El proyecto de Presupuestos 2017 de Castilla-La Mancha contempla una partida de 668,6 millones de euros para la Consejería de Bienestar Social, un 9,34 por ciento del gasto no financiero del presupuesto global del Gobierno regional y representa un 4,09 por ciento de incremento respecto al presupuesto de la Consejería en 2016.
Así lo ha anunciado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, antes de su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos de las Cortes de Castilla-La Mancha para informar sobre la ejecución presupuestaria, a fecha 30 de septiembre de 2016, de los diferentes programas de Bienestar Social y del Proyecto de Presupuestos de la Consejería para el ejercicio 2017.
Tres objetivos de Gobierno
Por ello, los Presupuestos 2017 de la Consejería de Bienestar Social contemplan los tres grandes objetivos del Gobierno del presidente García-Page, tal y como ha explicado la consejera, ya que, tal y como ha afirmado la consejera, “mejoran la calidad de vida de las personas, sobre todo de las más desfavorecidas”, consolidando un gasto no financiero de 661 millones de euros; y “generan más riqueza y empleo”, a través del mantenimiento de un sistema de Servicios Sociales que hará posible continuar con el compromiso de creación de 500 nuevos puestos de trabajo en esta legislatura, entre empleados públicos y por concertación con ayuntamientos, entidades privadas y tercer sector, que sirvan para mejorar el bienestar social de nuestra región”, ha puntualizado Sánchez.
Por último, estas cuentas de la Consejería de Bienestar Social para 2017 mantienen un “presupuesto sostenible, que equilibra calidad y cantidad de los servicios de atención a los ciudadanos”, con el objetivo de “mejorar la construcción del bienestar social en Castilla-La Mancha”, ha finalizado la consejera.
Con 668,6 millones, la Consejería de Bienestar Social crece 26,27 millones de euros respecto al pasado ejercicio y 61,32 millones de euros respecto al presupuesto destinado en 2015, con lo que en dos años de Gobierno del presidente García-Page ha crecido un 10,10 por ciento. Prueba de ello es que “la Consejería va a destinar 1,8 millones de euros al día para atender políticas de Bienestar Social”, ha destacado la consejera.
17 millones de euros más en Dependencia
La aprobación de estos presupuestos permitirá a la Consejería de Bienestar Social la puesta en marcha de seis importantes medidas sociales, de claro interés para los ciudadanos de Castilla-La Mancha, que se orientan a la consolidación y ampliación del Sistema de Atención a la Dependencia en la región, “al que se dedican 413 millones de euros en 2017, unos 17 millones de euros más que en 2016 y 44 millones de euros más que en 2014”, ha subrayado la consejera.
La Ayuda a Domicilio tendrá un presupuesto total de 39 millones para atención a la dependencia y para prevenirla, con un aumento del 25 por ciento respecto al presupuesto ejecutado en el año 2015. Las ayudas técnicas y productos de apoyo para personas en situación de dependencia tendrán un presupuesto de 1.012.963 euros, con un 18 por ciento de incremento respecto a 2016, y un 47 por ciento respecto a lo presupuestado por el Gobierno del Partido Popular en 2015. El Servicio de Promoción de la Autonomía Personal “MejoraT” contará con 2,70 millones de euros de presupuesto, lo que supone 1,22 millones de euros más respecto a 2016.
Atención a Discapacidad y Mayores
El Programa de Atención a la Discapacidad se incrementa en un 7,44 por ciento respecto a 2015, al pasar de 97,69 millones de euros en 2015 a 104,96 millones de euros en 2017, para la apertura de nuevos centros de atención a personas con discapacidad, como el CADIG de Talavera de la Reina y la puesta en marcha de nuevos servicios y centros de Atención Temprana en la región.
El Programa de Atención a Mayores, con 280,3 millones de euros, crece un 11,01 por ciento, unos 28 millones de euros más respecto a 2015, “lo que permite poder seguir prestando una atención de calidad a nuestros mayores, así como apostar por un Sistema de Atención a la Dependencia que, de igual forma, ve crecer sus recursos para lograr la inclusión de más de 1.600 personas mayores en centros residenciales y prevé la apertura de las residencias de mayores de Lezuza, Vianos y El Ballestero”, ha anunciado la consejera.
El presupuesto posibilitará triplicar las estancias temporales en centros residenciales respecto a 2014, con una previsión superior a los cuatro millones de euros, que triplica la cuantía destinada a este programa en el último presupuesto elaborado por el Gobierno del Partido Popular. Además, consolidará la recuperación del Programa de Termalismo en Castilla-La Mancha, tanto social como terapéutico (para personas afectadas por Alzheimer y Parkinson) y permitirá mantener los más de 600 puestos de trabajo directos, con una partida que no existía en 2015 al haber sido suprimida en la pasada legislatura.
