Santos G. Monroy.- Son los caballeros de la poderosa Orden de Calatrava, que nos desafían aun muertos, 800 años después. El complejo medieval de Calatrava-La Nueva es el delirio de cualquier aficionado a las películas de Indiana Jones, pero esta soberbia ciudad de la Edad Media, única en el mundo en su género, podría ser perfectamente la envidia de Europa si las administraciones públicas impulsaran su enorme potencial.
Uno de los atractivos menos conocidos de este parque arqueológico está en la sala capitular, el “parlamento” de esta orden militar fundada para contener el empuje árabe que protagonizó algunos de los episodios más importantes de la historia de España entre los siglos XIII y XV. En la actualidad rara vez se abre al público esta sala por motivos de seguridad, aunque los gestores del parque no descartan habilitar en el futuro una estructura que permita hacerlo.
En una reciente visita hemos podido tomar imágenes de la gran habitación, rodeada de una doble hilera de escalones donde se sentaban las dignidades calatravas. En sus tiempos estaba decorada por un bello artesonado, y las paredes revestidas de frescos y tapices, de los que aún se conserva un fragmento, que representa la embestida a caballo de un caballero cristiano y un guerrero almohade.
Pero el suelo guarda aún otra sorpresa: media docena de esqueletos reposan en hilera. Fueron enterrados a principios del siglo XIII, y hallados durante la campaña arqueológica desarrollada entre 2001 y 2004. Alguno de ellos está en perfecto estado, con todos sus dientes, e incluso hay otros revestidos con los jirones de sus ropas. Los calatravos no se rinden, ni aun después de la muerte.
Calatrava-La Nueva, gestionado por el Ayuntamiento de Aldea del Rey bajo la tutela de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, se merece mucho más. Sería deseable que la administración regional y el Gobierno de la nación se plantearan la posibilidad de fortalecer la oferta con un museo y centro de interpretación como el que tienen otros muchos espacios de España y Europa, e incrementara la inversión en campañas arqueológicas y en la mejora de la señalización e información en el recorrido por el parque.
El resultado sería, sin duda, un referente para turistas y aficionados a la historia de todo el mundo. Los caballeros de Calatrava nos desafían a ello aunque, eso sí, ojalá nosotros no tengamos que esperar otros ocho siglos…
A los políticos de la zona no les interesa la historia, solo el dinero que entra en sus cuentas corrientes… Si incluso pensaban hacer un parking subterráneo en el Torreón.
Eso de la historia es para la rara gente culta, a la mayoría sólo les gusta el fútbol y emborracharse.
Una pasada. Memoria inmortal para estos caballeros de la Cristiandad.
Jeje, si te dijera quién formaba parte del equipo cuando aparecieron las sepulturas y los frescos… Creo que ha sido una de las cosas más emocionantes de mi vida, por lo inesperado (ninguna documentación había de enterramientos en la sala capitular) y por lo que significaba para continuar excavando el castillo (algunos de los que entonces mandaban en la administración decian que allí no había nada más que descubrir). Sigue siendo un misterio quienes eran y porque cada uno está sepultado de formas distintas y, aunque unos al lado de los otros, las sepulturas no están todas al mismo nivel (hay uno incluso enterrado directamente en la tierra) Por cierto, han pasado 16 años desde que aparecieron y la sala capitular sigue cerrada al público, que yo sepa.
Una pena. Un descubrimiento impresionante.
Enterrarse no en una capilla (salvo que alguna vez lo fuera), sino en el centro físico de poder de la orden puede tener sentido quizás no una explicación.
Las distintas formas de enterrarse son quizás alternadas en la cronología. Ya sabes que pueden lanzarse todo tipo de hipótesis.
Te envidio por haber sido testigo de este hallazgo. A mí también me hubiera emocionado.
El interés por los monjes militares es creciente. No entiendo que las Administraciones no respalden su investigación. En la Diócesis de las Órdenes Militares es aún más absurdo.
Saludos, estoy en la capital.
Es una lástima que no sepan valorar la historia de nuestra tierra, y no la potencien, en cambio si van a rodar algún capitulo de Juego de Tronos , todos querrán salir en la foto.
Os recuerdo que el >impulsor de la recuperación del Sacro Convento fue D. León el cura de Calzada ya que a los aldeanos poco les importaban las piedras.
