Agustín Durán es uno de los tres monologuistas que participan en “La vendimia”, un espectáculo de humor creado expresamente para “La Cultura del Vino”, y que comienza este jueves 6 de abril en el teatro municipal de Alcázar de San Juan u periplo que le llevará a ocho de los principales municipios de la provincia. Este ciudadrealeño conoce de primera mano tanto FENAVIN como el trabajo en el campo y sus vídeos en internet suman millones de visitas.
P-. ¿Es más dura la vendimia o la aceituna?
R-. Es como si te preguntan ¿A quién quieres más a papá o a mamá? ¡Es complicado! Con ambas cosas tienes la posibilidad de sufrir un esguince de riñón y terminar con los lomos desollaos. Lo peor de la aceituna es el frío, aunque a los 10 minutos de estar dando palos te sobra ya toda la ropa de abrigo, en cambio el calor de la vendimia malamente lo puedes solucionar quitándote ropa porque si te descamisas te pega el sol y corres el riesgo de acabar más quemado que los motores de Fernando Alonso…Si hay que elegir alguna de las dos actividades,…yo prefiero elegir quedarme en mi casa acostado.
P-. El humor manchego, como el vino, tiene Denominación de Origen, ¿cuál sería la nota de cata del humor de la tierra?
R-. Es un humor envejecido en barrica, ya que tiene mucha tradición y arraigo. Nuestros mayores son una gran fuente de inspiración, puesto que sus formas, su léxico, su retranca…son un inagotable manantial del humor. Además tiene un toque afrutado ya que las historias alrededor del campo producen una gran simpatía en el público y sabe un poco a madera, a la madera de grandes cómicos manchegos como José Mota, Joaquín Reyes, Millán Salcedo, Julián López, Goyo Jiménez…que con su talento han puesto al humor manchego en la primera fila, obteniendo el respeto, el cariño y la admiración del gran público, facilitándonos a los que venimos detrás el camino.
P-. ¿Cuál es su recuerdo más especial vinculado al vino?
R-. Pues gracias al vino hice un sketch sobre las catas, que me sirvió para llegar a un amplio público, el vídeo en Facebook superó los dos millones y medio de reproducciones y me hizo aparecer en medios nacionales e internacionales. Desde ese día le cogí un poco más de cariño al vino y un poco también pero menos a la vendimia.
P-. ¿Qué tienen en común el humor y el vino?
R-. El humor y el vino muchas veces necesitan una época de maduración. Hay mucho humor que funciona de forma fresca, que puede ir de la viña al escenario sin estar una temporada aparcado en la barrica, pero otro humor necesita una maduración, un proceso de fermentación más amplio, un trabajo de elaboración más complicado. Ahora se habla mucho de los límites del humor, y hay una frase de Woody Allen que podría explicar mi respuesta “Comedia = Tragedia + Tiempo”. Si acabas de caerte de cabeza al suelo y te han dado tres puntos en la frente, probablemente no estarás para muchas risas, pero conforme pasen unos días o semanas podrás reírte de tu caída, ya lo habrás envejecido en tu barrica. Eso sí, soy de los que piensan que en esto del humor hay vinos/temas que por mucho tiempo que pase nunca habrán envejecido lo suficiente como para poder contarlo/servirlo y que sea del gusto de todos.
P-. ¿Cómo ciudadrealeño seguro que conoce FENAVIN desde sus inicios?, ¿qué opinión le merece la feria?
R- La conozco, la he visitado y sé de su importancia a nivel de negocios. Tengo amigos bodegueros que me cuentan de la importancia y de la gran cantidad de contactos que hacen en esos días. Además cómo ciudadrealeño sé que la capacidad hotelera se dispara, anoche hablé con los amigos de Bodegas Iniesta y me dijeron que este año se alojaban en Almagro porque todo en Ciudad Real estaba ya agotado, con lo cual la inyección para la hostelería en toda la provincia es también un buen balón de oxígeno. Creo que voy a dejar esto de andar por ahí diciendo tontás y voy a abrir una bodega “Viña Calva”, “El vino para los que no tienen un pelo de tontos…ni de listos” ¡Dime que no es comercial el nombre!