Plan Integral de Garantías Ciudadanas
Para el Plan Integral de Garantías Ciudadanas, la Consejería de Bienestar Social prevé destinar 26,2 millones de euros, para acciones que garanticen el acceso de personas en situación de pobreza o exclusión social a políticas activas de empleo, a prestaciones educativas, pagos de suministros energéticos, y prestaciones de garantía de rentas.
Tiene un significativo incremento de la dotación destinada al Ingreso Mínimo de Solidaridad, que crece un 26,2 por ciento respecto a 2016, hasta alcanzar los 10,41 millones de euros. El presupuesto dedicado a renta mínima en Castilla La Mancha va a crecer un 36,2 por ciento desde que Emiliano García-Page es presidente. También incluye un millón de euros para el Plan contra la Pobreza Energética, pionero en Castilla-La Mancha y en España que ha atendido a 32.351 personas en situación de pobreza severa en 2016, de los cuales un 48 por ciento ha sido población infantil (15.593 menores).
Protección de Menores y Familias
En materia de Protección de Menores, estos presupuestos prevén 807.310 euros, un incremento del 2,24 por ciento respecto a 2016, que permitirán la ampliación de la red de apoyo residencial a menores tutelados, con la apertura de un nuevo piso de acogida de menores tutelados para favorecer el bienestar de los mismos en un ambiente de hogar; el desarrollo del Programa de Autonomía Personal para menores tutelados que acceden a la vida adulta, y la ampliación del Programa de Acogimiento Familiar de menores, para favorecer el acogimiento de menores tutelados.
En cuanto a la Atención a las Familias, el presupuesto permitirán el desarrollo del Plan CUIDA de apoyo a familias con hijos e hijas en situaciones de dificultad, iniciado en 2016, con una dotación de un millón de euros en 2017, mediante el desarrollo de las Aulas de Familia y la ampliación del programa “#TuCuentas” puesto en marcha en 2016, y destinado a menores y jóvenes que puedan sufrir acoso o ciberacoso, con una partida casi 400.000 euros en 2017, el triple que en 2016.
Ejecución de presupuesto en 2016
En lo que respecta a la ejecución global del presupuesto 2016 de la Consejería de Bienestar Social, la consejera ha informado que ha sido del 78,96 por ciento, a fecha 30 de septiembre de 2016, un 3,13 por ciento más de ejecución que la llevada a cabo en 2015, que fue del 75,83 por ciento. Por su parte, la ejecución de los ingresos, a 30 de septiembre, ascendía a 82,9 millones, un 48,59 por ciento sobre reconocido.
Los ingresos por transferencias corrientes desde los Ministerios del Gobierno de España, eran muy bajos en esas fechas, de un 14,92 por ciento, debido a que no se había recibido en septiembre ni un solo euro de los más de seis millones inicialmente presupuestados para luchar contra la pobreza infantil y del Fondo de Dependencia se había ingresado solo un 39,31 por ciento de los 97,39 millones de euros contemplados en el nivel mínimo previsto.
Respuesta social
Aurelia Sánchez ha concluido señalando que los Presupuestos de 2017 de la Consejería de Bienestar Social “optimizan la respuesta que queremos dar a los ciudadanos de esta región”, tras la política social llevada por el anterior Gobierno del Partido Popular, que ha tenido “efectos limitantes, ha sido olvidadiza y ha tenido efectos corrosivos en el tejido social porque no se ha limitado a desmontar políticas de bienestar social muy consolidadas desde hacía varias décadas. Además ha tenido un efecto diluyente en las relaciones entre la Administración regional, la sociedad civil, que dedica sus esfuerzos al desarrollo de las políticas sociales y la ciudadanía, como beneficiaria de las mismas”.
“Esto ha producido desconfianza”, ha lamentado la consejera, que ha anunciado que el objetivo de los presupuestos en política social del Gobierno del Presidente García-Page es doble: por una parte “recuperar de forma progresiva y sostenible el marco presupuestario imprescindible para que los servicios sociales cumplan con la tarea que tienen encomendada, mediante la colaboración de todas las administraciones” y, por otra, “reconstruir, no sólo la gestión social sino en gran medida la complicidad, la confianza mutua que hacen posible el diálogo social, entre entidades y Gobierno”.