Que pena !!!
Aún más sangrante es lo de la vecina Salvatierra, en este caso en el término de Calzada de Calatrava, fortaleza que albergó una de las batallas más espectaculares de asedio de toda la Edad Media europea en 1211. La prioridad cinegética en el uso del suelo rústico está sepultando en escombros y excrementos este vestigio impresionante de nuestra historia mientras todas las administraciones, local, provincial y regional, miran hacia otro lado. En cualquier otro lugar de Europa esto sería impensable, pero aquí estamos en la Mancha cateta y profunda.
Penoso y sonrojante
Razón tienes. Aunque es de propiedad privada, no ponen problemas para visitarlo, y es una fortaleza realmente impresionante. En realidad, como castillo, más potente que el de Calatrava La Nueva, lo cual es normal si piensas que mientras que en este se libraron tremendas batallas, por estar situado en tierra de frontera, Calatrava no tuvo que soportar asedio alguno (bueno, sí, en el XV, pero eran luchas intestinas) puesto que rápidamente la línea de frontera se desplazó hacia el sur.
Y sí, es un drama que se esté dejando que el tiempo lo consuma, y las administraciones nunca han mostrado verdadero interés por hacerse con él (he oído que el propietario estaría encantado, pero claro, no piensa soltarlo gratis).
Ah, por cierto, en cambio dinero pa parques temáticos fantasma parece que (otra vez, «modo marmota on») sí hay… Donde se ponga un parque temático kitsch, que se quite una buena fortaleza medieval, clarostá.
Coincido en todo con lo expuesto en el artículo y en los comentarios. Es vergonzoso que no se cuide ni se invierta en una riqueza cultural como esta.
Como en tantas otras cosas, mucho hay que aprender y cuestionarnos como sociedad (manchega). Cuando nos rebanamos los sesos intentando ver como reactivar la economía, en muchas ocasiones las tenemos ante nuestros hocicos y las dejamos pasar. La falta de inversión y promoción en este caso es clamorosa, e impensable no ya en otras partes de Europa, sino de esta España doliente nuestra. Si Aragón o Cataluña tuvieran estas dos fortalezas otro gallo cantaría, en mayor o menor medida, inversión y promoción turística hace mucho tiempo que estarían en marcha junto a planes de sostenibilidad del monumento y su entorno, al que por cierto, sumamos el Palacio de Clavería y el del Almirantazgo y tenemos una ruta (a la que sumar muchos otros enclaves) envidiable.
Tremendo potencial totalmente desaprovechado. Otras veces olvidado y a veces, peor aún: desconocido.
Os recomiendo daros una vuelta por este blog, que saca a relucir precisamente todos estos lugares manchegos que se merecen un destino mejor:
http://manchaignota.blogspot.com
Perdonad mi atrevimiento, pero no creo que los esqueletos que se descubrieron en la Sala Capitular de Calatrava la Nueva, sean de caballeros de la Orden, más creo que sean de los distintos Priores de la dicha Orden, que eran enterrados en dicha sala, siguiendo la costumbre de la Orden Cisterciense a la que la Orden pertenecía. Los caballereo eran enterrados en el Campo Santo y los monjes en el Claustro, lugar que no se ha escavado adecuadamente e incluso muy mal. No hay más que fijarse en lo elevado que está el Claustro y la escalerita que va a la Sala Capitular con unos escalones que no son sino trozos de pizarra de una de las tumbas de los del camposanto.
Por cierto que estos mismos datos durante más de diez años se lo estuve diciendo a la arqueóloga de turno, y nunca me hacía caso, y cuando excavaron después de años se encontraron con este hallazgo, que cualquier historiador suponía. El problema de siempre, no se aúnan esfuerzos entre arqueólogos e historiadores.
Para el que le interese, publique un libro que se titula «Luces y Tinieblas», sobre la Orden de Calatrava que no está del todo mal, os lo recomiendo, no porque desee vender, sino porque lo escribí durante muchos años y con mucho cariño, sin saber que iba a ser mi primer libro. Le tengo un especial cariño. Un saludo para los amantes de la historia y de la belleza, porque ciertamente ¡LA BELLEZA UNE A DIOS!