Eusebio Gª del Castillo Jerez.– La Hermandad Obrera de Acción Católica, la Juventud Obrera Cristiana y el grupo Mujeres y Teología ha celebrado esta tarde un acto en la Plaza del Pilar para conmemorar el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Recalcaba Ángel Ramón Bobadilla, miembro de la JOC, este adjetivo, trabajadora, que con el paso del tiempo se ha ido perdiendo en las celebraciones de cada 8 marzo.
Un acto en el que se han reivindicado los derechos de la mujer y se ha dado lectura a un manifiesto. Por otro lado, se ha realizado una actividad que ha consistido en depositar, a los pies de la carpa donde han instalado una mesa informativa, vasos en los que los participantes han escrito el nombre de una mujer importante en sus vidas, con velas encendidas en su interior.
Celebro que la JOC haya participadoen está celebración.
Yo siento que uno los nombres de mi hermana, mi madre y mi esposa a tantos otros en esas velas.
Ellas me iluminan.
Es necesario un sentido nuevo a la idea y al rol de la mujer del siglo XXI en la vida de la Iglesia con el objetivo de alcanzar su participación plena y efectiva.
Ya sé que la Iglesia no es una democracia sino una sociedad divino-humana y, por tanto, las razones que justifican y que pueden exigir una verdadera participación de las mujeres en la Iglesia son de naturaleza teológica, es decir, que se deben buscar dentro de la fe y no fuera.
No obstante, recientemente, el Papa Francisco dijo: «la Iglesia es mujer, es «la Iglesia», no «el Iglesia»…¡Qué absurdo!…
La posición de preeminencia en la toma de decisiones por mujeres en mi parroquia (lo hacen casi todo) no es un ideal, es la REALIDAD COTIDIANA.