada en la web municipal.